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El Madrid ya está en Gran Canaria con la intención de cerrar la semifinal por la vía rápida.
Madrid, 6 de Junio de 2018 José María Cañas, losojosdeltigre.com
El Real Madrid ya está en Gran Canaria con la tranquilidad de llevar un 2-0 de renta pero con la advertencia de lo ocurrido en el segundo choque en el que el conjunto amarillo a punto estuvo de llevarse un punto importantísimo de la capital.
Así pues, los blancos deben acudir a este tercer partido con tranquilidad pero conscientes de que cualquier relajación puede ser fatal. Tal y como demostraron el martes, los de Luis Casimiro tienen un poder anotador temible lo que unido a la agresiva disposición defensiva que mostraron por momentos en Madrid y al siempre presionante público del Gran Canaria Arena, puede ser muy peligroso para el equipo blanco. Y es que el Real Madrid debe intentar sentenciar esta serie cuanto antes, no solamente para certificar su pase sino también para lograr algo de descanso ya que la hipotética final (probablemente ante un exultante Baskonia) sería durísima.
Sin embargo, si el equipo blanco quiere sentenciar por la vía rápida debe mejorar muchas cosas. Para empezar, para conseguir el 3-0 debe endurecer una defensa que en muchos momentos de esta serie ha pecado de blanco y, por supuesto cerrar mucho mejor el rebote ya que, en ausencia de Tavares, el Madrid ha sufrido mucho ante el poderío reboteador de hombres como Luke Fischer, Ondrej Balvin, Eulis Báez o Anzejs Pasecniks durante toda la eliminatoria. Si lo logran los blancos estará mucha más cerca de su séptima final consecutiva.