CRÓNICA | ✍ ARDA GÜLER SE ESTRENA A LO GRANDE: REAL MADRID 4 – 0 CELTA DE VIGO

Una crónica de: @luismanper

Lleva el Real Madrid varios partidos con mejores resultados que juego pero esa circunstancia que para muchos equipos sería un problema, para los equipos grandes es una virtud hasta el punto que los campeones de Liga suelen ser aquellos que han sido capaces de sumar puntos en partidos en el que el juego deja bastante que desear. Y en eso el Real Madrid está ofreciendo un máster durante el último mes.

En el partido de hoy ante un Celta que llegaba con la presión que le metió la victoria del Cádiz ayer ante el Atleti, se esperaban rotaciones para compensar a los jugadores más cargados de minutos especialmente tras un duelo tan exigente como el del pasado miércoles ante el Leipzig, y Ancelotti cumplió las expectativas apostando por Lunin en portería, Lucas Vázquez y Mendy en los laterales con Rudiger y Nacho como centrales, Camavinga en el eje del equipo con Valverde y Modric como interiores, con Brahim en el otro eje del rombo, con Rodrygo y Vinicius en la delantera.

Imagen: realmadrid.com

En la primera parte el equipo estuvo espeso, intentando encontrar huecos en una defensa visitante muy poblada por lo que se vio poco peligro más allá de los intentos aislados de Camavinga hasta que a la media hora de partido un córner botado por Modric, recordando jugadas míticas de la historia del Real Madrid fue cabeceado por un central como Rudiger aunque esta vez el balón fue repelido por Guaita quedando a los pies de Vinicius, que si bien su primer disparo lo rechazó el portero, a la segunda oportunidad sí consiguió abrir el marcador.

A partir de ese momento, al Real Madrid se le acabaron las prisas y se propuso controlar el ritmo del partido con Camavinga y Valverde omnipresentes recuperando muchísimos balones, pero el francés estaba demasiado hiperactivo hasta el punto que en el descuento de la primera mitad provocó una falta en un lateral del área que acabó con un cabezazo vigués que afortunadamente se marchó fuera. La segunda parte empezó con otro sobresalto en forma de cruce de cables de Vinicius, que sufrió un agarrón descarado por parte de Mingueza que acabó en otro empujón al pecho del rival repitiendo su criticada acción contra el Leipzig, en una acción que el brasileño debe aprender a moderar con el paso de los años.

Imagen: realmadrid.com 

La segunda parte transcurría igual de anodina que la primera con una única oportunidad de Brahim que atrapó Guaita hasta que Ancelotti decidió, por fin hacer cambios en el último cuarto de hora apostando por Joselu en lugar de un Rodrygo que atraviesa un momento de forma cada vez más preocupante, después por Kroos y Tchoaumeni en lugar de Modric y Brahim para finalmente cambiar a Vinicius y Camavinga para dar entrada a Ceballos y Arda Guler, lo que unido a que los cambios del Celta deshilacharon al equipo gallego, se decantó el partido por medio de Rudiger quien volvió a rematar un córner perfectamente botado por Modric, estrellándolo esta vez con el larguero con tan mala suerte para el portero que el balón fue directo a su espalda convirtiéndose en el 2-0, lo que acompañó Vinicius poco después con otro centro peligroso que Guaita no acertó a despejar y que un jugador rival se lo metió en propia para colocar el 3-0 que iba a redondear Arda Guler aprovechando un fantástico pase de Ceballos para regatear al portero y colocar el 4-0 en un disparo sin apenas ángulo para estrenarse con el Real Madrid, en un partido de los que no se recuerdan al final de la Liga pero que son imprescindibles para proclamarse campeón.