Un articulo de: @luismanper
Vamos a cerrar esta semana el mejor año de la historia del Real Madrid, pero como el fútbol se debe tanto al momento presente, ahora mismo todos los madridistas tenemos malas sensaciones debido a la dura derrota del Clásico del pasado sábado ante el Barça, que nos ha hecho emborronar un 2017 que pasará a la historia como el año natural en que el Real Madrid ha ganado más títulos que en ningún otro año. Por ello tal y como hago anualmente por estas fechas, vamos a recopilar todo lo vivido en este 2017, por lo que este artículo se dividirá en 2 partes desde enero hasta esa final de Champions ganada en Cardiff que es sin duda el mejor momento del año para el madridismo, y luego desde la Supercopa de Europa hasta este último Clásico ante el Barça que tan mal sabor de boca nos ha dejado.
El primer partido de este 2017 que vamos a terminar lo disputamos en el Santiago Bernabéu ante el Sevilla en una eliminatoria copera que encarrilamos en la ida con un 3-0 en un partido que muchos consideraron el mejor de la temporada del Real Madrid hasta ese momento por el baño que le dimos al Sevilla en ese partido, el fin de semana siguiente recibimos al Granada en un partido que le endosamos una manita al equipo andaluz y que se recuerda por el homenaje que el club tributó a Cristiano Ronaldo, quien ofreció al público del Bernabéu su cuarto Balón de Oro rodeado de todos los jugadores vivos que han ganado el Balón de Oro cuando formaban parte del Real Madrid, en esa ocasión fue la última vez que vimos con vida a un mito madridista como Raymond Kopa, que falleció un mes después de ese homenaje y pocos meses después del homenaje que el club le rindió invitando a “su” Stade Reims al Trofeo Bernabéu 2016. El partido de vuelta de la eliminatoria copera contra el Sevilla se saldó con un empate a 3 que se consiguió en los últimos minutos solo por el afán de alargar la racha de partidos sin perder, porque la eliminatoria está más que resuelta.
Pero esa racha de partidos sin conocer de la derrota se rompió sólo 4 días después también en la visita liguera al Sánchez Pizjuán en un partido en el que el Sevilla vengó su eliminación copera aplicando al Real Madrid su propia medicina en forma de remontada postrera, pues Carvajal provocó un penalti en el minuto 75 que transformó Cristiano Ronaldo y el Sevilla marcó 2 goles en los últimos minutos para remontar el partido y finalizar esa racha de victorias que empezaba a obsesionar al equipo como se vio días antes, luchando innecesariamente por empatar un partido de una eliminatoria que estaba de sobra decidida.
Pero el bache no iba a terminar ahí y pocos días después el equipo perdió el único título que no ha ganado en 2017, pues la eliminatoria ante el Celta de Vigo se torció en la ida ya que 2 errores defensivos garrafales provocaron la derrota por 1-2 en el Bernabéu, dónde 3 días después recibimos al Málaga para cerrar la primera vuelta y ganamos sudando sangre con 2 goles en ajustados fuera de juego que afortunadamente para nosotros esta vez los árbitros no vieron, 4 días después visitamos Balaídos con la intención de remontar una eliminatoria que se había puesto muy cuesta arriba y más con la plaga de bajas que tuvo el equipo ese día y que obligó a poner a Casemiro de central, en una posición en que al brasileño se le vieron las costuras y sus errores nos costaron los goles que complicaron aún más la eliminatoria, no obstante el equipo dio la cara y Lucas Vázquez marcó en el descuento el 2-2 que ponía emoción a la eliminatoria pero el milagro no llegó y el equipo cayó eliminado de la Copa del Rey en el único título que no ha ganado en este 2017.
Por tanto, el Real Madrid volvía a centrarse en la Liga dónde días después recibió a la Real Sociedad que llegaba en racha y a la que le ganó 3-0 con uno de los mejores partidos que se le recuerdan a Kovacic, en la siguiente jornada el equipo tenía que visitar al Celta de Vigo pero un temporal dañó la uralita del tejado de Balaídos, y el alcalde de la ciudad suspendió el partido unilateralmente al ser el campo de propiedad municipal ante la complicidad de un Celta que rechazó todas las opciones que el Real Madrid ofreció como fue jugar a puerta cerrada, jugar con la grada cerrada de la que se habían desprendidos cascotes de uralita o incluso jugar en el cercano estadio compostelano de San Lázaro, pero el Celta rechazó todas esas opciones pues le convenía no desgastarse en Liga, para estar al 100% en la eliminatoria copera que disputaba en esos días frente al Alavés y en la que ambos equipos se disputaban el pase a la final, a la que acabaría llegando el equipo vitoriano que también se sintió perjudicado porque el Celta llegó con 3 días más descanso que el alcalde de su ciudad les había permitido tener injustamente.
El equipo estuvo 2 semanas sin jugar desde el partido contra la Real Sociedad hasta que visitó el campo de Osasuna dónde ganó 1-3, para volcarse en la vuelta de la Champions que nos llevó a recibir el Nápoles en el Bernabéu en un partido recordado por el impresionante golazo de volea de Casemiro que el equipo acabó ganando 3-1, el siguiente partido fue ante el Espanyol en el que se ganó 2-0 marcando Bale el segundo tanto del encuentro en el día que reaparecía tras más de 4 meses lesionado desde que en noviembre de 2016 un defensor uruguayo del Sporting de Lisboa le partiera el tobillo con una entrada criminal, como todos sabemos el jugador galés no ha levantado cabeza desde entonces encadenando una lesión tras otra. Pocos días después, el equipo visitó Mestalla para disputar el partido que había tenido que ser aplazado cuando el Real Madrid viajó a Japón para disputar el Mundial de Clubes que acabaría ganando, pero ese partido ante el conjunto ché fue un nuevo tropiezo pues a los 15 minutos ya perdíamos 2-0 y aunque Cristiano Ronaldo apretó el marcador al filo del descanso, la segunda mitad fue un quiero y no puedo que acabó en una derrota que apretaba la Liga cada vez más.
A punto estuvo el Real Madrid de perder el liderato liguero, cuando el fin de semana siguiente visitó el campo del Villarreal y el equipo castellonense se adelantó 2-0 con 2 goles muy dudosos de los que nadie habló después porque el Real Madrid acabó remontando el marcador ayudándose de un penalti que el árbitro pitó por mano clara de Bruno, pero que todo el antimadridismo patrio consideró involuntaria y para completar el esperpento el presidente del Villarreal Fernando Roig acusó al árbitro de salir del campo con bolsas del Real Madrid en la que llevaba regalos que le había concedido el equipo blanco poniendo en duda la imparcialidad del colegiado. Pero el bache del equipo continuaba, y en el siguiente partido liguero recibió a Las Palmas en el Bernabéu, en un partido que Las Palmas se llegó a poner con una ventaja de 1-3 en el marcador debido a un fallo grave de Keylor, pero el equipo consiguió empatar gracias fundamentalmente a Cristiano Ronaldo, ya que Bale había sido expulsado minutos antes por enzarzarse en una tangana con Jonathan Viera, parecía que el Real Madrid quedaba abonado a la épica pero el siguiente partido se saldó con un “tranquilo” 0-4 endosado al Éibar en Ipurúa.
En la siguiente jornada, el Real Madrid recibió al Betis en un partido en el que volvió a fallar Keylor Navas haciendo la de Arconada, pues cuando parecía que tenía el balón atrapado le pasó por debajo del cuerpo para regalar el empate al Betis, que sólo se rompió gracias a otro de los cabezazos de Sergio Ramos que tantos puntos nos salvaron el pasado año y tanto echamos de menos esta temporada, a continuación llegó la vuelta frente al Nápoles en el estadio de San Paolo en la que también ganamos 1-3 en un partido que se sufrió bastante porque se empezó perdiendo, pero que se consiguió remontar para no pasar apuros en la clasificación a los cuartos de final. El siguiente partido fue la visita a un campo siempre difícil como San Mamés, donde el Real Madrid ganó 1-2 con mucho sufrimiento pues se adelantó en el marcador, le empataron a la vuelta del descanso pero afortunadamente consiguió reaccionar rápidamente y 1 gol de Casemiro volvió a adelantar al equipo, que se pasó el resto del partido aguantando el empuje del equipo bilbaíno.
En ese momento llegó el parón de selecciones y a la vuelta del mismo, el equipo recibió al Alavés solventando el partido con un 4-0 que resultó bastante anodino y que sólo se agitó con una genialidad de Isco, después hubo jornada entre semana en la que Zidane dejó ver ante el Leganés esa segunda unidad que tanto nos ayudó el pasado año, y los habituales suplentes como James, Morata, Asensio o Lucas Vázquez endosaron un 2-4 al equipo pepinero, y en la siguiente jornada llegó el derbi ante el Atlético de Madrid que acabó 1-1, ese partido estuvo protagonizado por Pepe, que primero marcó su último gol con el Real Madrid y minutos después tuvo que ser sustituido porque se rompió 2 costillas en un choque con Toni Kroos, por lo que el central portugués disputó en ese partido su último encuentro de su larga estancia en el Real Madrid, pero el equipo no supo defender la victoria y el Atleti empató en los últimos minutos en una jugada pésimamente defendida que aprovechó Griezmann.
A continuación, llegó la eliminatoria de Champions ante el Bayern de Múnich de un viejo conocido como Ancelotti, en la ida el equipo venció 1-2 con una exhibición de Cristiano Ronaldo que no sólo marcó los 2 goles del conjunto blanco sino que provocó la expulsión de Javi Martínez, la cuál facilitó la victoria en Alemania que no fue mayor porque Neuer demostró porque es el mejor portero del mundo con paradas impresionantes que evitaron que el Real Madrid decidiera la eliminatoria en la ida, en el siguiente encuentro liguero el equipo visitaba El Molinón pensando en la vuelta de la eliminatoria ante el Bayern, y esa confianza estuvo a punto de costarle carísima a los chicos de Zidane porque un Sporting que llegaba en descenso y que acabó bajando a la Liga Adelante, se adelantó por 2 veces en el marcador y no ganó aquel partido gracias a que aparecieron Morata y Isco para voltear en el marcador casi en el descuento.
La vuelta de la eliminatoria de Champions fue muy sufrida, porque el equipo bávaro mandó el partido a la prórroga ganando 1-2 en el tiempo reglamentario beneficiándose de un gol en fuera de juego, pero nadie se acordó de ese gol ilegal cuando el árbitro expulsó justamente a Arturo Vidal y concedió 2 goles a Cristiano Ronaldo en sendos fuera de juego claros, que eclipsaron el golazo final de Asensio y llevaron a Ancelotti a lanzar una rajada contra el arbitraje que jamás pronunció los 2 años que entrenó a nuestro equipo sufriendo arbitrajes como mínimo igual de perjudiciales, pero no iban a acabar ahí las emociones fuertes pues el siguiente fin de semana llegaba el Barça al Bernabéu sabiendo que si el Real Madrid vencía el Clásico, prácticamente sentenciaba la Liga, pero la presión no pasó factura al equipo blaugrana en un clásico con muchos altibajos en el que empezó marcando Casemiro, el Barça remontó gracias a Messi y a un impresionante trallazo de Rakitic que se coló por toda la escuadra, y que el Real Madrid empató por medio de James cuando ya estaba con un jugador menos merced a la expulsión de Sergio Ramos, pero cuando la lógica invitaba a que el Real Madrid luchara por mantener el empate a 2 y más jugando en inferioridad, el equipo se echó arriba y el Barça enganchó un contraataque que Marcelo se negó a cortar en falta y que acabó con Messi superando a Keylor Navas en la última jugada del partido para colocar el 2-3 en el marcador y empatar a puntos con el Real Madrid faltando pocas jornadas de Liga, aunque el conjunto blanco tenía un partido menos que disputar ante el Celta de Vigo.
A pesar de esa dolorosa derrota, Zidane no cambió su filosofía y en la siguiente jornada entre semana en la que el Real Madrid visitó Riazor hizo hasta 9 cambios con respecto a la alineación del Clásico, y la apuesta le salió redonda porque los Asensio, Isco, Lucas Vázquez, James o Kiko Casilla endosaron nada menos que un 2-6 a domicilio al Deportivo de la Coruña, después recibimos al Valencia en el Santiago Bernabéu en un partido que empezamos ganando pero que nos complicó Parejo clavando una falta directa a la escuadra de Keylor en la recta final del partido, afortunadamente el Real Madrid pudo ganar ese partido gracias a un postrero gol de Marcelo.
A continuación, llegó la semifinal de Champions ante el Atlético de Madrid recordada en la ida por el tremendo baño táctico de Zidane a Simeone en la ida que se materializó en un hak-trick imponente de Cristiano Ronaldo, y en la vuelta por ese arreón inicial del Atleti que le puso 2-0 en el primer cuarto de hora de partido y que prometía una segunda parte de infarto, de no ser por la providencial aparición de Benzema quien con su histórica jugada desbordando a 3 defensas sobre la línea de fondo del Calderón que acabó en el gol de Isco, aplacó la reacción rojiblanca hasta dejar el marcador en ese solitario 1-2 que nos mandó directos a la final de Cardiff, mientras tanto entre medias habíamos visitado el campo del Granada para golearles por 0-4 con sendos dobletes de James y Morata, en un partido en el que destacó hasta Fabio Coentrao en una de sus escasas apariciones de la pasada temporada.
La Liga se decidió en las últimas jornadas, en el que recibimos al Sevilla en el último partido liguero en el Bernabéu para vencerles por 4-1 en un partido que se recuerda por el gol de Nacho quien marcó astutamente una falta directa en la que pilló desprevenida a toda la defensa sevillista, que no había solicitado barrera y que se quedó a cuadros cuando el árbitro dio validez al gol de falta directa que había marcado el siempre fiable canterano blanco. A continuación, el equipo volvió a Balaídos a disputar el partido que el alcalde de Vigo había decidido suspender en febrero sin contar con nadie, y el Real Madrid se impuso por 0-2 con goles de Cristiano Ronaldo y finalmente el equipo se proclamó campeón frente a un Málaga que no se jugaba nada, y que perdió también por 0-2 gracias a un gol inicial de Cristiano y a otro de Benzema a la vuelta del descanso y en el que Keylor Navas dejó su impronta sacando de la escuadra una falta directa de Sandro, que tiempo después fue elegida la mejor parada de la pasada Liga, la cual el Real Madrid conquistó 5 años después, pero en la que se quedó sin recibir el trofeo el día que se proclamó campeón por esa rancia costumbre de la corrupta RFEF de no llevar réplicas del trofeo a todos los campos donde esté el campeonato en juego.
Pero aún quedaba el mejor momento del año para los madridistas, que llegó el 3 de junio en la final de Champions disputada en Cardiff ante la Juventus de Turín, en la que el Real Madrid empezó ganando con gol de Cristiano Ronaldo, empató Mandzukic al filo del descanso con una espectacular chilena que pasado el tiempo fue elegida mejor gol de toda la edición de la pasada Champions, pero los chicos de Zidane arrasaron a la Juve en el segundo tiempo en una exhibición de todo el equipo que comenzó con un trallazo de Casemiro desde fuera del área que rebotó en un viejo conocido madridista como Khedira antes de superar a Buffon, después fue Cristiano Ronaldo quien aprovechó un pase atrás de Modric para poner el 1-3 en el marcador y finalmente fue Asensio quien redondeó el 1-4 final mandando a la red un pase desde la línea de fondo de Marcelo, curiosamente el extremo mallorquín marcó la pasada temporada el primer y último gol del Real Madrid en competición oficial, estrenándose con aquel impresionante golazo ante el Sevilla en la Supercopa de Europa de Trondheim y cerrando el 1-4 endosado a la Juve en Cardiff, con el que el Real Madrid agrandaba su leyenda convirtiéndose en el único equipo que ha conseguido revalidar la Champions League en 2 ediciones consecutivas, desde que lo hiciera el afamado Milán de Sacchi cuando aún era la antigua Copa de Europa. De esa manera, la pasada temporada el Real Madrid ganó un doblete histórico Liga-Champions que no había conseguido repetir desde hace casi 60 años en que aquel mítico equipo comandado por Di Stéfano, Puskas y Gento ganó las 5 primeras Copas de Europa consecutivas.