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Una previa de: @luismanper
Este calvario de temporada que los madridistas estamos sufriendo desde que en la Supercopa de Europa allá por el mes de agosto ya se vio que la plantilla de este año estaba para pocos trotes, afortunadamente está cerca de llegar a su fin, pues ya sólo queda cerrar el ataúd y enterrar en el olvido la peor temporada en la última década, ya que desde el derrumbe del equipo galáctico no se recordaba un Real Madrid sin opciones de disputar ningún título a principios de marzo, que esta generación que será recordada históricamente por la hazaña de ganar 3 Champions consecutivas acabe como el Rosario de la Aurora en la que acabó ese Real Madrid galáctico que provocó la dimisión de Florentino en 2006, dependerá de la magnitud de la reestructuración de la plantilla que la directiva encabezada por el propio Florentino Pérez, esté dispuesto a llevar a cabo este verano.
Mientras tanto cada partido liguero jugado desde que el Real Madrid perdió las opciones de luchar por todos los títulos, se ha convertido en un suplicio para los madridistas y en un estorbo para los propios jugadores que sólo han dado la cara en el Santiago Bernabéu y muchas veces después de hacer primeras mitades ridículas que obligaban a Zidane a abroncar al equipo en el descanso para que reaccionara… y tal es la desgana de los futbolistas por estos partidos que quedan que no siempre conseguía Zizou que el equipo reaccionara por más broncas que echara.
Imagen: infovzla.net
Por todo ello, la mejor noticia para el Real Madrid es que solamente queda un partido en casa y otro a domicilio para terminar esta tortura de temporada, y de esa manera empezar un proyecto desde cero. En la última visita liguera el Real Madrid jugará en Anoeta el próximo domingo a las 18:30, cerrando la temporada en casa de una Real Sociedad que apura sus remotas opciones de entrar en competición europea, por lo que en teoría el partido del próximo domingo parece que no será muy tenso, pues a priori cuenta con pocos alicientes motivacionales. En lo puramente deportivo, se presume un once parecido al que disputó el encuentro del pasado domingo ante el Villarreal, con las únicas dudas de si Zidane devolverá a Nacho al centro de la zaga reservando a Vallejo o a Varane, y si en el mediocampo o en ataque dará una última oportunidad de vestir la camiseta del Real Madrid a Bale, Ceballos y Marcos Llorente que esta semana se ha rumoreado que el técnico francés ya les ha comunicado que no cuenta con ellos para la próxima temporada. La única duda por lesión es si volverá Benzema porque las lesiones que sufren tanto Sergio Ramos como Odriozola en teoría parece que les impedirá volver a los terrenos de juego hasta la próxima temporada.
Tras el alegrón que nos dio esta semana el Liverpool, eliminando al Barça de la final de Champions cuando los culés ya se regodeaban de que celebrarían su sexta Champions en Cibeles, eliminación que pone en perspectiva el enorme mérito que tiene este Real Madrid legendario de las tres Champions consecutivas, que ha conseguido resistir temporada tras temporada a esos partidos malos que a otros equipos le hunden como hemos visto en esta edición de la Champions, esperemos que nuestro Real Madrid no nos desespere más veces viendo como se ha degradado un equipo que la directiva creyó que iba a ser eterno a pesar de que la plantilla iba cumpliendo años sin ser sustituida por cracks de garantías sino por jóvenes por explotar que más de uno se ha estancado en esta temporada tan nefasta en la que tan pocos jugadores han rendido a su mínimo nivel exigible.
