Una cronica de: @Javirodespi – planetacb.com
¿Han visto a esos soldados, normalmente marines americanos, despidiéndose de sus novias antes de irse al frente? Pues eso es lo que ha hecho hoy el Real Madrid ante las 7.547 almas que se acercaron al Barclaycard a despedirlos, pero, eso sí, de una forma muy dulce tras la victoria ante un CAI Zaragoza que se vio incapaz de parar ese aluvión de triples con que le asoló el conjunto de Laso. Así que vayamos, sin más demora, a nuestro OjO Al Blanco, el que viene antes de la guerra.
Que no, Thompkins, quédate con Ndour
Nos sigue sin convencer y nos tememos que va a ser por mucho tiempo, Trey Thompkins vuelve a ponerse en nuestro objetivo tras echar por la borda una oportunidad más, porque no se pueden cometer 4 faltas en doce minutos, porque no se puede defender de forma tan horrible en el desplazamiento lateral, porque no puedes ser un coladero en el 1 x 1 del poste bajo… Suerte en esta historia no está solo, le acompaña Maurice Ndour que hoy no disputó ni un minuto, en palabras de Laso “porque no encontré el momento”, ni nosotros Pablo, ni nosotros.
A golpe de triple se hace el camino
El partido tuvo menos historia que un capítulo de Gran Hermano, podríamos resumirlo en que el Real Madrid dosificó sus fuerzas y se dedicó a darnos algún contraataque con cuentagotas, a mover el balón en fuera-dentro-fuera para que la cosa acabara en triple (hasta 17 metió) y que tiró más desde 6.75 (en 36 ocasiones) que de dos puntos (25), así que, con eso y la defensa zonal que puso el CAI durante mucho tiempo (un auténtico suicidio viendo la efectividad de los blancos), tenemos hecho el resumen del encuentro, así que vayamos a otras cuestiones.
La reivindicación de Lima y Doncic
Ni Augusto Lima ni Luka Doncic son los que más juegan, eso lo sabemos, pero lo que no podemos negar es que se dejan el alma en la cancha. En el partido de hoy fueron claves para ese segundo cuarto en que se notó la diferencia entre el banquillo blanco y el maño con acciones de lucha encomiable, entre el brasileño luchando por cada balón en defensa o dando espectáculo en ataque, o el esloveno teniendo mala suerte en la culminación de la canasta con entradas de mucho mérito, acompañado de algún triple (de los que hay que meter), fueron una chispa de alegría en el juego blanco que, se notaba demasiado, está pensando en la guerra de Vitoria del próximo viernes.
¡¡Dale a la entrada, Rudy!!
Otra de las cosas positivas que podemos sacar en el partido de hoy, fueron las sensaciones con Rudy Fernández en la entrada a canasta, un apartado mucho más básico de su juego que esos triples que se lanza en 1 x 1. Hoy le vimos más intenso y sin miedo al choque, con más capacidad física en ese primer paso y cambio de ritmo y, en resumidas cuentas, le vimos más Rudy, justo lo que necesita el Madrid. En el aspecto negativo las cuatro faltas más una técnica sufrida que supuso su expulsión, pero…qué sería de una jornada sin que a los blancos le pitaran la técnica de todos los encuentros.
De Carroll a Taylor, tan distintos, tan complementarios
No es que Jeffery Taylor esté jugando la temporada de su vida, ni mucho menos, pero viendo el nivel de los otros dos extranjeros fichados por los blancos, parece un soplo de aire fresco ante lo que va a venir, pero sin duda, lo mejor de todo ello es su complementación con Jaycee Carroll, no por esos cambios entre ellos según sea defensa o ataque con los que nos sorprende Laso, sino porque ambos, en la misma posición de escolta-alero, son tan diferentes entre sí, que casi nos parecen complementarios, que uno entra, otro tira triple, que uno defienda al base, otro al ala-pivot, y así, entre los dos, aportaron 30 puntos y 31 de valoración de los 114 que tuvo el equipo, una dupla con buen futuro.
La pesadilla blanca
Seríamos injustos si acabáramos este OjO resaltando a dos hombres con los que el CAI tuvo gran parte de tener opciones hasta casi el final, poniéndose a seis puntos de los de Laso, ellos son Benzing y Jelovac que tuvieron en jaque a la defensa blanca ya fuera en lanzamientos de triples o en juego interior, ambos dos, bien abastecidos por un base como Tomás Bellas, nos pareció insuficiente para que el CAI preocupara algo a los blancos.
Así terminamos por hoy, la próxima cita nos lleva a Vitoria al partido contra Laboral Kutxa, un partido en que los blancos se juegan su futuro en Europa, veremos qué tal va la cosa, pero ya saben, pase lo que pase, sigan sonriendo.
ACB Photo/Á. Martínez