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Una previa de: @luismanper
El próximo domingo a las 12 el Real Madrid despedirá contra el Betis la peor temporada en muchos años, una temporada que todos los madridistas deseamos olvidar lo antes posible, ya que ha ido de mal en peor desde el primer partido oficial de la temporada allá por el mes de agosto en el que perdimos la Supercopa de Europa, hasta el pasado domingo donde completamos el enésimo ridículo de la temporada ante la Real Sociedad, que nos pintó la cara en Anoeta… hasta el punto de que hay que dar las gracias que no nos clavara una goleada histórica.
El fracaso de esta temporada se personaliza en todos los estamentos del club, desde la Directiva hasta la plantilla, la Directiva por creer que los goles que marcaba en años anteriores el máximo goleador de la historia del Real Madrid, llegarían por arte de magia en un irreal reparto de goles en la plantilla como quien se reparte los pedazos de una tarta, suponiendo también que el coladero defensivo que ha sido nuestra defensa durante otras temporadas, este año iba a desaparecer porque a los directivos les daba la real gana. Pero nuestra defensa ha seguido dando vergüenza ajena y esta vez no había un extraterrestre como Cristiano Ronaldo para compensarlo, de hecho su único sustituto de ataque fue un canterano que repescamos del Olympique de Lyon a dos días del cierre de mercado para evitar que lo fiche el Sevilla.
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Pero no es la directiva la única culpable de esta nefasta temporada, ya que a pesar de los errores de planificación no se puede decir que no lo hayan intentado todo en el aspecto técnico, destituyendo a 2 entrenadores con la justificación pueril de que “los resultados no se correspondían con una plantilla que tenía en sus filas a 8 jugadores que el año anterior habían sido elegidos los mejores jugadores del año en el Once de Oro de la FIFA”. Y es que la directiva decidió apostar el verano pasado por la explosión de determinados jugadores que este año se han estrellado, se confió en que Bale cogiera el liderazgo del equipo en ausencia de Cristiano y el galés ha demostrado que le viene muy grande esa función, lo que unido a las recurrentes lesiones que sufre y a las declaraciones que realizó el año pasado tras la final de Kiev, ha provocado que sus relaciones con Zidane estén absolutamente rotas, hasta el punto que Zizou lo ha dejado fuera de la convocatoria en los dos últimos encuentros, veremos si este domingo Zizou le da la oportunidad de despedirse en el césped o lo vuelve a mandar a la grada.
También parece que será la despedida del portero de las tres Champions consecutivas, por esas casualidades caprichosas del fútbol, el cancerbero tico se llevó una tremenda ovación de la grada cuando paró un penalti al Betis en el partido posterior a que se frustrara su traspaso al Manchester United tras el escabroso episodio del fax, y la casualidad ha querido que Keylor Navas se despida del Real Madrid contra el mismo rival, el Betis de Quique Setién cuya temporada tampoco ha sido para tirar cohetes y de hecho la cabeza de su entrenador pende de un hilo, sin embargo no serán las únicas despedidas puesto que otros jugadores más secundarios como Reguilón o Brahim también pueden disputar sus últimos minutos como madridistas antes de ser cedidos.
Imagen: pasionfutbol.com
Caso aparte merecen otros jugadores que están en el alero como Marcelo, Nacho, Lucas Vázquez, Isco, Kroos o Mariano cuya continuidad no está nada clara, pues se presume que se va a fichar a jugadores en su posición que en teoría les van a dejar sin un hueco en el once titular que ellos no se han ganado durante esta temporada en ningún momento por distintos motivos. Las únicas bajas seguras para el encuentro ante el equipo andaluz son la de Odriozola por lesión y Vallejo y Casemiro por sanción, ya que se cree que Sergio Ramos regresará al once titular tras una larga lesión muscular que ha levantado muchas suspicacias por su coincidencia con su situación personal prenupcial.
En definitiva, todo olerá a despedida en el partido del próximo domingo frente al Betis, que dará carpetazo a una temporada que a todos se nos ha hecho larguísima (a los propios jugadores a los que más), ojalá cuajen los mimbres que se vislumbran para la plantilla del próximo año y de esa manera se consiga renovar por completo una plantilla que ha muerto de éxito debido a un acomodamiento de la directiva que ha provocado la peor temporada del Real Madrid en décadas, esperemos que este verano sí se acierte con los fichajes y la plantilla que defienda nuestros colores el próximo año dé la talla para competir hasta el final todas las competiciones, sin tirar ninguna en otoño-invierno como por desgracia nos tienen acostumbrados en estos últimos años.
