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Una previa de: @danipuerto6
Llegan los playoff de la Euroliga donde Madrid (3º) y Panathinaikos (6º), reeditan el cruce de cuartos de la temporada pasada, aunque cambiando el orden, ya que en este curso la ventaja de campo la tiene el Madrid y no Panathinaikos.
El Wizink Center madrileño acoge el primero de los dos partidos consecutivos que españoles y griegos disputarán en busca de una plaza en esa ansiada Final Four que se disputará en España, en Vitoria. A priori, mirando la clasificación y los enfrentamientos directos entre ambos, el Madrid debería ser claro favorito a la victoria final, ya que los de Laso han ganado a los griegos en las últimas cinco veces en que se han enfrentado, aún así, las bajas y el momento físico de ambos, auguran choques igualados mediante dos formas distintas de entender el baloncesto.
Para el Madrid, la baja de Llull se torna vital en la serie, pues deja sólo a Campazzo en la dirección, teniendo que ser relevado por jugadores que como Prepelic o Causeur, no son bases puros y les cuesta cuando deben tomar la iniciativa y ordenar el juego. Pitino, viejo zorro, querrá explotar esa carencia en su rival y por ahí, intentará desarbolar al equipo blanco a base de desgastar al único playmaker con el que cuenta el Madrid. En frente estará un jugador superlativo y estrella de los verdes, Nick Calathes, convertido a día de hoy en el posiblemente, mejor base de la competición, pues aúna a su capacidad de generar juego y de erigirse como anotador, un alto rendimiento defensivo, algo que se ejemplifica al ser capaz de liderar estadísticas en ambas situaciones como asistencias y robos de balón. La guerra Calathes – Campazzo, tendrá mucho que ver en el resultado final del choque, donde los griegos tienen una significativa ventaja, más por número de efectivos que por calidad, al contar con Lekavicius y un combo experimentado como Langford para refrescar a Calathes.
Imagen: grada3.com
El otro apartado del juego que se muestra vital para el desenlace de la eliminatoria es el rebote. Es ahí donde el Madrid contará con todo y todos, teniendo sus mejores valoraciones en tres de sus interiores, Ayón, Randolph y Tavares, lo que resulta curioso al ser un equipo que juega sobrecargando el perímetro. La pelea por dominar los rechaces será dura, pues a las torres del Madrid se enfrentará otro gigante, el joven Papagiannis al que veremos si no le pesa la responsabilidad de jugar unos playoff, pero sobretodo, el poderío atlético con el que cuenta PAO (Panathinaikos Athlitikos Omilos) donde sus “treses” pelean y suman rebotes tanto y tan bien como sus pivots. Precisamente, esa ventaja física es la que querrá explotar Pitino, buscando cansar al Madrid a base de hacer los partidos largos y muy duros a nivel físico, con constantes cargas en el rebote y un juego de contactos extremos. Ya lo intentó el coach americano en la única vez que se ha enfrentado al Madrid y casi logra la victoria, robada en el último instante por Rudy con aquella ya famosa “mandarina” en el OAKA.
El Madrid querrá dominar el rebote para correr y buscar anotaciones altas, PAO buscará que el Madrid no corra. El Madrid buscará la línea de tres para atraer defensas y poder conectar con sus interiores en ventaja, PAO poblará la pintura sabedor de que cuenta con una media de altura mayor en su quinteto, más músculo y capacidad de salto. Dos formas distintas de entender el baloncesto, dos formas válidas para llegar a la victoria, veremos cuál de las dos se impone en una serie que se presenta, a priori, igualada.
