Una crónica de: @luismanper
El partido de hoy en el Molinón emparedado entre la eliminatoria de Champions contra el Bayern de Múnich se presentaba como el típico partido trampa, ante un rival que marcha en los puestos de descenso con la necesidad de puntos que eso supone a estas alturas de temporada y con un equipo muy antimadridista que cuando juega contra el Barça les pone la alfombra roja y que habría salvado la temporada si nos hubiera robado puntos hoy que permitieran al Barça echarnos el aliento en el cogote en caso de que gane su partido… y a punto estuvo el Sporting de Gijón de amargarnos la tarde.
Sacó Zidane un equipo con un único titular habitual de partidos grandes que fue el capitán Sergio Ramos, por lo que formó un once con Kiko Casilla de portero, Danilo y Coentrao de laterales y de centrales Sergio Ramos y un Nacho apercibido de amarilla, de mediocampo hacia adelante no hubo un solo titular pues jugó Kovacic de 5, flanqueado por Isco y James, mientras que la parte de arriba la ocuparon Lucas y Asensio en los costados y Morata como único nueve.
El partido empezó con dominio alterno y tras una ocasión de Lucas Vázquez, que cabeceó fuera un centro perfecto de Danilo, el Sporting tuvo dos ocasiones claras, en la primera un cabezazo que se marchó fuera por poco, pero en la segunda que tuvieron acabó en gol, cuando Mikel Vesga puso un centro aéreo que superó a toda la defensa madridista y con un solo toque y sin dejar caer el balón a Duje Cop no le tembló el pulso para batir a Kiko Casilla, se echó en falta que el portero catalán saliera con más decisión a impedir el remate del jugador gijonés.
A partir de ese momento, empezó la exhibición de Isco cuando el malagueño cazó un balón en una esquina del área y empezó a regatear contrarios hasta que encontró el hueco para disparar y la colocó en la escuadra, se dice pronto pero la obra de arte del primer gol del Real Madrid hoy puede ser uno de los goles de la temporada. El Real Madrid siguió dominando tras el empate y pudo crear peligro con un par de centros rasos de Coentrao que Morata no llegó a rematar. Hay que destacar que el lateral portugués ha desempeñado hoy un papel más que digno para llevar más de un año sin ser titular.
Mientras Fernández Borbalán perdonó a Nacho la amarilla que le habría costado el Clásico y de paso nos birlaba un par de penaltis por agarrones claros a Sergio Ramos dentro del área , seguíamos poniendo balones aéreos que la poblada defensa de cinco del Sporting despejaba sin contemplaciones, llegó el descanso cortando el árbitro una jugada en ataque de James Rodríguez (hoy desaparecido una vez más). La segunda parte comenzó con un cabezazo de Nacho que despejó el portero a córner, el cual no concedió el equipo arbitral y en la siguiente jugada llegó el segundo gol del Sporting en una jugada de estrategia con un balón bombeado desde el mediocampo que Babin puso en el área y Mikel Vesga remató de cabeza para superar de vaselina a un Kiko Casilla que pudo hacer muchísimo más en ese segundo gol.
Al Real Madrid no le quedó más remedio que lanzarse con todo arriba y Zidane contribuyó a ello sustituyendo a Coentrao para que entrara Marcelo, Isco estuvo a punto de volver a empatar en una jugada maradoniana en la que regateaba a rivales con una facilidad pasmosa pero le sobró un último remate en el que perdió el dominio del balón y obligó a Danilo a lanzarse con todo a por el balón dividido para dejar a Marcelo un tiro franco que mandó fuera, después James dispuso de una falta peligrosa que estrelló en una barrera… de dos jugadores, pero iba a ser Morata quien empatara el partido cabeceando a gol un sublime centro de Danilo, que hoy ha realizado un partido soberbio.
El partido enloquecía por momentos y estaba cada vez más tenso como demuestra una tangana que tuvo Morata con Lillo que le costó la amarilla a un jugador que debería haber sido expulsado en la primera mitad cuando derribó a Asensio sin balón de por medio, el Sporting intentaba llegar mediante centros aéreos que entre Nacho y Ramos despejaban a duras penas, incluso llegó un jugador suyo a la frontal del área y su disparo se marchó rozando el palo de Kiko Casilla, también el Real Madrid tenía ocasiones y más tras la salida de Mariano en lugar de Lucas Vázquez, quien hoy ha estado intrascendente.
Y con las urgencias del final del partido y sin más alternativas en el banquillo que dar entrada a Casemiro en lugar de Kovacic, llegó el balón a los pies de Isco en una esquina del área y el malagueño esta vez no se lo pensó y disparó raso y fuerte al palo del portero para colocar el 2-3 en el marcador y dar la victoria al Real Madrid en ese tipo de campos, donde Cruyff decía que se ganan Ligas. Mientras tanto la BBC y Carvajal han visto el partido descansando en su casa para estar al 100% en la semana grande de la temporada, en la que nos vamos a jugar la temporada en 5 días recibiendo a Bayern y Barça en el Santiago Bernabéu.