por Una cronica de: @Javirodespi – planetacb.com
Mucho se ha hablado sobre esas encuestas en que el Real Madrid no salía favorito en ninguna de ellas, incluso se especulaba con que el Fuenlabrada iba a poner en serios avisos a un equipo blanco tras la derrota que sufrió en el Fernando Martín, sin embargo, el equipo blanco salió en un plan apisonadora y destructivo que no dio ninguna opción de respiro a sus vecinos de la comunidad y solventó en la primera parte su pase a semis y dejando una segunda parte en que ambos equipos solo se dedicaron a pasar el tiempo y dejar un marcador arreglado. Éste es nuestro primer OjO Al blanco de la Copa, el día que el no favorito presentó sus credenciales.
El Coliseum con el débil
Como en toda competición que se precie, y la Copa es así, siempre se suele apoyar al equipo que se considere en desventaja y la mayor parte de las 9.800 almas se decantaron a favor del Fuenlabrada, bien por afinidad hacia ellos o por aversión al rival, sea como fuere, la afición madridista se encontró sola en el Coliseum pero se le dejó oír más de una vez.
Pocos sustos y mucha defensa
No había ganas de darle la más mínima opción al equipo de Jota, que bastante tenía con mantenerse en pie y dirigir a su equipo gracias a un maldito virus que le impidió disfrutar como se merece de un gran día para su club. El Real Madrid tenía bien claro que tenía que parar toda la producción ofensiva de Fuenla y lo hizo sin contemplaciones, obligando a su rival a tiros malos, no permitiendo la más mínima opción en el juego interior con un Gustavo Ayón que volvió a erigirse como ese cinco que necesitaba el Madrid y que cerró un primer cuarto de nota con 16 de valoración.
Se acabó el fuelle
En estas situaciones, el equipo que va en desventaja puede venirse abajo o intentar seguir luchando, pues el Fuenlabrada, acostumbrado a lo segundo, se quedó completamente desconectado del partido y sufrió toda la furia ofensiva del Real Madrid con anotaciones exteriores de Sergio Rodríguez, Llull o Carroll, un 3-4 que hizo su mejor partido en el Madrid como Jeffery Taylor que se mostraba imparable en los 1×1 y nos deleitó con sus vuelos sin motor al aro y un Augusto Lima que fue un muro defensivo en el rebote y colocación, muy alejado del papel que nos ofrecía Ndour que fue el cortado por Laso. El 29-13 dejó el partido visto para sentencia y las semis en el bolsillo blanco.
Solteros contra casados
¿Qué convenía ya al partido? Acaso arriesgar una lesión que le deje sin un jugador dónde realmente se juegue las habichuelas (hablando del Fuenla), cansar demasiado a jugadores que juegan en menos de 24 horas (hablando del Madrid). Evidentemente la respuesta es no en ambos casos, por lo que ambos equipos, dejaron de lado las defensas asfixiantes, el juego subterráneo y se dedicaron a eso, a jugar, mientras las ventajas, que normalmente se mantenían sobre los 20 puntos empezaron a reducirse sospechosamente.
La vergüenza torera del Fuenla
No se quiso despedir del Fuenla sin ser fiel a su idea de juego con un equipo valiente y dispuesto a vender cara su derrota y de la mano de un espectacular Urtasun y Paunic, pusieron la desventaja a solo doce puntos, justo cuando Laso llamó a capítulo nuevamente a sus jugadores que volvieron a dar una ventaja cómoda que deparó el resultado final.
Un triunfo de todos
El Real Madrid obsequió un triunfo de equipo, podríamos hablar de las buenas sensaciones con Chapu, del excelente partido de los bases con su reparto de asistencias (récord de la competición con 26), inclusive de un casi inédito Luka Doncic con una de las jugadas del partido pero nos vamos a quedar con dos cosas, este equipo cuando quiere, defiende como un lobo huargo y si se pone las pilas en ataque, su juego preciosista de pases no tiene nada que envidiar a ningún rival.
Así terminamos por hoy, mañana le espera al Real Madrid al rival que salga del Obradoiro – Baskonia, mientras tanto, sigan disfrutando de la Copa.
