Una crónica de: @elcarrildel2
El Estrella Roja de Belgrado se ha impuesto (65-62) al Real Madrid, en el partido correspondiente a la Jornada 20 de la Temporada Regular de la Euroliga, disputado en el Pabellón Aleksandar Nikolic Hall, de la capital de Serbia.
Distinguía un entrenador entre tiradores y anotadores. Nos viene bien para resumir en dos líneas lo que le ha ocurrido hoy al Real Madrid en Belgrado: 28 tiros de dos para 13 aciertos, y nada que menos que 37 de tres para 9 canastas.
Y quizás lo peor de todo es que da la impresión de que la pobreza de ideas en ataque es tal, que solo nos queda el recurso al triple tirado de cualquier manera, una vez agotada prácticamente en su totalidad la posesión.
¿De verdad que con los jugadores de los que dispone Pablo Laso no hay más posibilidades? Rigurosamente cierto que el fracaso de Heurtel en la dirección del juego pasará a los anales, que Willimas Goss comenzó bien, hizo un partido sublime frente a CSKA en el Palacio, para desinflarse hasta su triste deambular por la cancha de los últimos partidos. Hoy se lastimó un par de dedos, por lo que se marchó para no volver.
Parece imposible de creer que un jugador como Rudy Fernández falle cuatro triples consecutivos. Simplemente por azar alguno debía haber entrado. Que la estrategia de la última jugada sea darle el balón a Llull para que se tire una mandarina, resulta increíble, por no decir que una tomadura de pelo. Pensar que los árbitros iban a pitar algo en esa última acción, perdiendo de tres y en Belgrado, es como dudar de quiénes son los Reyes Magos a estas alturas de nuestras vidas.
¿De verdad que tras tantos meses de espera y recuperación Tompkins no da para más? Ver sus faltas sonroja a cualquiera, casi tanto como ver a Heurtel regalar balones a los contrarios. El otro día preguntaba por Randolph. Hoy insisto en el tema. Por un momento, me vino a la mente decir a Felipe que se cambiase y saltase a la pista.
Manisfetaba Laso al descanso que “si anotamos los tiros liberados y no perdemos balones tontos estamos en el partido”. Me recordó a aquel aficionado que decía que el baloncesto es un juego muy fácil: consiste en llegar hasta la línea de tres con la pelota y, sin pisarla, tirar y anotar.
Y conste que también hoy hay quien ha dado la cara: Hanga, Abalde, Llull, Rudy, Tavares…puede que hasta Yabusele y Poirier, que están atravesando un mal momento muy profundo.
Dieciséis pérdidas son inconcebibles. Que únicamente Tavares siga haciendo números decentes más aún. El 0 de 6 para un -6 de Rudy, lo nunca visto en este jugador hasta la fecha.
En fin, damas y caballeros, que cada partido que pasa el equipo da peores sensaciones. Desconozco cuántas derrotas son necesarias para que alguien tome alguna decisión al respecto de la profundísima crisis en la que estamos metidos.
Buenas noches a todos. HALA MADRID.