El OjO Al Blanco del Baloncesto Sevilla 90 – 97 Real Madrid: Nadie regala nada

Una cronica de: @Javirodespi – planetacb

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Lo que en principio podía parecer un partido más asequible, por aquello de que el Baloncesto Sevilla no se jugaba nada más que la honrilla, estuvo a punto de convertirse en un tercer puesto para un conjunto blanco que tuvo que sacar todo su arsenal para llevarse la victoria de San Pablo, normal que hayamos titulado a nuestro OjO Al Blanco, “nadie regala nada” porque eso fue lo que pasó por tierras hispalenses.

Porzingis, “This is my hero”SEV-RMB (17).jpg

Que poco queda de aquel chaval espigado, delgadito y que hacía unos mates que parecía que se iba a romper, Kristaps Porzingis apareció por la cancha de San Pablo en olor de multitud, con la gente aplaudiéndole a rabiar, convertido en una estrella de la NBA con sus Knicks y, lo que es mejor, con una sensación de que su progresión es imparable, aunque eso sí, con el doble de cuerpo del que jugaba con Sevilla, éste fue sin duda, el momento emocionante del inicio.

Toda la artillería

Ya podía tener Gustavo Ayón la mano como si fuera la de Robocop o que Sergio Rodríguez hubiera tenido problemillas en el talón durante la semana, Laso sacó a su cinco titular de gala con ellos dos incluidos y ante un equipo que estaba muy lejos de ofrecer una imagen timorata o de agazaparse sino de todo lo contrario, el partido comenzó a buen ritmo, con ambos equipos anotando con fluidez y con ganas de agradar al respetable.

Tanta calma lleva a la precipitación

No debe ser tan bueno eso de jugar con tanta calma porque eso puede llevarte a la precipitación ¿parece una incongruencia, verdad? Pues así fue el segundo cuarto, con equipos que se sucedían en errores, balones perdidos en pases al hueco, pases cortados y tiros errados e inclusive, hasta algún airball desde el tiro libre (que se lo digan a Lima), pero menos mal que, como quiera que las acciones se desarrollaban a ritmo desenfrenado con posesiones cortas, eso no hacía que hubiera merma de puntos en el marcador, y nos íbamos al descanso con 44-45 con un hombre que destacaba sobre todos pero que, ni por asomo, iba a ser el que dio un recital en el tercer cuarto, hablamos de un Gustavo Ayón que se fue con 9 puntos y 9 rebotes con 15 de valoración, para acabar el tercer cuarto con 33 de valoración, 21 puntos y 14 rebotes, echen cuentas.

SEV-RMB (24).jpgErase una vez un checo y un mexicano

El tercer cuarto que nos dejó el checo Balvin y el mexicano Ayón fue para registrarlo en las hemerotecas, pleno de lucha por conseguir un centímetro de terreno para coger la posición, unas veces encaraba el aro Ayón y otras Balvin con mates estratosféricos ambos, inclusive se permitían el lujo de “posterizarse” uno al otro sin ningún rubor, pero mientras eso pasaba, los visitantes de la línea de fuera bombardeaban a su gusto con Hakanson tomando el mando de los locales y con Llull haciendo lo propio con los visitantes, que nos dejaba todo para el último cuarto.

El desenlace en tres jugadas idénticas

El Sevilla castigaba los fallos del Madrid y, cuando un partido se mueve en distancias tan cortas, pues en cuanto tienes tres o cuatro errores consecutivos, el rival los aprovecha como así hizo Scott Bamforth con un triple que ponía al conjunto local con 81-80 y los fantasmas del tercer puesto amenazando (Valencia Basket ganaba cómodamente al Morabanc Andorra) pero solo hicieron falta tres jugadas, acabadas de la misma manera, para acabar con el sueño sevillano de dar a su afición una victoria ante el Real Madrid, las tres llevaron la asistencia de Sergio Rodríguez, penetrando a canasta y soltando el balón justo a la esquina, en dos ocasiones a la izquierda para triples de Carroll y la última a la derecha para Trey Thompkins, fue la forma de acabar un partido que se podía haber complicado mucho.

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Los olvidados

Nos gusta siempre acabar con los olvidados de Laso, aparte de Ndour y de Rivers, tuvimos a Taylor que no salió y a Lima que jugó apenas tres minutos, pero en esta ocasión, lo sentimos especialmente por Willy Hernangómez, alguien al que le hacía mucha ilusión jugar hoy y se quedó sin el premio, son las cosas del deporte profesional.

Aquí lo dejamos hoy, volvemos ya para los playoffs en que nos espera un apasionante choque contra UCAM Murcia en dónde el fallo no está permitido, a tres partidos todo puede pasar y habrá que estar muy atento porque esto ya se pone serio, pero ya saben, nunca dejen de sonreír.