CRÓNICA | Perfectamente olvidable: Real Madrid 1 – 0 Getafe

Una crónica de: @MiedoEscenico2

Me van a perdonar que hoy haga una crónica al compás de lo que fue el partido que esta noche han disputado Real Madrid y Getafe. Con poca historia, cortita y sin fuegos artificiales. Courtois; Lucas, Militao, Nacho, Mendy; Tchouameni, Camavinga, Ceballos; Valverde, Asensio y Hazard. Con ese once ha salido el Madrid, y casi le ha costado la lapidación a Ancelotti. La verdad es que, de la primera parte, poco puedo contarles: la vi entera, pero no me acuerdo de absolutamente nada destacable. No hubo remates a puerta del Getafe, sólo uno del Madrid, inocente, y todo el conjunto blanco fue una especie de regimiento de funcionarios en modo de ensayo y –pertinaz- error. Algo aburrido, y perfectamente olvidable, la verdad.

Tras el descanso, con la incorporación de Kroos por Mendy, el equipo pareció animarse algo, con Hazard volviendo a parecer un jugador de fútbol, Asensio más activo, y Tchouameni más activo de lo que venía acostumbrándonos. A la hora de partido, Ancelotti introdujo en el campo a Modrić, Vinicius y Mariano, en las plazas de Ceballos, Valverde y Hazard, y los madridistas empezaron a generar más problemas al equipo azulón.

Imagen: realmadrid.com

Faltando veinte minutos, una jugada creada en la base por Kroos y Modrić acabó llegando a Lucas Vázquez en banda derecha, que se la cedió a Marco Asensio, y el mallorquín alcanzó esa especie de zona cero, de círculo dibujado en el césped, donde su percutor se lubrica, y ese cañón que tiene en la pierna izquierda dispara obuses de alta precisión. Esta vez, el obús no alcanzó la escuadra contraria, sino el tramo más cercano de la portería, y David Soria solamente pudo ver cómo el 1-0 subía al marcador, sin poder hacer nada por detener el balón.

El Madrid lo siguió intentando, y llegó a marcar otro gol en un contraataque conducido por Mariano y finalizado con precisión por Vinicius Júnior, pero fue anulado por fuera de juego, probablemente porque el delantero de la huevera en la cabeza tardó demasiado en dar el pase al brasileño. De ahí al final, lo más destacable fue una fea entrada de Juan Iglesias a Camavinga, que acabó pidiendo el cambio y dejó con el alma pendiente de un hilo a la parroquia blanca. También sirvió para que se desatara la histeria en las redes sociales poniendo a parir a Ancelotti por hacerle jugar este partido, cuando la gran mayoría de los que hoy le critican por eso, le criticaban ayer por no ponerle en todos los partidos. Cosas de la vida.

Imagen: realmadrid.com

El caso es que, a la espera de lo que pase con el francés, las buenas noticias son que el Madrid volvió a ganar en Liga, y que llega preparado, tras una victoria, al partido del próximo miércoles en que tendrá que pelear por un billete a la final de la Champions League. Pase lo que pase, cueste lo que cueste, esperamos que el partido, en vez de una tortura prescindible como la de hoy, se convierta en otro más de esos recuerdos imborrables que jalonan sus últimos dos años en Europa. Prometemos contárselo, si es así.