Una crónica de: @elcarrildel2
El Real Madrid se ha impuesto (95-92) al Joventut, en el partido correspondiente a la Jornada 29 de la temporada regular de la Liga ACB, disputado en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid.
Se repitió el guión de kaunas. Asistencia de Llull para que Deck, en la esquina, anotase, en esta ocasión de tres. Fue el colofón a un partido en el que volvimos a mostrarnos erráticos en demasiados momentos, faltos de ideas, tirando de técnica individual como casi único recurso.
En este apartado brilló, un partido más, Mario Hezonja. De Mario habría que decir, parafraseando la película, que todos son contingentes menos él, que es necesario. Deberían aplicarse los rectores del baloncesto blanco, y cerrar su continuidad en el equipo.
Comenzó el partido con idas y venidas de ambos, sin excesivo sentido y sin la pausa necesaria. Alocén estaba a los mandos, ante la ausencia, un partido más, del Facu. Hoy tocó hacer internacional a Kraag, que anotó tres triples seguidos, lo nunca visto en este jugador. Musa anotaba por los nuestros. Minuto diez, 22-20.
Continuaría haciendo el columpio el marcador en el segundo cuarto. Poirier comenzó fallón, con dos errores solo bajo el aro verdinegro. Causeur perdía un balón. Don Fran Fermoso, a los mandos de la transmisión del partido, veía falta del francés, cuando claramente había sido al revés. Lucio Angulo secundaba al narrador, en lo que ya sería una constante todo el partido y lleva siéndolo toda la temporada y todas las temporadas. El día que Lucio Angulo, un tipo que jugó en el Madrid entre 1999 y 2003, ganó la liga 1999-2000 y hoy día juega con los veteranos, vea alguna acción a favor de los nuestros se para el partido y tiene que dar la vuelta a la cancha en medio de una atronadora ovación. Claro que también Amaya Valdemoro hizo el saque de honor en el Santiago Bernabéu un ya lejano septiembre de 2013 enfundada en una camiseta de baloncesto del Real Madrid. ¡Ver para creer!, que decía el clásico.
El caso es que los visitantes lograron ventaja en este segundo cuarto. Se marcharon la vestuario con un parcial de 15-25, para un marcador de 37-45.
A la vuelta de vestuarios, un parcial de 9-1, que llegaría a ser de 16-3 ponía el 53-48 en el marcador. Kraag anotaba su cuarto triple. Alocén le daba réplica. Tercer falta personal de Musa. Tavares perdía un balón, que permitía al Juventut retomar la delantera: 58-60. Alocén perdía otro balón. Dos más uno visitante. 58-63. Rodríguez por Alocén. Hezonja anotaría dos triples, el segundo de los cuales dejaba el marcador al minuto treinta en 68-65 (parcial de 31-20).
Quedaba un cuarto y no había pronóstico claro. Los madridistas, con la mosca detrás de la oreja tras los últimos traspiés del equipo. Llull anota un triple desde doce metros. Reclama falta, que Lucio Angulo no vio por ningún sitio. Sorpresón. Unos instantes después vería una en contra, y un triple claro como el agua clara lo cantó de dos. Me vino a la mente aquello de ¡Cuide su cristalino en Óptica San Gabino! Qué mayor soy. Nos pusimos nueve arriba tras otro triple de Hezonja, 88-79, a falta de 3,26. Parecía que íbamos a poder vivir tranquilos el final. Se quedó en apariencia. 91-90 a 54 segundos. ¡Qué bueno es Miret!, proclamaba don Lucio. Llull dos tiros libres. Adivinen ustedes a quién no le pareció falta…exacto, a don Lucio Angulo.
El caso es que el marcador era 92-92, con balón para el Madrid. Llull avanzó, se la pasó a Deck en una esquina para que el argentino anotara el triple que nos daba la victoria, 95-92, parcial de 27-27.
Destacados: Hezonja (25 de valoración, 20 puntos), Tavares (23-14), Deck (20-13), Musa (12-12), Poirier (10-2), Llull (9-13).
Tiros de uno 15 de 23 (66%), Tiros de dos 19 de 35 (55%), Tiros de tres 14 de 31 (46%), Asistencias 20-21, Pérdidas 8-8, Rebotes defensivos 25-21, Rebotes ofensivos 11-10, Recuperaciones 5-6, Tapones 4-1, Faltas personales 21-25.
Buenos días a todos. HALA MADRID.