CRÓNICA | Polvora mojada y «Álvaros» helados: Real Madrid Castilla 0 – 0 CF Talavera de la Reina

Una crónica de: @Datemus 

Tras el último tropiezo en casa y la remontada a domicilio, el Castilla afrontaba un nuevo examen en su estadio contra uno de los colistas, el Talavera de Pedro Díaz, en un partido que se presumía incómodo si los locales no conseguían marcar pronto. Los toledanos venían de ligar una gran racha que les había permitido sumar diez puntos en sus últimos cuatro enfrentamientos.

Raúl puso en liza a Mario de Luis como arquero. Defensa de tres centrales, con Marvel, Rafa Marín y Carrillo. Laterales largos, una vez más, con Vinicius Tobías por la derecha y Obrador por la izquierda. Posiciones interiores en el dentro del campo para Mario Martín, Dotor, Álvaro Martín y Arribas. Como ariete, Álvaro Rodríguez.

Comenzó el Castilla con su clásica vocación ofensiva. La primera ocasión clara llegó a los cinco minutos, en una gran combinación de banda a banda, desde Tobías, pasando por Arribas, llevándola al centro con Mario Martín y de ahí, con un gran pase en largo con el exterior del stopper blanco, a la incorporación por la izquierda de Obrador, que a su vez colgó un verdadero caramelo a la cabeza de Álvaro, fallón en la tarde de hoy que, en posición inmejorable, envió su testarazo desviado, desperdiciando una hermosísima jugada de gol.

A pesar del dominio, los veinte minutos siguientes fueron estériles en la creación de ocasiones. El Talavera demostró el porqué de su magnífica reacción en liga desde que Pedro Díaz se hizo cargo del equipo. Las conexiones de Arribas y Álvaro Martín estaban interrumpidas y el equipo echaba en falta esas jugadas imaginativas, de pura creación, en la zona del campo donde más cuesta generar una idea para llevar peligro a la portería rival. Difícil superar así las dos líneas de cuatro castellanas, engarzadas a través un gran Lassina, que demostró su calidad como mediocentro.

En el 25’, llegó por fin una nueva sucesión de ocasiones locales. La primera, tras una gran pared entre Arribas y Dotor, tras la que el pequeño diez remató algo escorado con la diestra, para que Biel Ribas se luciera en una gran palomita. Segundos después, una acción entre Arribas y Tobías terminó con un centro pasado del brasileño que Obrador no acertó a rematar bien. La pelota volvió a Tobías que puso una rosca excelente a la cabeza de Álvaro Rodríguez, que, de nuevo, desperdició la ocasión estrellando su testarazo, en una posición perfecta para el remate, en el palo de la portería visitante.

 No supo el Castilla traducir en gol los cinco minutos de agobio continuo al que sometió a su rival, y el Talavera tomó un poco de aire de la mano de cierta tenencia de la pelota. Comoquiera que fuera, el cuadro de Raúl mostraba síntomas de tener por segunda vez esta temporada en casa la santabárbara de su navío inundada. La pólvora estaba calada especialmente para los “Álvaros”, ya que ni uno terminaba de entrar en juego, ni el otro de acertar a enviar a la red los buenos cueros de que dispuso.

Se llegó así al final de un primer tiempo de dominio local pero de arreones intermitentes, que con un delantero centro con la mirilla desviada resultaron insuficientes como para sacar fruto de la iniciativa en la creación de juego.

El segundo tiempo siguió por los mismos derroteros. El Castilla continuó atacando contra un Talavera muy cerrado atrás, empeñado en mantener su portería a cero como fuera. Las dos primeras jugadas de peligro vinieron de un Vinicius Tobías cuya participación ofensiva crece a pasos agigantados cada jornada.

En el 55’, tras una recuperación adelantada del Castilla con cierta fortuna por un rebote del balón en Obrador, Arribas dispara prácticamente a placer, pero la pelota le sale suficientemente centrada como para que el arquero visitante despejara con una gran mano abajo.

En el 64’, Álvaro Martín cedió su puesto a Iker Bravo y Mario Martín a Oscar Aranda. Cambios muy ofensivos buscando abrir el cerrojazo del cuadro toledano. Dos minutos antes, Obrador había rematado otra buena jugada de Tobías desde su banda, pero un defensor local consiguió sacar prácticamente bajo palos.

Lejos de funcionar, los cambios de Raúl descompusieron a los suyos, más por demerito de los futbolistas que por desacierto táctico. Demasiada ansiedad y una serie de balones perdidos muy rápidamente, en errores no forzados, que dieron verdadero oxígeno al Talavera, que aprovechó para llegar con peligro por primera vez en el segundo periodo a la portería de Mario de Luis. Imprecisiones impropias de los centrocampistas castillistas que no terminaban de cesar en unos minutos que parecieron eternos.

En el 74’, por fin llegó una jugada de peligro de nuevo entre Iker Bravo y Aranda, en la que el granadino demostró el gran uno contra uno que tanto echa de menos este año su paisano @pepeillo50. El disparo final terminó en córner, como en el resto de lanzamientos a puerta, hasta cuatro, que se produjeron a la salida del saque de esquina, sin que los nuestros pudieran sortear el laberinto de piernas toledanas.

Volvió a dominar el Castilla a la par que se desangraba su tiempo restante para poder evitar el empate. El horror llegó a la salida de un córner en el que, incomprensiblemente y tras un rechace, Tobías quiso combinar de cabeza hacia la frontal del área visitante. Los toledanos, con la acción de cara, cortaron y aprovecharon para lanzar una rapidísima contra y dejar en uno contra uno a Álvaro Juan, que controló bien, condujo mejor, pero definió horrible ante la salida de Mario de Luis, con un Obrador que apenas llegó a tocar con la mano al delantero talaverano. Se animaron los visitantes y le dieron una lección al Castilla de cómo hacer peligro en los saques de esquina, jugada en la que los nuestros se mostraron impotentes en el encuentro de hoy. A la salida de uno de los que pudieron disfrutar de forma consecutiva, un chut desde la frontal pudo acabar en la red de no ser por un paradón extraordinario de Mario de Luis, que sigue destapándose como una de las figuras merengues de esta campaña.

En el 86’, cuando se iba a botar otro saque de esquina, Dotor acaricia la cara Lolo Garrido, que le echa todo el teatro del mundo para engañar al árbitro y hacer lo que mejor se le da al team Rubiales: equivocarse en contra de todo lo que sea el Real Madrid. Dotor vio la roja directa y los nuestros, una vez más, a jugar en inferioridad por una decisión del colegiado manifiestamente injusta.

Raúl quitó a Álvaro Rodríguez y a Tobías para dar entrada a Leiva y Villar. Este último jugador debería de disfrutar de más minutos cuando el partido necesita de más presencia en mediocampo. Leiva le puso unas ganas espectaculares y fruto de su energía y buen juego, llegaron varias ocasiones y acercamientos en los últimos minutos, en los que pareció que era el Castilla el que estaba en superioridad numérica. Sin embargo, el gol no llegó y los nuestros tuvieron que conformarse con un punto que sabe a muy poco. Segundo tropiezo consecutivo en el Di Stefano, en un partido extraño que se torció especialmente tras el primer turno de cambios de Raúl, sin que acertemos a saber cómo pudo descomponerse tanto el centro del campo durante unos minutos que permitieron recuperar pulmón a nuestro rival. Se echó de menos una mayor participación de Arribas y de Álvaro Martín en el segundo periodo, así como de más acierto de Álvaro Rodríguez en los controles y conducciones en jugadas prometedoras, sin siquiera mencionar las ocasiones del primer tiempo. Esperemos que no llegue la ansiedad con estos contratiempos, que no deben deslucir la gran campaña efectuada hasta la fecha por nuestro filial. Gracias al colegiado, el próximo partido se afrontará con la importantísima baja de Dotor. Esperemos que los nuestros sepan sortearla.

 

FICHA TÉCNICA

Real Madrid Castilla: De Luis, Tobías (Leiva, 90), Rafa Marín, Carrillo, Mario Martín, Dotor, Arribas, Álvaro Martín (Iker Bravo, 65), Marvel (Aranda, 65), Obrador and Álvaro (Villar, 90).

CF Talavera de la Reina: Biel, Parra, Ramos, Álvaro, Lassina, Zanelli, Malagón (Morante, 64), Reguera (Lolo, 72), Faye (Javi Bueno, 72), Escudero and Brau.