Una crónica de: @Javirodespi – planetacb
Le salió bien el partido a ACB poniéndolo un 31 de diciembre con 10.387 almas casi llenando el WiZink Center y un partido que tuvo una tensión que se cortaba y que acabó ganando el Real Madrid por 96-89.
Camiseta manga corta y quinteto canterano
Salvo en pretemporada, no habíamos visto al Real Madrid con manga corta en camiseta de juego y hoy lo tuvimos por primera vez en partido oficial, qué quieren que le digamos, que no nos gusta tan impoluta, que casi nos parece una camiseta interior, pero bueno, las marcas mandan y ambos quintetos se nos presentaban para comenzar el derbi con un dato curioso, solo dos canteranos entre los diez jugadores y ambos del Madrid, Yusta en los locales y Arteaga en los visitantes.
Poco ritmo
Con más fallos que aciertos, con mucho juego parado y con dos equipos sin ganas de complicarse demasiado es todo el balance que se nos ocurre de este primer cuarto, las acciones espectaculares no existían y, si acaso tenemos que salvar algo, nos quedamos con el tapón de Tavares para animarnos en esta mañana de Nochevieja.
Tavares o el 'aquí mando yo'. #LigaEndesa pic.twitter.com/IFYbyWx2f2
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Hasta que llegó Doncic
El mar en calma se mantuvo igual hasta que llegó Luka Doncic al partido, auténtico desatascador del partido y quién decidió que aquí se jugaba a su ritmo, daba igual que el Estudiantes se plantara en acciones de superioridad con Felipe Reyes tirado en la cancha por un golpe, el Madrid exhibía un mejor ritmo de juego con Trey Thompkins sacando la muñeca a pasear o con Causeur jugando buenos minutos ante un Estudiantes que, salvo Sutton, aportaba muy poco en ataque y aún así se iba con un marcador de 46-39 perdiendo al descanso.
Luka Doncic. Disfruten. #LigaEndesa pic.twitter.com/EmSxKFr4sI
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Salirse lo increíble
El partido siguió por los mismos derroteros en cuanto a ritmo anodino y pocas acciones espectaculares pero con una diferencia importante, el Madrid parecía que tenía un tapón en el aro y parecía increíble fallar acciones tan claras como balones cerquísima del aro por Felipe Reyes en dos ocasiones, otra de Taylor y más de un tiro librado desde la línea de 6.75, lo cual era unido a un Landesberg que llegó a empatar el partido a 54 puntos y nos daba un nuevo partido y eso que se produjo el delirio en el WiZink Center cuando Doncic metió uno de los gorros del año para acabar un contraataque con tiro triple de Carroll pero que, a pesar del shock inicial, Estudiantes siguió concentrado y yéndose al último cuarto con un 68-63.
Delirio en el WiZink Center. Doncic se marca uno de los gorrazos del año. #LigaEndesa pic.twitter.com/HpVYNRftOY
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La igualdad hasta el último minuto
La tensión era creciente según pasaban los minutos y ningún equipo podía despegarse en el marcador, Landesberg seguía marcando el ritmo estudiantil y Felipe Reyes volvía a demostrar que sigue siendo una de las almas mater de este equipo, inclusive con la técnica con la que fue pitada tras unas decisiones más que dudosas en el arbitraje y que, a falta de 3:53 ponía un tremendo marcador de 80-81 para Estudiantes. Era el momento de las decisiones y mientras Estudiantes daba todos los balones a su líder hasta su expulsión por técnica y antideportiva, mientras que el Madrid empezaba a distribuir responsabilidades, en defensa con la defensa de Thompkins o en ataque con el sempiterno Felipe Reyes, los triples de Doncic o la clase de Campazzo fueron suficientes para llevarse el triunfo nuevamente a la casa blanca por
Sólo podemos dar las gracias por el partido que nos están brindando Real Madrid y Movistar Estudiantes. Ahora Campazzo da la réplica. #LigaEndesa pic.twitter.com/qQOtn9yMKg
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Así terminamos hoy, nuestra próxima cita nos lleva a Vitoria para enfrentarnos al Baskonia el próximo 3 de enero así que, por ahora, les deseamos un feliz año 2018 y, por supuesto, que sigamos sonriendo como hasta ahora.