Un articulo de: @susanaurue
En esta semana convulsa para el madridismo por la sanción FIFA, nos despertábamos con una noticia que ha dolido a muchos (entre los que me encuentro) profundamente.
Tal vez el señor González Blanco siempre fue así, y algunos como yo no lo quisimos ver. ¿O acaso se le ha quedado un poso de bienquedismo de su época delbosquiana? El caso es que se me ha caído una venda de los ojos.
No voy a entrar a valorar en si debería acudir o no al acto del Barça en Nueva York, lo que me parece un ultraje al madridismo y al club que le ha pagado muy bien durante años son sus fotos con el «enfermo» de Stoichkov, un individuo que ha pisoteado la camiseta de nuestro club, que nos ha comparado con una piara de cerdos y que no se cansa de insultar al madridismo.
Siempre me he declarado raulista, sin mojabraguismos extremos; pero he de decirle señor González Blanco, que usted se me ha caído del pedestal en el que lo tenía por tantos años de trabajo y sacrifico, por tantos años de lucha y casta, y supongo que como a mí eso le ha pasado a muchos madridistas. Es triste decirlo, pero ha pasado usted de ser un mito a un ídolo con pies de barro.
No me considero tan importante como para que mis palabras le lleguen, más bien todo lo contrario, pero quería expresar con estas pocas líneas lo que he sentido con las famosas fotos.
Sólo espero que recapacite y piense si este es el camino que quiere seguir. Cumpla con su trabajo, pero no ofenda al madridismo, ese madridismo que ha estado a su lado en los momentos buenos y en los malos.
Sin más que decirle, me despido con una simple frase: ¡Nos dueles Raúl!