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Una crónica de: @elcarrildel2
El Real Madrid se ha impuesto (84-74) al Maccabi, en el primer partido de la serie a cinco de los cuartos de final de la Euroliga, disputado en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid.
Volvió el acierto en el tiro exterior del Madrid, y con él la victoria en el primer envite de los cuartos de final. Venía la semana marcada por el perdón otorgado por el Club a Heurtel y Tompkins, y su vuelta a los entrenamientos colectivos. No les sirvió para participar en este encuentro. Tampoco estuvo Gabriel Deck, positivo por Covid.
No perdió el Madrid ninguno de los cuartos. Cuanto finalizaba el tercero, con 65-56 en el marcador, todos nos acordamos de lo ocurrido contra el Bayern Múnich. Cruzamos los dedos, y por fortuna no se repitió lo ocurrido aquella tarde.
Salió el Madrid con Nigel WG al mando de las operaciones. Veintisiete minutos estaría en cancha el base, que alternó buenos momentos en la dirección con algunos tiros erráticos y un par de pérdidas difíciles de entender. En cualquier caso, en el conjunto del partido superó a un Sergio Llull que sigue atravesando su particular travesía del desierto.
Wilbekin destacaba por los suyos. Tuvo un mal gesto con la grada, que se lo devolvió en el final del partido. Anotó Causeur su primer triple del partido en el minuto tres y medio de juego. Excelso partido del francés, que fue el mejor del equipo.
Las defensas eran intensas. El Madrid era capaz de correr, lo que más le gusta y mejor hace. Lástima las cuatro pérdidas de este tramo, al final del cual llegamos con un marcador de 25-19. Rudy anotando de tres sobre la bocina.
Parcial de 0-5 al comienzo del segundo cuarto. Nigel WG ocupaba el lugar de Llull. Apretón visitante, parcial de 0-7 para empatar a 34 a falta de tres minutos para el final. Los triples hicieron entonces acto de presencia: tres seguidos, dos de Causeur y uno de Hanga, para poner el 43-34. Ataque de Zicic, que no hizo su mejor partido.
Lanzaba el Madrid sus dos primeros tiros libres del partido a falta de 3,5 segundos para el descanso. El desequilibrio en este apartado del juego fue absoluto: 6 lanzó el Madrid, por 26 los macabeos. En el primer tiempo, dos contra doce. Minuto 20, 47-38 (parcial de 22-19).
Imagen: realmadrid.com
El paso por vestuarios no alteró las constantes del juego de los contendientes. Diez arriba (51-41, a 6,18 del treinta). Hizo su aparición estelar, como no podía ser de otra manera, don Luigi Lamonica. Técnica a los dos banquillos. Verían los visitantes otra al final del choque.
Nigel WG y Yabusele anotaban de tres antes de que Reynolds anotase diez puntos seguidos para el Maccabi. Volvía Llull. Con trece triples anotados llegábamos al minuto treinta. 65-56 (parcial de 18-18).
El último acto comenzó con un triple de Rudy (68-56). Abalde cometía pasos. Era la pérdida once de los nuestros. Parcial de 6-0, triples de Rudy y Yabusele. Respondía Maccabi con una jugada de cuatro puntos. Dos de canasta, y dos de falta personal sobre jugador distinto al lanzador. 74-67. Yabusele cometía una nueva falta de personal en ataque. Román Sorkin, inesperado, jugaba buenos minutos en ambas pinturas.
Aguantaba el Madrid la ventaja en el marcador, que se estabilizaba en torno a los diez puntos. Causeur cometía su quinta falta personal. Minuto 40, 84-74 (parcial de 19-18).
Destacados: Causeur (21 de valoración, 20 puntos, 5 asistencias), Yabusele (17-15), Nigel WG (15-11-8 asistencias), Rudy (11-12).
Tiros de campo 15 de 30 (50%), Tiros de tres 16 de 31 (52%), Tiros libres 6 de 6 (100%), Rebotes ofensivos 6-9, Rebotes defensivos 23-20, Asistencias 20-12, Pérdidas 6-7, Recuperaciones 4-2, Tapones 5-2, Faltas personales 26-17.
El viernes, segundo asalto en el Palacio. Obligatorio ganar para marchar con tranquilidad a Israel.
Buenos días a todos. HALA MADRID.
