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Una previa de: @pepo2204
Tras la jornada de dieciseisavos de Copa en la que el Real Madrid debutó en la competición derrotando a la Deportiva Minera en Cartagena y pasando a la siguiente ronda, y disputada la semifinal de la SuperCopa frente al Mallorca, nos metemos en la tercera de las finales de los siete torneos que disputa el club merengue esta temporada; en esta ocasión se trata de la final de la citada SuperCopa de España, que se disputa nuevamente en Arabia y que medirá al Campeón y subcampeón de LaLiga: Real Madrid – Barcelona (Domingo 20:00h).
El paso de los Reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltasar, dejó regalos en todos los hogares españoles y una lluvia de goles en Cartagonova, en un partido de ésos en los que el equipo grande tiene más que perder que que ganar, y el Madrid superó el trámite como se debía, dignificando la competición y pasando a octavos, donde le espera el Celta el próximo jueves.
Con ese ánimo, viajó el equipo de Ancelotti a Yeddah a enfrentarse al Mallorca, subcampeón de Copa, buscando meterse en la Final del torneo, y logró el objetivo de forma holgada, derrotando a los bermellones por tres goles a cero, en un partido que tuvo más picante de lo que podría parecer por el resultado, incluyendo tangana final entre integrantes de ambos equipos.
El Madrid derrotó con suficiencia a un Mallorca que, pese a ello tuvo sus ocasiones para poder marcar, pero nada pudo hacer ante el buen desempeño del equipo merengue, que por momentos ofreció una versión arrolladora, llegando a tirar más de veinte veces sobre la puerta mallorquinista.
Cómo os decía, el partido tuvo de todo, y no sólo futbolístico. Como cada vez que el Real Madrid se enfrenta al Mallorca, algún “primaveras” se encarga de dar la nota y de buscar la notoriedad que no logra a través de su desempeño como jugador profesional de fútbol. Se da la circunstancia de que suele ser casi siempre el mismo el que la lía, como aquel tonto a las tres de la infancia, que se empeñaba en mostrarse como eso, como un pelagatos auténtico buscando la colleja fácil. Pues sí, amigos, el ínclito Maffeo lo volvió a hacer; volvió a superarse una vez más este boxeador frustrado, este llorica que se viste de valiente cuando habla con la prensa mentando a Vinicius, que es lo único que puede hacer que se posen sobre él los focos, porque su desempeño futbolístico llama la atención entre cero y nada.
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Quizá estos botarates piensan que pueden proferir cualquier ofensa buscando la burla fácil apoyándose en el antimadridismo cómplice, sin que tenga consecuencia alguna; o tirarse al suelo como si hubieran sido fulminados por una descarga tras recibir un leve toque con el dedo, sin que nadie vaya a levantar la voz. Quizá piensan que luego les va a valer salir llorando haciéndose las víctimas buscando de nuevo el apoyo de medios y aficiones antimadridistas, y no; a la vista después de lo acontecido en el partido frente al Mallorca, no les vale; al menos a este Maffeo, al que todo el mundo ha podido conocer, por si alguien aún no le conocía. No le daremos más notoriedad. Ya ha tenido su momento de gloria y lo que no tendrá será una Final que disputar.
Ésa Final la disputarán el Campeón de LaLiga y el club anteriormente conocido por las palancas y que hoy puede ser llamado con propiedad el club del Gobierno o el de los reinscritos.
Y es que cuando ya crees haberlo visto todo, te encuentras con un club que, tras pagar durante diecisiete años al vicepresidente en activo de los árbitros, después de pasarse las normas del fair play financiero por el forro de sus caprichos, después de vender tres veces algo por lo que no ha cobrado y fichar jugadores con dinero que no recibió, de deber pasta a todo dios, de despedir a entrenadores sin pagarles el finiquito, de pasar tres meses sin ingresar en cuenta lo estipulado para poder inscribir a los jugadores, después de recibir dos negativas de distintos juzgados, finalmente se encuentra con una medida cautelarísima concedida por un organismo político como es el CSD, que se lleva por delante todos los principios legales y reglamentos de la competición habidos y por haber.
Política y fútbol no casan bien, eso es algo sabido, pero en este caso, el tufo es inaguantable, con corte de mangas incluido por parte del impresentable que el club de las palancas tiene por presidente, al que el Gobierno le ha tenido que enmendar la plana ante una gestión nefasta y ofensivamente negligente.
Claro, que ahora que actúa el Gobierno, tenemos a los clubes que conforman LaLiga ofendidos por la tropelía; antes cuando saltó el caso Negreira todos callaban, pero hoy ya es harina de otro costal. Y no les falta razón para la queja, pero cabe preguntarse ¿Dónde estaban esas mismas LaLiga y RFEF con el caso Negreira? ¿Por qué no gritaron entonces dejando sólo al Real Madrid, mientras únicamente éste se personaba como acusación ante la gravedad del asunto?.
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Hoy claman pidiendo al Madrid que sea su altavoz ante la actuación presuntamente ilegal del Gobierno, que convierte una vez más al fútbol español en el hazmerreír del fútbol europeo y mundial.
Hablemos de fútbol por fin para no calentarnos más de la cuenta. En lo que se refiere a los de las palancas, derrotaron al Athletic en la semifinal, y tras pasar de inventar el fútbol una vez más, a la depresión por los últimos resultados en liga y ver cómo el Madrid les superaba, buscan ganar un título que, por encima de todo arruine la posibilidad del septiplete del Real Madrid.
Hansi Flick podrá contar con Dani Olmo tras la cautelarísima, y deberá valorar si le alinea o no; del mismo modo que deberá decidir sobre si poner a Sczesny o a Iñaki Peña, tras el retraso de éste en llegar a la charla técnica antes de la semifinal. Estaría pendiente de la cautelar la criatura…
Deberá también el técnico alemán lidiar los problemas con Raphinha, que no parece muy contento con la situación del club palanquero, y con Araújo que parece que ésta deseando abandonar el club de la ciudad cautelar, digo, Condal. ¿En qué estaría yo pensando?.
El fuera de juego y la potente delantera del equipo de la cautelarísima, son las armas más potentes del conjunto de Flick para tratar de derrotar al equipo blanco.
Imagen: Sport
El equipo culé ha ganado los dos enfrentamientos de esta temporada frente al Real Madrid, pero en esta ocasión se trata de una Final, y todos sabemos lo que pasa cuando se juega una Final frente al Madrid.
Un Madrid que tras la semifinal quiere pasar página de Maffeos y demás pringadetes y afronta la tercera de las finales de los siete títulos en disputa.
La mejora de los de Ancelotti es evidente, aunque aún hay muchas cosas por pulir. Es obvio que la recuperación física de algunos jugadores es una de las razones, sino la principal, pero también la mejora del rendimiento de otros que no estaban mostrando su mejor nivel y que, poco a poco empiezan a mejorar su aportación al equipo.
Además, la llamada unidad B del equipo está respondiendo a Ancelotti y mostrando una fiabilidad que da tranquilidad al técnico y al resto de compañeros.
El conjunto merengue deberá aprovechar la rapidez de sus delanteros, evitando caer en la trampa del fuera de juego como en el partido de liga.
Imagen: realmadrid.com
Faltan Carvajal, Militão y Alaba para la Final, que si bien está en el banquillo, parece que no podrá jugar hasta dentro de unos días. Modrić ya está recuperado de su proceso gripal, y podrá estar.
Dirigirá el partido Gil Manzano del comité extremeño, ayudado por el gallego Iglesias Villanueva desde el VAR.
Clásico en Arabia, donde por lo visto es más fácil que te acosen en la grada que poderse tomar una caña con un aperitivo de gambas con gabardina, y si no que se lo pregunten a los aficionados del Mallorca. Aún así parece que la “nueva” RFEF ampliará el contrato cinco años más. Nada que sorprenda.
Una Final trepidante, sin medidas cautelares, sin más palanca que los goles. Un precedente desfavorable al Madrid que desea revertir cuanto antes para devolver la normalidad, y poner rumbo al septiplete. ¡Apasionante! #HalaMadrid
Real Madrid C. de F. – FC Barcelona – SuperCopa de España – Final – King Abdullah Sports City Stadium – Domingo 12.01.2025 20:00h.
