Un articulo de: @resurreccion_93
No soy una plañidera que se suba o baje del carro, es simplemente la tristeza que me produce ver que no. Que por más que me empeñe aquí no hay valientes, en el fútbol no hay tipos de armas tomar, de los de antaño, de los de siempre en nuestro club; aquel espíritu que les hacía transformarse ante las dificultades externas se ha fugado a la sección de baloncesto. Se puede caer derrotado cuando el rival es deportivamente superior, pero cuando son las circunstancias externas al fútbol las que te intimidan, es que no eres un valiente. No es cuestión de calidad, aquí hay jugadores técnicamente inmejorables, se podrían discutir 2 o 3 posiciones y algún estado de forma. Pero no se pierden las ligas año tras año por eso. La solución para esta plantilla, tan débil mentalmente, tan acomodada, tan falta de la concentración requerida para entrar a combatir en un campo de minas como todos los aficionados sabíamos que iba a ser Mestalla, no está en cambiar este u otro jugador o reforzar tal posición.
Cualquier aficionado medio al fútbol, no necesariamente del Madrid, sabía qué ambiente iba a encontrarse el equipo en uno de los mayores templos del antimadridismo que tanto abundan hoy por la geografía patria. Odio y bilis a toneladas han forjado ese campo hostil donde los haya; la memoria de Mijatovic y sobre todo de la brutal violación futbolística que sufrieron en Paris 2000 ante los ojos del mundo en una final de UCL, retuercen las vísceras de una afición ahogada en frustración con ganas de una revancha que nunca consumarán, por eso se conforman con la simple satisfacción de dañarnos o dificultarnos en la medida de sus ridículas y exiguas fuerzas en nuestro objetivo de alcanzar la liga y bien que lo están consiguiendo estas últimas temporadas; esa es su única alegría aunque el resto de la temporada lo pasen coqueteando con el descenso. Todos lo sabíamos, menos nuestros queridísimos jugadores que volvieron a salir, una vez mas y van mil, sin concentración y se vieron sorprendidos por el ímpetu y actitud de un contrario que nos odia ¿Qué esperaban? ¿Una alfombra roja? ¡Y que todavía haya quien defienda a esta pléyade de malcriados! ¡Que todavía nos quiten el carnet a los que cargamos desesperadamente contra estos infames burgueses!.
Si se pudiese transfundir un 10% de la sangre de Lllul, Reyes o Noccioni a esos apáticos jugadores de fútbol creo que ganaríamos esta liga a finales de Marzo. Si pudiésemos clonarlos para el fútbol la hubiésemos ganado en Enero. Anoche un tuit de @PedroBDonoso lo describía perfectamente: “Sobra antimadridismo en los rivales y falta madridismo en el @realmadrid”
Podemos devanarnos los sesos sobre si Isco o James, sobre si Benzema o Morata o traer otro 9, sobre si Cristiano es o no el crack del equipo, sobre si Modric no ha cogido la forma, lamentarnos por la lesión de Bale, rabiar por el pésimo momento de Keylor y Varane; es esteril, ahí no están las ligas que se vienen perdiendo sistemáticamente desde hace una década. Era el momento de sentenciar al muerto, de cerrar el ataúd y clavar unos clavos inamovibles a un difunto futbolístico que deambula grogui por los campos. Y sin embargo les hemos insuflado oxígeno, hemos mandado un mensaje claro de ayuda al SOS que desde Barcelona se emitió la semana pasada: “Tranquilos culerdos, somos una panda de cagones, aun quedan muchos campos donde nos encimarán, abuchearán, presionarán y volveremos a salir con falta de concentración, aun no estáis muertos, es solo un punto y estáis haciendo el peor fútbol que se os recuerda en años ¡Ánimo! Estamos con vosotros”.
En Barcelona este partido, sumado al esperado regalo arbitral de rigor para evitar su hundimiento, es oro molido, es insuflar confianza en una plantilla desmoralizada. Daban por liquidada liga y UCL, ahora volverán a pensar que al menos la liga es posible, el Madrid ya les hizo creer otras veces y al final lo consiguieron ¿Por qué no otra vez? Ellos, con todas las ayudas externas que queráis, son un equipo muy competitivo; el nuestro tiene una debilidad mental disfrazada de prepotencia que es la culpable de que en la competición de la regularidad no seamos un equipo fiable, ganador. Las ligas como dice hoy uno de los panfletos pseudomadridistas se nos hacen eternas. A nuestros jugadores no les gusta el esfuerzo, la actitud, la concentración, la dedicación, el compromiso continuado en el tiempo.
Se han acostumbrado a que el azar les sonría en momentos puntuales y han interiorizado una estúpida idea de semidioses tocados por el destino para ganar por la épica. Pueril creencia, puede que la flauta vuelva a sonar, el fútbol al final es un juego, pero yo prefiero el esfuerzo, la actitud, la garra, el compromiso, la determinación, el orgullo y conjurarse para ganar por encima de cualquier factor extradeportivo. En el equipo de fútbol a día de hoy todo eso es una quimera, pero los verdaderamente madridistas seguiremos soñando con que el espíritu del baloncesto decida tomar también los cuerpos de esos infantiles con mentalidad de cristal que juegan al balompié y que sea cuanto antes porque el Domingo en Villarreal volveremos a encontrar más de lo mismo, aun recuerdan a Guti llamándolos paletos y si bien contra la Roma cayeron estrepitosamente, contra el Madrid dejarán su vida para evitar que ganemos la liga. Avisados quedan los divos del Bernabéu, nosotros por si acaso deberíamos seguir buscando valientes
¡HALA MADRID… Y NADA MÁS!