Una crónica de: @elcarrildel2
El Real Madrid se ha impuesto (95-66) al Maccabi, en el segundo partido de la serie a cinco de los Cuartos de Final de la Euroliga, disputado en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid, que registró una asistencia de 8.046 espectadores.
Fueron los nuestros un vendaval de principio a fin. Apenas aguantaron el ritmo siete minutos los macabeos (20-18). A partir de ese instante, levantó el vuelo el Madrid, que llegaba al minuto diez de partido con treinta y cinco puntos en su casillero, seis triples anotados de doce intentos, entre ellos tres consecutivos de Sergio Llull para cerrar un cuarto que desde más allá del 6,75 habían abierto Nigel WG en dos ocasiones, Hanga y Yabusele con un 2 + 1.
Estuvo el Madrid además muy serio en defensa, con el hándicap de dos faltas personales de Tavares en apenas cuatro minutos. Aún así, 35-26 al final del primer acto.
Comenzó el segundo cuarto con Randolph anotando desde la esquina. Va creciendo el tres blanco con el transcurrir de los partidos. Ayer falló un triple pero corrió a toda velocidad a defender, en un rasgo de implicación clarísimo. Forzaría más tarde una falta en ataque a Williams.
Parcial de 8-0 del Madrid para un 50-33 que empezaba a dejar claro el desenlace final del choque. Reynolds cometió una intencionada al soltar un manotazo a la cara de Abalde.
Poirier era el rey del rebote en ambas pinturas. En la de Maccabi hacia estragos. Fallamos entonces una serie de ocho tiros de tres, que no aprovecharon los visitantes. Minuto 20, 56-37, parcial de 21-11. Poirier, 26 de valoración al descanso, mientras que todo el Maccabi sumaba 27.
Imagen: realmadrid.com
El tercer acto fue posiblemente el más flojo de los nuestros. Evans robó dos balones seguidos. Açun así, 62-39 a 6,45 del minuto 30. Yabusele muy implicado toda la noche. Nigel WG trabajaba duro en defensa, y cometía su tercera falta personal. Tavares intimidaba en su tablero. Mediado el cuarto, el partido entró en una fase de correcalles, con precipitaciones por ambos bandos. Para finalizar, mandarina de Llull, que ponía el 74-48 final. Parcial de18-11.
Se mantendría ya la distancia de puntos hasta el final. Tras muchos partidos de sufrimiento, disfrutaba el público del Palacio. Gritos de “Hola fondo norte, hola fondo sur”, “Así así así gana el Madrid”, “Llull, Llull, Llull”, a más de corear los nombres de los nuestros cuando iban a descansar al banco. Cerraba el encuentro Causeur, con un triple que dejaba el electrónico en el 95-66 final, parcial de 21-18.
Destacados: Poirier (32 de valoración, 16 puntos, 10 rebotes), Llull (18-17), Hanga (15-9), Tavares (15-6-7 rebotes), Yabusele (11-16), Abalde (10-6-7 rebotes). Dispuso Juan Núñez de los cuatro minutos finales. Valoró 5, con dos puntos y tres asistencias fantásticas.
Tiros de campo 21 de 30 (70%), Tiros de tres 14 de 34 (41%), Tiros libres 11 de 14 (78,5%), Rebotes ofensivos 26-11, Rebotes defensivos 13-18, Asistencias 20-11, Pérdidas 9-12, Recuperaciones 9-6, Tapones 5-1, Faltas personales 18-18.
Dos cero en la eliminatoria. Más allá de eso, dos encuentros muy sólidos de los nuestros, que parecen haber recuperado el pulso tras dos meses de calvario. Ojalá sea así, y me obliguen a rectificar mis palabras de recientes crónicas.
Buenas tardes a todos. HALA MADRID.