Una previa de: Nilo Campo Santos
Tras unos dieciseisavos de final de Copa sorpresivos, y tan sorpresivos, que el nombrado uno de los grandes entrenadores del Mundo por la periogolfada, cae eliminado en el Reino de León; también los inventores del fútbol, ese equipo que, con el nuevo entrenador, baten los récords de pases horizontales y hacia su portero, pasó por un gol en fuera de juego (de tener VAR se lo habría anulado) en el minuto 94, llega la jornada 21.
El Real Madrid cerrara la jornada el domingo, 26 de enero del 2020, a las 21:00 en Valladolid. Para este encuentro el Comité de Designación presenta un elenco predispuesto para asaltar la Casa Blanca.
Estos son los designados para el Valladolid – Real Madrid:
Apellidos | Nombre | Del Comité | |
Árbitro | De Burgos Bengoetxea | Ricardo | Vasco |
4º árbitro | González González | Alexander | Tinerfeño |
Asistente 1 | Díaz Pérez del Palomar | Roberto | Vasco |
Asistente 2 | Núñez Fernández | Jon | Vasco |
Informador | Turienzo Álvarez | Javier | Castellanoleonés |
VAR | Alberola Rojas | Javier | Castellanomanchego |
AVAR | Hernández Ramos | Iván | Castellano Manchego |
A estas alturas ya todo el madridismo conocemos quién es el colegiado vasco De Burgos Bengoetxea, el sobrino del cabo golpista “el hombre del anorak”, pero no está nada mal recordarlo para los que se les olvidara o se incorporen a estas previas arbitrales, ya que tengo la fortuna que una gran web como El Diario de Mou, me las publiquen.
Ricardo De Burgos Bengoetxea nació en Bilbao el 16 de marzo de 1986. Su profesión es dentista (protésico dental) y árbitro de fútbol. Ahí podría terminar su currículum, sí fuera un ciudadano normal, pero no lo es. Un buen día se le ocurrió dejar el cadete del Indartsu de la Liga vasca y cambiar la camiseta de futbolista por la de árbitro dándole un disgusto a su padre -el colegiado Ernesto Burgos Núñez- que arbitró 69 partidos en la máxima categoría entre 1976 y 1982, y que fue descendido por motivos “extradeportivos”. También es famoso el padre por ser el árbitro del Sporting y el Atletico de Madrid disputado en el Molinón (29 de marzo de 1981), partido en el que grabó varias escenas José Luís Garci para su película Volver a empezar ganadora del Oscar en 1983. Quien dijo de su hijo que: “No le hacia mucha gracia que fuera a arbitrar”.
Es árbitro de Primera División desde la temporada 2015/16, fecha de su ascenso junto al colegiado murciano José María Sánchez Martínez, otro que tal baila, tras una gran temporada en 2ª, con una nota de 9,47, convirtiéndose en uno de los colegiados más prometedores.
Su trayectoria era muy buena hasta cruzarse con su Barcelona frente al Real Madrid en la Supercopa de España del 2017. Ahí estuvo su cruz y, lo que ya se le vislumbraba su preferencia por los culés (de seis partidos cinco fueron triunfos culés y un empate, logrado en el famoso partido contra el Málaga en el que añadió 7 minutos. Era la jornada 12 de la temporada 2016/17). Otros seis llevaba con el Real Madrid, cuatro victorias blancas, un empate y una derrota (la cosechada en Mestalla, jornada 16 de la temporada 2016/17, por 2-1 donde no quiso ver un penalti de Mángala sobre CR7).
Con eses antecedentes, el Comité de Designación, le concedió el partido de ida en la Final de la Supercopa de España, el Barcelona 1 – R. Madrid 3. No debería haber sido protagonista en el primer Clásico de la temporada. Ese no era su papel. Él debía arbitrar, nada más. Las crónicas del día siguiente solamente debían figurar sus apellidos en la información arbitral. Sin embargo, su actuación, ha puesto el foco sobre él. Y no por lo bueno. De burgos Bengoetxea se erigió en el actor principal del choque sacando 10 tarjetas amarillas (tres al Barcelona y 7 al Real Madrid), señalando un penalti inexistente (el de Keylor Navas a Luís Suárez) y expulsando a CR7, que había visto una justa amarilla por quitarse la camiseta y que le mostró una 2ª por caer -según el colegiado, voluntariamente- cuando fue un claro penalti de Umtiti.
No conforme con su gesta, en la redacción del Acta anotaba: “Una vez mostrada la tarjeta roja, dicho jugador (Cristiano) me empujó levemente en señal de disconformidad”. El Real Madrid se perdió cinco partidos, el partido de vuelta y los cuatro primeros de Liga, de la disponibilidad de su buque insignia.
Esta gesta significo el “castigo” de hacerlo internacional. El 1 de enero de 2018 obtenía su recompensa por la fechoría contra el R. Madrid y a favor del Barcelona, la Escarapela FIFA. Huelga decir que en el concierto Internacional nada reseñable tiene que comentar, tan sólo 4 partidos de la fase de clasificación de la Europe League y dos de juveniles, en fase de grupos.
Luego vendrían otros partidos arbitrándole al Real Madrid, y en todos siempre dejó su sello. Sin ir más lejos, De Burgos Bengoetxea, fue el encargado del VAR, en el último Clásico que arbitró otro “amigo” del madridismo, el conejero Hernández Hernández. Ni el uno en el campo, ni el otro en la sala VOR, quisieron impartir justicia y al Real Madrid lo privaron de dos puntos, mientras al Barcelona le regalaban uno.
Lleva arbitrados en la Liga 85 -incluidos los 8 de la actual- con 37 victorias locales, 20 empatados y 28 victorias visitantes. En el orden disciplinario, 413 tarjetas amarillas (4,85 por partido), que viene siendo lo que tienen estandarizados todos los árbitros de Primera, casualmente. Cinco expulsiones por doble amarilla y siete por roja directa. En cuanto a penaltis señalados, 19.
Los números del colegiado con el Real Valladolid:
Local | Visitante | |
Ganados | 0 | 0 |
Empatados | 0 | 0 |
Perdidos | 2 | 0 |
Tarjetas amarillas | 2 | 0 |
Tarjetas rojas | 0 | 0 |
Penaltis favor | 0 | 0 |
Penaltis contra | 0 | 0 |
Y estos sus números en la Liga con el Real Madrid:
Local | Visitante | |
Ganados | 3 | 3 |
Empatados | 1 | 1 |
Perdidos | 0 | 1 |
Tarjetas amarillas | 4 | 6 |
Tarjetas rojas | 0 | 0 |
Penaltis favor | 0 | 1 |
Penaltis contra | 0 | 0 |
Visto que hoy ha perdido el Barcelona, me temo que traten de evitar que el Real Madrid se haga con los tres puntos, incluso que se lleve un empate, por lo que me temo, que necesite un extra para compensar el desnivel de la balanza arbitral hacia el lado local. Lo ideal es que no se hable del colegiado vasco, una vez finalizado el partido.