CRÓNICA | Nadie para al Madrid: Real Madrid 81 – 80 FC Barcelona

Una crónica de: @elcarrildel2

El Real Madrid se ha impuesto (81-80) al FC Barcelona, en el segundo partido del play off final de la Liga ACB, disputado esta noche en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid.

Fue el triunfo de la fe, de las ganas, de un equipo grandioso y de unos baloncestistas excelsos. No pudieron con ellos ni el antibaloncesto de Pesic, que supo sacar lo peor del baloncesto yugoslavo, ni los colegiados, que permitieron a los jugadores del FC Barcelona todos los atropellos al reglamento que tuvieron a bien cometer. Nada que nos sorprenda del trío arbitral de hoy. Muy visto está a estas alturas don Antonio Conde, y empieza a coger su fama el madrileño don Rafael Serrano. Junto a ellos, Martín Bertrán, que ni supo ni quiso variar el devenir de los acontecimientos.

Llevábamos tres minutos de encuentro, y ya permitieron los colegiados un codazo de Singleton a Facundo Campazzo, que quedó tendido en el parquet. Eso descentró sobremanera al base argentino, que no tuvo su mejor noche. El ataque en inferioridad terminó con una falta de ataque de Randolph. Minutos después, fue Pesic en persona el que entró a la trifulca con Rudy Fernández, impidiendo al balear sacar desde detrás de la línea. Intervino el Sr. Conde, obligando a Rudy a desplazarse unos metros hacia atrás. Ese era el nivel que había puesto el Sr. Pesic, permitido por los colegiados.

En esas circunstancias, el Madrid se atascó en ataque. Nos costaba un mundo anotar. Randolph no comenzó acertado. El Barcelona seguía dominando los rebotes, una faceta del juego sobre la que venimos hablando toda la temporada. Perdíamos cuatro balones en este primer cuarto. El público gritaba fuera fuera fuera, dirigido a los señores colegiados. Minuto 10, 11-17.

El segundo cuarto comenzó por los mismos derroteros. Hanga ejercía de leñador jefe por el FC Barcelona. Aun así, el quinteto de Laso en este segundo periodo luchaba contra viento y marea, con Ayón creciendo por momentos, dejándose la vida en cada balón debajo de los tableros. Por los visitantes aparecía Heurtel como gran referente, imparable. La dureza que los árbitros permitían a los azulgranas no era la misma que la permitida a los defensores blancos. Taylor vio su tercera falta, quedando así privado el Madrid del que suele ser su más correoso defensor, junto al Facu. El Madrid lograba recuperar puntos. Tuvo Carroll sus primeros fogonazos de la noche, si bien no conseguíamos disminuir la distancia. Nos pusimos dos arriba (29-27, minuto 17), pero un parcial de 0-7 dejó el electrónico en el descanso en 29-34.

El marcador indicaba por si solo el pobre juego desarrollado por ambos equipos. Manifestó Pablo Laso al final que no veía normal el tipo de dureza visto hoy sobre la cancha. El mismo empobrece el espectáculo, dijo, algo que no preocupa en exceso a algunos entrenadores, por ejemplo el Sr. Pesic.

El tercer cuarto dejó entrever que los árbitros querían bajar un tanto el pistón del juego sucio blaugrana. David Carnicero calificó entonces de garrotazo una falta de Tavares, mientras las de Claver eran simples faltas. Tomic cometió su cuarta falta personal, una lástima, pues no estaba siendo su mejor partido. Hanga volvió a propiciar un nueva tángana, que llevó a los colegiados al instant replay. Se confirmaron los peores augurios. Dieron por válido un triple a Oriola previamente anulado y además falta del Madrid. Momentos después pitarían otra inexistente al Facu, golpeado en la nariz por Heurtel. Estaba claro que por el trío arbitral no iba a quedar.

Heurtel seguía adelante con su exhibición. Los rebotes (18-29) continuaban cayendo del lado azulgrana. Randolph desaparecido. Gritos insultantes contra la ACB en la grada, con Florentino escuchando atento en el Palco. Campazzo cometió su cuarta falta personal, confirmando la persecución que estaba sufriendo. Los tiros libres nos mantenían en el marcador. De repente, un arranque de furia del Madrid significó que, en apenas un minuto, Carroll, Rudy y Llull anotaran tres triples seguidos, para mantenernos vivos, aunque panza arriba. Claver cometió una falta técnica por sus protestas airadas, pero el Sr. Conde prefirió mirar para otro lado. Tompkins falló un tiro libre, para dejar el marcador al minuto 30 en un 53-59.

Parcial de 4-0 al inicio del último acto. 57-61. Técnica a Ribas por la enésima protesta airada. 59-61. 62-62 un instante después. La grada se vino arriba. Ayón perdió entonces dos balones seguidos (62-67). Entró a cancha Felipe, aplaudido a rabiar por el respetable. Seguíamos sin verlo claro en ataque. No entraban los tiros de tres, algunos de ellos precipitados. Campazzo cometió su quinta falta personal a 2,40 del final. Llull anotó un triple llegando en carrera para el 68-74, a falta de 1,45. Randolph vio aro de tres por fin (72-76, a 42 segundos del final).

Disputa de un balón entre Rudy y Pangos en la zona azulgrana. Los colegiados dan balón al Madrid. Pesic pide la revisión a que tiene derecho. Una vez más, los árbitros se desdicen y dan balón al Barcelona. El Palacio estalla. De manera incomprensible, Pangos agota los cinco segundos sin sacar. Anota Llull dos tiros libres. Heurtel es superlisto, dice la Srta. Valdemoro, que aunque parezca increíble es capaz de superarse a si misma con cada comentario. Triple de Randolph (77-79, a falta de 15,5 segundos). Su quinta falta. Entra Deck. Claver falla un tiro libre. Falta a Llull, que bien podía ser de tres (en caso de anotarlos significaría el empate) o de dos. ¿Adivinan qué dijeron los árbitros? Exacto, de dos. Anota Llull el primero. No entra el segundo. Rudy coge el rebote, el más importante del partido, y puede que de la final. Bola a Llull, que penetra, amenaza con lanzar, pero asiste a Carroll. El de Wyoming hace volar a Claver. Mira el aro, coloca pies y manos, y descerraja un triple limpio, definitivo, ganador, inolvidable. 81-80. El Madrid acababa de ganar el segundo partido de la serie. Contra viento y marea, contra el FC Barcelona y contra los árbitros. Me atrevo a decir que incluso contra la ACB.

El Palacio estalló definitivamente. En las gradas y en la cancha. Nadie se movía de su sitio. Hacía mucho tiempo que no vivíamos algo así. Paso de gigante hacia el título. La batalla continuará el próximo miércoles en el Palau Blaugrana.

Nos despedimos dando las buenas noches a Carroll (que se llevó el balón): 25 puntos anotados en 22 minutos de juego, para una valoración de 28. Tras él, Tavares (9 rebotes, 24 de valoración), Llull, Ayón y Rudy. También a Randolph, al que por fin vimos sonreír, al igual que a Deck. Y, cómo no, a todos los madridistas. Hoy hemos vivido otra noche memorable, inolvidable, histórica, una de esas que explican por qué somos los más grandes, y por qué cantamos aquello de Así, así, así gana el Madrid.

Buenas noches a todos. HALA MADRID.


Fuente: elcarrildel2: tirando a dar
 

Un comentario en «CRÓNICA | Nadie para al Madrid: Real Madrid 81 – 80 FC Barcelona»

  1. LO QUE TIENE QUE HACER EL REAL MADRID, ES DEJAR LA ACB, ASI ESTOS ARBITROS Y EL RESTO EQUIPOS SE DARÁN CUENTA DE LO QUE PIERDEN CON LA PARCIALIDAD DE UNOS, Y LA DEJADEZ DE LA ACB, LA LIGA DE BALONCESTO SERA COMO LA DE BALONMANO, LA GANARA TODOS LOS AÑOS EL BARCELONA, PERO NO LA VERAN NI LOS FAMILIARES DE LOS JUGADORES, CON LO QUE ESO REPRESENTA EN INGRESOS DE TELEVISIÓN Y PUBLICIDAD, ACABARON ROGÁNDOLE A FLORENTINO QUE RECONSIDERE SU DECISIÓN Y REGRESE A LA ACB.

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