Una crónica de: @_albacg
Cómoda victoria del Real Madrid en la visita de Fenerbahce al WiZink Center. Los de Laso se pusieron por delante en el primer cuarto, aguantaron en el segundo y terminaron por romper el encuentro en el tercero. A partir de ahí, el partido no tuvo mucha más historia. El equipo blanco, poco a poco, se recupera de su mal arranque en Euroliga.
El encuentro comenzó con cinco puntos de Deck y dos de Tavares. El 7-0 de salida, con varias pérdidas de Fenerbahce en los primeros minutos, parecía pronosticar un Real Madrid intenso, dispuesto a abrir una distancia considerable desde el inicio. Sin embargo, una serie de errores en el tiro exterior frenaron el rimo anotador de los de Laso, que permitieron que el conjunto turco volviera a entrar en el encuentro (9-7, 3’06”). Un tiempo muerto consiguió despertar al Real Madrid de su momentáneo letargo y los blancos pisaron el acelerador. Del 13-9 se pasó, en menos de cuatro minutos, a un contundente 26-9. La distribución de juego de Facundo Campazzo, que terminó el primer cuarto con seis asistencias, fue clave para articular los ataques de los hoy locales. Al final, el primer cuarto concluyó 28-12, con el Real Madrid en su mejor momento.
La pausa sentó mejor a Fenerbahce, que abrió el segundo cuarto con un parcial de 0-6 y cargando de faltas personales a los de Laso. El preparador vitoriano tuvo que detener la reacción turca con un tiempo muerto y, en la siguiente jugada, el Madrid hizo gala de su variedad de opciones ofensivas para concluir con un triple de Randolph. El encuentro estaba más igualado que en el primer período, pero Fenerbahce no conseguía recortar la gran distancia que habían abierto los jugadores blancos. Solo la rotación de Pablo Laso, que dio descanso a Tavares y Randolph, permitió a los de Igor Kokoškov bajar de la barrera de los diez puntos (43-34, 7’34”). Hasta ahí llegó la permisividad del Madrid. A continuación, el equipo blanco reaccionó y consiguió recuperar una distancia muy similar a la de los primeros diez minutos. Así, el segundo cuarto terminó con un todavía amplio 49-36.
La sensación que se desprendía del ritmo de partido era que el Real Madrid tenía la diferencia bajo control. No era una distancia lo suficientemente grande como para considerar el encuentro cerrado, pero los de Laso estaban siendo capaces de gestionar los tiempos y las distancias para no sufrir. Dos tiros libres de Abalde llevaron la ventaja del equipo blanco a los +21 (62-41) antes del ecuador del tercer cuarto. Danilo Barthel y Lorenzo Brown trataban de mantener a Fenerbahce con opciones, pero sus esfuerzos eran en vano. La distancia entre ambos conjuntos se mantuvo alrededor de los 20 puntos durante todo el tercer período. Un muy buen tercer cuarto de Abalde, además del habitual estado de forma de Tavares y Campazzo, permitieron que los de Laso llegaran a los últimos diez minutos con 21 puntos de ventaja (72-51).
Fenerbahce no quería todavía tirar la toalla, pero la diferencia era muy amplia y quedaba cada vez menos tiempo. Pablo Laso dio minutos a Garuba, Alocén y Laprovittola para que descansaran Tavares y Campazzo. El argentino, que concluyó el encuentro con 7 puntos, 12 asistencias y 16 de valoración, pudo haber firmado tan buenos números en su último partido como madridista. La peor noticia del último cuarto para el Real Madrid tuvo como protagonista a Rudy Fernández, que se fue directamente al vestuario doliéndose de la espalda. Ni siquiera el mejor partido de la carrera de Danilo Barthel fue suficiente para contrarrestar el buen juego coral del Madrid. La diferencia llegó a estar incluso en 26 puntos y los de Laso pudieron relajarse en los minutos finales. Una canasta de Jaycee Carroll sobre la bocina rubricó el triunfo definitivo del Real Madrid por 94-74.
Con este resultado, el Real Madrid se coloca con 6 victorias y 4 derrotas en esta Euroliga, ya asentado entre los ocho primeros. El fin de semana regresa la Liga Endesa: los de Laso recibirán en el WiZink a BAXI Manresa (domingo, 22 de noviembre, 20:00 horas).