Una previa de: @pepo2204
Inauguramos una nueva temporada futbolística de clubes en Europa con la disputa del primer torneo oficial UEFA: la SuperCopa de Europa que enfrenta en el Stadion Narodowy – Estadio Nacional – de Varsovia a la Atalanta de Bérgamo, campeón de la UEFA Europa League y al Real Madrid, campeón de la Copa de Europa. (Miércoles 21:00h.)
Tras un verano en el que hemos tenido Eurocopa y Juegos Olímpicos, saldados ambos con las brillantes victorias de la selección española, toca la vuelta a la competición de clubes con la SuperCopa de Europa.
Resulta ya tópico decir que este trofeo es uno de los títulos menores, que sólo se cuenta cuando se gana, que si enfrenta a un club grande con uno de menor entidad da más a perder a aquél en caso de derrota, y tantas y tantas verdades reveladas, que pareciera que el partido careciera de interés o que se tratara del típico partido entre roba higos y limpia alacenas de cualquier fiesta patronal de ésas que se celebran a cientos por toda la geografía patria en estos días, o cualquier trofeo veraniego venido a menos.
Y nada más lejos esta vez. Si ya de por sí un partido oficial en el que el Real Madrid disputa un título representa lo máximo en el fútbol europeo y mundial, esta temporada que hoy comienza de forma oficial en Varsovia tiene alicientes por sí sola para convertirse en una temporada histórica para la entidad merengue.
Imagen: Heraldo de Aragon
Para empezar será la primera vez que un club europeo opte a conquistar siete títulos oficiales en una misma temporada; la SuperCopa de Europa es el primero de una lista que engloba también por orden cronológico a Copa Intercontinental, SuperCopa de España, Copa del Rey, LaLiga, Copa de Europa y el nuevo Mundial de clubes que ha de disputarse en el verano de 2025 para dar por concluida una campaña maratoniana. Caen en saco roto las reclamaciones que todos los estamentos del mundo del fútbol hacen cada año exigiendo una racionalización del calendario, y el resultado no es sino más y más partidos hasta ver si se consigue exprimir aún un poco más la gallina de los huevos de oro. Parece además que la amenaza cada vez más real de la aparición en escena de la SuperLiga, debe tener a más de uno de los jerifaltes de UEFA y FIFA tomando pastillas para los nervios, habida cuenta de los cambios de formato de las competiciones que buscan, se entiende resultar más atractivas para evitar la competencia de un más que posible nuevo torneo que venga a poner orden en esto del latrocinio y expolio que llevan a cabo a cuenta de los clubes. No cabe sino así interpretar el cambio de formato de la Copa de Europa al formato “liguilla” buscando asegurar encuentros de nivel desde el principio. ¿Dónde habré oído esto yo antes?.
Otro aliciente para los Madridistas esta temporada será la puesta en escena de un equipo de ensueño al que llega el que es considerado por muchos el mejor jugador del mundo en la actualidad, el francés Kylian Mbappé. Un jugador que viene a sumarse a un equipo cuajado y ganador, actual Campeón de Europa y en el que el jugador francés será una pieza más para aportar y no la piedra angular del plantel, lo cual no puede sino hablar muy pero que muy bien del proyecto deportivo del Real Madrid.
Lejos quedaron los tiempos de los “tic tac”, las falsas expectativas y demás; Mbappé ya es un hecho y el dorsal 9 tendrá ocupante de renombre buscando llevar al Madrid a las más altas cotas durante su estancia entre nosotros. Bienvenido, Kylian.
Cómo os decía al principio, no faltan alicientes para que el partido de hoy sea el pistoletazo de salida de una temporada para soñar bonito y disfrutar.
Enfrente tendremos al campeón de la Europa League; un club modesto de la región de Bérgamo, en la Lombardía italiana, que alcanzó el segundo título de su Historia, primero a nivel internacional tras haber conquistado una Coppa de Italia en los años 60. Y lo hizo con un equipo que tras varios años de mostrar un fútbol más que vistoso, fue capaz de derrotar al todo vencedor Bayer Leverkusen de Xabi Alonso en la temporada en la que los alemanes rompieron todos los récords de imbatibilidad tras cincuenta y cuatro partidos sin conocer la derrota. Y no lo hicieron por estrecho margen, no; nada menos que tres goles endosaron los italianos a los teutones en un partido que puso definitivamente a la Atalanta en el mapa futbolístico europeo.
Imagen: atalanta.it
El gran artífice de este éxito es el técnico italiano Gian Piero Gasperini. Formado en las categorías inferiores de la Juventus, y tras pasar por varios clubes como Genoa, Parma o Inter, recaló en la Atalanta en 2016 y ha llevado al modesto club lombardo a ganar su primer entorchado internacional. El entrenador transalpino es un firme valedor del fútbol de ataque, tan contrapuesto al típico catenaccio italiano, que es lo que ha hecho reconocible a su Atalanta y catapultado a su equipo a vivir los mejores momentos de la Historia del club.
Cuenta con una plantilla de jugadores de más calidad que renombre internacional, que ejecutan a la perfección los planes de su técnico, que sin perder de vista la faceta defensiva – no en vano utiliza un sistema con cinco defensas – tiene en el ataque la mayor de sus armas.
Profundidad, velocidad y talento rematador son características de los jugadores del conjunto de Gasperini, que queda mermado para el partido frente al Real Madrid por la baja de su delantero Scamacca, internacional con los azzurri, y que deja al nigeriano Lookman con la responsabilidad de anotar los goles que puedan meter en apuros al campeón de Europa.
Además de Scamacca, Gasperini no puede contar con El Bilal Touré, Zaniolo y Tolói por lesión, mientras que Koopmeiners se encuentra apartado por el club al estar buscando salir esta misma temporada.
Imagen: atalanta.it
El Real Madrid por su parte afronta el duelo con la ilusión de disputar el primero de los siete títulos en juego que tendrá esta temporada. Un reto mayúsculo al alcance sólo de los elegidos, y al que el club merengue sea el primer club europeo que lo intente lograr por primera vez.
Las incorporaciones de Endrick y Mbappé han hecho que el ataque del Madrid sea la línea que más se haya visto reforzada en esta temporada, que será la primera de la que podemos denominar: “era post Kroos”. La baja del internacional alemán hará que los jóvenes talentos del mediocampo madridista tengan que dar un paso al frente; jugadores como Tchouaméni o Camavinga, llamados a dar grandes tardes de gloria en Chamartín, a los que comandará un Fede Valverde en plena madurez, y al que el bueno de Toni no ha cedido el dorsal por nada, que estos alemanes no dan puntada sin hilo.
Y al frente de todos un Luka Modrić que a sus treinta y ocho años ha renovado por una temporada más, en la que aportará su excelente fútbol y seguirá dotando al vestuario de un carácter ganador y los mejores valores posibles.
La defensa seguirá estando segura con la vuelta en plena forma de Militão, y el fabuloso estado de forma de Rüdiger; es cierto que la salida de Nacho y la lesión de Alaba parecían forzar a acudir al mercado donde Yoro era la pieza a cobrar, pero el dinero procedente de Manchester truncó el posible fichaje y a día de hoy, ante la escasez posible de centrales, Vallejo se haya convertido en el cuarto central de la plantilla.
Y si hablábamos de dinero, parece que vamos a seguir teniendo animación en forma de petrodólares provenientes de Arabia y Qatar; la más que astronómica cifra que parecen dispuestos a soltar por Vinicius Jr. desde el Golfo Pérsico puede hacer saltar la banca en un mundo del fútbol que con este tipo de cosas, cada vez más se aleja del deporte que debería ser para ser un juguete en manos de los jeques y magnates del petróleo, que gastan millones de dólares de los de verdad, no de los que pagan los presuntos inversores y nuevos proveedores de Laporta, para llevarse a los mejores jugadores del planeta a las lejanas tierras de Oriente Medio. Veremos en qué termina todo esto, pero queda bien claro que más pronto que tarde habrá que plantearse el futuro de este fútbol como lo conocemos, porque de seguir así, es cuestión de tiempo que los recursos ilimitados acaben dotando a las competiciones saudíes y cataríes de lo que actualmente les falta para poder luchar con las europeas: competitividad.
Imagen: @realmadrid
Volviendo a lo deportivo, a tenor de lo dicho por Ancelotti y de la forma de comportarse del entrenador italiano, lo previsible es que los jugadores que ganaron la decimoquinta sean los que peleen de inicio por la SuperCopa. Esto dejaría sin debutar a Mbappé, al menos en el once inicial del Real Madrid; sin embargo, la baja de Kroos deja un hueco que podría ser ocupado por Kylian. No parece tampoco probable ver a Ancelotti dejando en el banquillo a su mejor jugador sin tenerlo lesionado. No podrá jugar seguro Camavinga, que cayó ayer lesionado en la rodilla, aunque no parece que revista demasiada gravedad, pese a la aparatosidad de la lesión. Alaba es la otra baja del equipo merengue.
Dirigirá el partido el suizo Sandro Schärer, auxiliado desde el VAR por el alemán Bastian Dankert. Dirigirá noventa minutos porque no habrá prórroga en caso de empate y se iría directo a la tanda de penaltis. Para no perder las buenas costumbres sobre árbitros, os los analiza @cubelas13 en su previa arbitral.
Comienza en Varsovia la andadura de este Real Madrid que aspira a los siete títulos de la temporada. Primera temporada sin Kroos y primera de Mbappé. Hora de los jóvenes que maduran. Tiempo aún de especulaciones y fichajes. ¡Bendito fútbol de clubes! #HalaMadrid
Real Madrid C. de F. – Atalanta Bergamasca Calcio – SuperCopa de Europa – Estadio Nacional Varsovia – Miércoles 14.08.2024 21:00h.