CRÓNICA | ✍ JOSELU CIERRA EL PLENO: UNIÓN BERLÍN 2 – 3 REAL MADRID

Una crónica de: @luismanper

Se presentaba el partido de ayer en Berlín, como el típico partido de Champions con el equipo ya clasificado para la siguiente ronda como primero de grupo, idóneo para rotar a los jugadores que más carga de minutos llevan en las piernas y dar su oportunidad a canteranos o suplentísimos, que conviene tener activos por si la ocasión lo requiere. Pero Ancelotti volvió a demostrar por enésima vez que con él la lógica sirve de poco y apostó por un equipo con demasiados titulares para lo poco que había en juego, y paradójicamente los goles de la victoria los marcaron suplentes habituales como Joselu y Ceballos.

Como decía el once titular nos sorprendió a todos por alinear a titulares indiscutibles, ya que Carletto formó con Kepa en portería, Lucas Vázquez y Fran García en los laterales con Alaba y Nacho como centrales, Valverde en el eje del equipo flanqueado por Modric y Ceballos, con Bellingham en la otra punta del rombo y quedando la delantera para Joselu y Rodrygo. La presencia en un partido completamente intrascendente de jugadores con tanta carga de minutos como el uruguayo, el inglés y el brasileño nos desconcertó a todos y más teniendo en cuenta que un meritorio como Brahim se quedaba en el banquillo en un partido teóricamente propicio para él.

Imagen: realmadrid.com 

Por si fuera poco, el Unión Berlín se lanzó arriba nada más empezar el partido ya que su única opción de seguir vivo en Europa League era ganar y esperar el resultado del Sporting de Braga, y a punto estuvo de adelantarse en el marcador cuando apenas nos habíamos sentado a ver el partido, con sendos disparos cercanos que desbarató Kepa primero con la mano a bocajarro y después con la tibia, recordando por qué el Real Madrid fue a buscarlo el pasado verano cuando se rompió Courtois. A partir de ese momento, el equipo fue haciéndose poco a poco con el control del partido a pesar de que el Unión Berlín seguía presionando muy arriba, como demostró un tiro de Bellingham en el área pequeña que consiguieron despejar entre la defensa y el portero o un cabezazo de Joselu que besó el larguero presagiando lo que estaba por venir.

Aunque lo que nadie esperaba era que nos pitaran un penalti a favor al filo del descanso y menos aún se esperaba que Modric lo tirara raso al centro, facilitando que el portero lo rebotase con los pies despertando la psicosis desde los 11 metros, ya que en lo que va de temporada al Real Madrid le han pitado 3 penaltis y ha fallado los 3, y para colmo de males en la siguiente jugada en un saque de puerta muy llovido del portero local, Nacho se tragó el bote, Alaba no acertó a despejar pegándole a la remanguillé y dejando el balón muerto en la frontal del área, que el atacante alemán no dudó en aprovechar ganándole el cuerpeo a Lucas Vázquez y superando a Kepa por debajo de las piernas para mandar el partido al descanso con 1-0.

Imagen: realmadrid.com 

Ancelotti no varió su plan de partido, y en el descanso dio descanso por fin a Valverde para dar entrada a Kroos, y a partir de entonces el que atacaba sin cuartel era el equipo blanco que estuvo a punto de empatar en un tiro de Lucas Vázquez que despejó el portero danés del Unión Berlín, que a esas alturas ya se había erigido en el protagonista del partido como demostró minutos después cuando despejó un cabezazo de Rodrygo a precioso pase de Bellingham, con muchos reflejos y haciéndose grande, cual portero de balonmano, pero con los cabezazos de Joselu para remontar el partido ya tuvo que hincar la rodilla, primero el delantero nacido en Alemania ganó el salto al defensor para colocar en la cepa del poste una asistencia perfecta de Rodrygo y luego aprovechó un pase a media altura de Fran García para rematar casi en plancha y colocar el 1-2.

Y cuando parecía que el partido estaba resuelto y Ancelotti ya había empezado el carrusel de cambios sustituyendo a un amonestado Alaba por Rudiger y a Rodrygo por Brahim, el Unión Berlín aprovechó un balón suelto en la frontal del área para volver a empatar con un disparo seco a la cepa del palo de un Kepa que vio el balón cuando ya era demasiado tarde, por lo que esta vez sí el empate parecía irrevocable pero entonces apareció Ceballos para mandar al fondo de las mallas un disparo mordido desde la frontal del área que rozó en las piernas de un defensor y que sonó a reivindicación como se intuyó en ese abrazo con Ancelotti, cuando el italiano lo cambió por Nico Paz tras reencontrarse con el gol casi 11 meses después, y mientras tanto un amonestado Bellingham completó los 90 minutos en un partido intrascendente.

Imagen: realmadrid.com 

Ese gol del mediocampista andaluz cerró una fase de grupos inmaculada del Real Madrid, ya que un disparo del Unión Berlín a la desesperada en el descuento fue atrapado mansamente por Kepa, cerrándose la fase de clasificación con 18 puntos de 18 posibles en una racha perfecta que solamente el Manchester City está en condiciones de igualar en esta Champions, vislumbrando quien será uno de los grandes rivales por un título, que como todos sabemos se disputará en primavera, y de momento queda aparcado hasta febrero a la espera del sorteo del próximo lunes.