Una crónica de: @elcarrildel2
Maccabi se ha impuesto (100-96) al Real Madrid, en el partido correspondiente a la Jornada 34 de la temporada regular de la Euroliga, disputado en el Pabellón La Mano de Elías, de Tel Aviv.
No puede pretender la Euroliga que nos tomemos en serio su competición cuando envía a arbitrar a don Damir Javor, doña Anne Panther y don Hughes Thepenier. Su actuación rozó el bochorno, el esperpento, la vergüenza ajena. Es incomprensible que se designe a este trío para dirigir un encuentro en el que ambos equipos se están jugando su posición en los cuartos de final. Cometieron errores impropios, imposibles de asumir, de esos que solo se ven en baloncesto escolar. Y con alguno de ellos, como la quinta personal a Tavares, o los pasos postreros no pitados de un ataque macabeo, fueron los que inclinaron la balanza final para los locales. En definitiva, lamentable su actuación, descorazonadora para el aficionado que va al baloncesto pensando que todos sus participantes, jugadores, entrenadores, árbitros y oficiales de mesa se lo van a tomar con la seriedad debida.
Dicho todo lo anterior, hablemos del Madrid. Su levedad es grande, cada día parece que más. Basta la más mínima dificultad para que el equipo se venga abajo de manera incomprensible.
Quizás estemos acusando sobremanera el bajón en el rendimiento de Tavares, piedra angular de este equipo, la ausencia de un base que aporte la debida solidez al juego de ataque (ver sufrir a Hanga en esa posición llega en ocasiones a ser doloroso). Musa ha decidido hacer la guerra por su cuenta, y hasta Deck parece ausentarse por momentos. Causeur ha pasado a ser un jugador residual (anoche únicamente cinco minutos).
Podríamos hablar de las lagunas defensivas de Yabusele, a pesar de terminar cada partido en lo más alto de la valoración individual. También podríamos hablar de los diez tiros libres fallados, por únicamente uno de los locales. Con esos diez puntos, el partido hubiera caído de nuestro lado. Y lo preocupante es que esos errores en el tiro libre se producen en todos y cada uno de los partidos.
Podríamos hablar de las sensaciones que emite el banquillo, o de las reiteradas técnicas que nos pitan un partido tras otro.
Llegados a este punto, parece que nuestro enfrentamiento en los cuartos será Partizán de Belgrado, en lo que se antoja un hueso muy duro de roer a pesar de tener el factor cancha a favor.
Ha llegado el momento de mejorar los porcentajes de tiro, volver a ganar los rebotes (contra Maccabi perdimos los defensivos y los ofensivos), disminuir drásticamente el número de balones perdidos (hasta trece anoche), y de no permitir que algún o algunos jugadores del equipo contrario hagan su mejor partido de la temporada.
Destacados: Yabusele (29 de valoración, 25 puntos), Deck (19-16), Rodríguez (13-18), Hezonja (7-15). En la parte negativa, Hanga valoró -3 y no anotó ningún punto en veintiséis minutos de juego.
Por parte del Maccabi, Brown 27-22, Nebo 24-15 y Colson 22-14.
Tiros libres 26 de 36 (72%), Tiros de dos 17 de 33 (51%), Tiros de tres 12 de 31 (39%), Rebotes ofensivos 13-7, Rebotes defensivos 28-26, Tapones 4-2, Asistencias 22-23, Pérdidas 13-13, Recuperaciones 5-7, Faltas personales 28-23.
Buenas tardes a todos. HALA MADRID.