CRÓNICA | ✍ CAMPEONES DE INVIERNO: REAL MADRID 1 – 0 RCD MALLORCA

Una crónica de: @luismanper

Esta primera vuelta que se cierra en esta jornada intersemanal será recordada por la tremenda irrupción de Jude Bellingham, con un protagonismo estelar que cuesta recordar a un recién llegado al Real Madrid, no menos importante ha sido el papel de Antonio Rudiger, quien partió como teórico suplente en aquel partido veraniego de San Mamés en el que la rodilla de Militao cedió, y que desde entonces lo ha jugado prácticamente todo, liderando la defensa madridista a pesar de estar acompañado de dos pesos pesados del vestuario como el recientemente lesionado de gravedad David Alaba o el capitán Nacho, y si algo le faltaba a Rudiger era aportar en ataque como ha hecho hoy rematando de cabeza un córner botado por Modric que nos va a permitir acabar la primera vuelta como líderes, en ese título honorífico que los clásicos llamaban campeón de invierno.

Recuperaba Ancelotti algunos efectivos en el día de hoy y que mejor que meterlos directamente a un once titular formado por Lunin en portería, Carvajal y Fran García en los laterales con Rudiger y Tchoaumeni como centrales, Kroos y Valverde en el mediocampo flanqueados por Modric y Bellingham, quedando la delantera para Rodrygo y Vinicius.

Imagen: realmadrid.com 

El partido se esperaba espeso, tal y como los suele plantear Javier Aguirre, y se cumplieron nuestros presentimientos cuando vimos que el mexicano plantó una defensa de 5 y otra línea muy juntita de 4 en el mediocampo con Larin como único delantero, cuya primera intervención a los 10 segundos de partido ya le valió la primera amarilla, confirmando que el partido que iban a plantear iba a ser de todo menos bonito. En partidos como éste en los que apenas hay espacios no queda otra que intentar mover el balón muy rápido para descolocar al equipo rival y tirar desde fuera cuando se pueda como hizo Vinicius con un trallazo desde 30 metros que obligó a Rajkovic a lucirse, como hizo poco después cuando rozó otro disparo de Vinicius que salió lamiendo el palo, esas fueron las únicas ocasiones de la primera parte junto a un disparo de Valverde que se fue a las nubes.

Y cuando creíamos que el 0-0 al descanso era inevitable un centro a la olla del Mallorca fue rematado por Antonio Sánchez al larguero botando sobre la línea y dejándonos el corazón en un puño, como repitió ya en el descuento cuando el árbitro no pitó una clara obstrucción a Lunin en el área pequeña que a punto estuvo de costarnos el 0-1 cuando más daño hace. Con esos sustos se llegó al descanso y por si no hubiera sido suficiente, a la vuelta de los vestuarios en una falta al borde del área de Lunin, el árbitro dio la ley de la ventaja y lo aprovechó Samu Costa para sacarse un disparo que rebotó en un defensa y se volvió a estrellar en el palo, pero el Real Madrid no se quedó atrás y un disparo de Rodrygo lo sacó Rajkovic con una mano prodigiosa que dejó muerto el balón en el área, lo que aprovechó Brahim para cabecear en plancha un balón que repelió el poste paseándose por la línea de gol sin que nadie la empujara, dejándonos con la miel en los labios en un gol que ya se cantaba en el Bernabéu.

Imagen: realmadrid.com 

Ancelotti siguió moviendo el avispero sacando a Joselu por Kroos, para dejar un 4-1-4-1 muy arriesgado en el que Rudiger se las tenía tiesas con Larin hasta que fue sustituido, y el defensa alemán pudo soltarse en ataque hasta el punto que cuando nos dimos cuenta había colocado en la escuadra un córner botado por Modric, que sonó a deja-vú lisboeta y que provocó que al Mallorca le entraran las prisas después de 75 minutos perdiendo tiempo, mientras que Carletto apostó por dormir el partido metiendo a Lucas Vázquez y Ceballos por Rodrygo y Modric, cambios que consiguieron que pasara poco más allá de un contraataque de Maffeo en el que el lateral argentino echó el resuello para acabar centrando a las manos de Lunin.

Así acabó la primera vuelta en la que el Real Madrid acabará líder pelando a brazo partido con un Girona tan impresionante como inesperado y que, se presenta como el rival más duro por una Liga que puede ser recordada como la Liga de Rudiger y Bellingham, que han sostenido al equipo en la primera vuelta erigiéndose como líderes indiscutibles de un equipo llamado a darnos grandes alegrías en este 2024 recién empezado, en el que deseamos a todos los seguidores de El Diario de Mou mucha salud y que se cumplan todos sus deseos.