por Una crónica de: @luismanper
Recibía hoy el Castilla en el Alfredo Di Stefano al Barakaldo, rival directo con el que nos jugamos el primer puesto la pasada temporada y que llegaba al partido de hoy empatado a puntos con el filial en el quinto y sexto puesto, por lo que tras la derrota de la pasada semana ante el Bilbao Athletic, hoy urgía ganar para desbancar a un rival directo y de paso superarle en el golaverage particular, que venía empatado de la ida cuando nos empataron en el descuento.
El Castilla tenía muchas bajas hoy debido al virus FIFA y a la expulsión de Enzo Zidane en la derrota de Lezama, por lo que Solari alineó a Carlos Abad en portería, Álvaro Tejero y Abner en los laterales con Mario Hermoso y Álex Salto de centrales debido a la convocatoria de Lienhart con la selección sub-21 de Austria al igual que Achraf que forma parte de la Selección absoluta de Marruecos, en el mediocampo sorprendió la suplencia de Valverde, por lo que Solari apostó por Javi Muñoz y Seoane, con Febas de mediapunta flanqueado por las bandas por Sergio Díaz y Quezada que hoy ha sido adelantado al interior izquierdo, mientras que la convocatoria de Nikos con la selección griega sub-21 obligó a que Campuzano volviera tras sus 2 partidos de sanción para ser el único delantero nato.
Empezó dominando el Barakaldo y no se adelantó de milagro pues un pase de la muerte que ya había superado a Carlos Abad, fue despejado por Quezada sobre la línea de gol y después el portero canario tuvo que sacar una mano sensacional para evitar que un gran cabezazo del Barakaldo adelantara al equipo vasco en el marcador. Luego al propio Quezada se le salió el hombro y estuvo a punto de ser sustituido por lesión, pero el hoy interior aguantó el dolor y poco después recibió un balón de Tejero en tres cuartos de campo, y Quezada no se lo pensó convirtiendo el 1-0 con un potente trallazo desde fuera del área que entró pegado al poste.
El Castilla siguió dominando el partido y vio como Febas era placado cuando se disponía a encarar al portero vasco, el árbitro sólo sacó amarilla al defensor y Quezada estrelló la falta en la barrera así que el primer tiempo terminó con dominio infructuoso del Castilla, pero el comienzo del segundo tiempo iba a ser mejor pues Tejero recibió un balón en una esquina del área y disparó con la suerte de que rebotó en el culo de un defensor poniendo el balón lejos del alcance del portero vasco, por lo que el partido se encarrilaba con un 2-0 y Solari sacaba por fin a Valverde en lugar de un Seoane que había sido amonestado en la primera mitad.
A partir de ese momento, el Castilla tuvo varias oportunidades de gol para sentenciar el partido, las cuáles no aprovechó y luego se acordó de ellas, especialmente en las botas de Campuzano que dispuso de un mano a mano que estrelló en los pies del portero y de otra jugada en la que no supo definir cuando lo tenía todo a favor, después fue Febas quien recibió un balón en el área y en vez de fusilar al portero prefirió pasar el balón a un Javi Muñoz a quien pilló de espaldas y no pudo rematar con claridad. Poco después, Campuzano fue sustituido por Christian Cedrés y el árbitro perdonó otra expulsión al Barakaldo cuando amonestó a un defensor por parar con la mano un contraataque que dejaba sólo a Cedrés ante el portero rival.
Tanta ocasión desperdiciada tuvo sus consecuencias y el Barakaldo apretó el marcador, cuando aprovechó un rechace que dejó muerto en el área Carlos Abad para poner el 2-1 en el marcador y poner al Castilla contra las cuerdas en lo que quedaba de partido, ni siquiera la entrada de Tena en lugar de Febas consiguió parar la presión del Barakaldo buscando un empate, que a punto estuvo de conseguir con un potente disparo desde fuera del área que sacó Carlos Abad con una impresionante palomita y ya en el descuento con un disparo que se estrelló en el poste cuando apenas quedaban segundos para finalizar el partido, por lo que esta vez tuvimos la suerte que nos faltó en la ida cuando nos empataron, clavando una falta en la escuadra en la última jugada.
Por lo tanto, hoy el Castilla ha sumado una importante y muy sufrida victoria ante un rival directo que le permite sumar 3 puntos más y empatar a puntos provisionalmente con el Fuenlabrada que va cuarto y que juega mañana ante el Albacete, que es líder de la categoría. Por lo que a falta de 7 jornadas, los chicos de Solari siguen en la pelea por el play-off de ascenso que se va a decidir en los últimos partidos en una lucha directa entre 3 o 4 equipos que se disputarán la última plaza de play-off.
