EL REPASO | Diciembre

Un articulo de: @MiedoEscenico2

Llegando de un mes casi perfecto, como había sido el de noviembre, el Real Madrid se plantaba en el último mes de 2021 con buena pinta, aunque con retos difíciles como los enfrentamientos frente a Inter o Atlético de Madrid. Y, la verdad, nos dejó sorprendidos (para bien). Un solo gol encajado en seis encuentros, y algunos tramos de juego verdaderamente brillante, con la sala de máquinas, nuestros Casemiro, Kroos y Modric, azote del madridismo cansino, haciendo doblar la rodilla a la Real Sociedad, al Inter de Milán y al Atlético de Madrid, en apenas ocho días. Pero empezó el mes con una victoria frente al Athletic de Bilbao en el Bernabéu para recuperar aquel partido aplazado de mediados de octubre. Empezó el partido con dominio y oportunidades madridistas, y el equipo blanco se puso por delante con un gol de Benzema tras la asistencia más parecida a una pifia que ha dado nuestro príncipe croata en su vida. El 1-0 le valió al Madrid para llevarse los tres puntos, con algunas intervenciones meritorias, una vez más, de Thibaut Courtois.

La semana grande para el equipo blanco empezaba visitando Anoeta que, en ese momento, era el principal perseguidor del Madrid en la clasificación. Y lo cierto es que hicieron sentirse orgullosa a la afición, dando un auténtico repaso en el segundo tiempo al cuadro donostiarra, que lo intentó con más corazón que cabeza, y se acabó llevando dos goles de Vinicius y Jovic en el primer cuarto de hora de la segunda parte, especialmente inspirado el serbio dando el primero y marcando el segundo con un espectacular remate en plancha jugándose el bigote. Benzema le había dejado el sitio por lesión, al cuarto de hora de partido, y Jovic lo aprovechó muy bien. El calendario no daba tregua, y el martes 7 nos plantábamos en el Bernabéu para ver al equipo jugar su último partido de la fase de grupos de la UEFA Champions League, peleando por el primer puesto del grupo frente al Inter de Milán. Y, una vez más, el equipo blanco manejó el partido con solidez y soltura, aunque en la primera parte pasó algún apuro. A pesar de que el Inter montó un sistema defensivo prácticamente impenetrable, los blancos lo dinamitaron con torpedos de larga distancia. Primero, un zambombazo sencillamente genial, salido de la zurda de Toni Kroos al cuarto de hora de partido, y después, estando el Inter ya con diez, un fantástico misil de Asensio a la escuadra a falta de diez minutos para el final. Golazos para celebrar el pase a octavos como primeros.

El domingo siguiente se presentaba el Atlético de Madrid en el Santiago Bernabéu, eufórico tras vencer al Oporto en Portugal y conseguir también su pase a los octavos de la competición europea. Ya saben, hay formas y formas de clasificarse, y a lo largo de este partido, el Real Madrid demostró que esto era así con hechos. Nuestro centro del campo, esa CMK caduca y cansada, sometió al centro del campo atlético a una auténtica tortura, y dinamizó al equipo de tal manera que los de Simeone no sabían por dónde les llegaba cada asalto. Benzema, que llegaba tocado al encuentro, habiéndose perdido el partido frente al Inter, marcó un golazo de volea a pase de un Vinicius diabólico, que también dio el segundo, ya en la segunda parte, a Marco Asensio. Courtois volvió a mostrarse como un muro impenetrable, y el equipo madridista cabalgaba ya, de manera imparable, hacia el título de Liga.

Como se nos va la pinza mucho con las expectativas, a veces, el miércoles siguiente apareció el Cádiz por el Bernabéu para bajarnos a la Tierra de nuevo. Montó un sistema defensivo numantino, cortó el juego todo lo que pudo, perdió el tiempo todo lo que quiso, y finalmente no permitió que el Madrid marcara un solo gol. También es verdad que en el vestuario del Madrid había entrado, como un mazazo, la nueva variante del COVID, y llegó al partido con las bajas por este motivo de Modrić, Asensio, Rodrygo, Bale, Marcelo y Lunin, aparte de la de Carvajal por problemas musculares. Tuvieron su opción jugadores menos habituales, como Hazard, Lucas Vázquez o Valverde, pero no fueron capaces de echar abajo la barricada amarilla y el partido acabó con 0-0. El último partido del año lo jugó el Real Madrid en Bilbao, para adelantar el que le tocaría jugar en la jornada 21, coincidente con la Supercopa de España. Y llegó con las bajas arriba mencionadas, a las que se añadió la de David Alaba, también por COVID, y la de Casemiro, por acumulación de amonestaciones. Y salió el Madrid dispuesto a nadar pronto y luego guardar la ropa, y en el minuto 7, emblemático para el madridismo, ya estaba el marcador 0-2 gracias a un doblete de Benzema, con un primer gol impresionante en calidad y ejecución. El 1-2 del Athletic llegó en el minuto 10, único gol encajado por el Real Madrid en todo el mes de diciembre, y el resultado se mantuvo así hasta el final, con opciones de marcar más goles para los dos equipos, pero sin que cuajaran en el marcador.

¿Qué decir del mes de diciembre del Real Madrid? Entró a este mes con cuatro puntos de ventaja sobre Real Sociedad y Atlético de Madrid, y cinco sobre el Sevilla, y lo acaba, aunque con un partido más, con ocho de ventaja sobre los sevillistas, y diecisiete sobre rojiblancos y donostiarras. El equipo ha mostrado una solidez incuestionable, y no sólo porque le hayan marcado solamente un gol; el asunto es que, a lo largo de estos seis partidos, solamente ha permitido 13 remates a puerta, dejando sin hacer uno solo a Real Sociedad y Cádiz. Con ello, ha consolidado la sensación que ya dejaba el mes anterior, de un estilo de juego en ocasiones poco brillante, pero efectivo, y basado en el esfuerzo y el compromiso de todos los jugadores, algo que Ancelotti se empeña en repetir constantemente.

La verdad es que es un placer que, en circunstancias como éstas, sea complicado otorgar solamente a uno el título de jugador del mes. Pero, para esta ocasión, creo que el desempeño de uno de los futbolistas del Real Madrid en estos últimos partidos le hace acreedor de este reconocimiento, y es que estamos viendo a Eder Militao crecer y crecer a cada partido, firme, imperial, poderoso y resolutivo. Parece haber abandonado esos apagones puntuales que tenía, y estar absolutamente decidido a hacerse un hueco en el once inicial de este equipo, y mantenerlo durante el tiempo que haga falta. Esa imagen de jefe de pandilleros, de señor del crimen, no puede hacernos olvidar que cumplirá 24 años el mes que viene, y que está evolucionando a pasos agigantados hacia la condición de jugador de élite, acompañado y ayudado por la tranquilidad y el oficio de David Alaba, su cómplice en el centro de la defensa madridista.

Respecto a la bofetada del mes de diciembre, es inevitable que se la lleven, repitiendo, Ceferino y la UEFA, por la vergonzosa chapuza que se perpetró en el sorteo de octavos de final de la Champions League. Es difícil ser más torpe o ser más tramposo y, a estas horas, no sabemos con qué opción quedarnos. Para los madridistas, que haya una piara de incompetentes a cargo de la competición más grande del mundo, que don Santiago Bernabéu promovió en su origen, y que el Real Madrid ha dignificado intemporalmente, es probablemente el mejor motivo para buscar otra alternativa que supere en grandeza a este triste desmán en que la han convertido los intereses económicos de los jeques y la incompetencia administrativa y deportiva de Ceferino.

Acaba el 2021 (al fin), empieza enero, sigue la Liga, donde esperamos que se mantenga o se amplíe la ventaja, y llega la Supercopa, y la revancha de la Copa del Rey contra el Alcoyano… Un mes apasionante. A finales de la cuesta, volveremos para echar un ojo al mes de nuestro equipo, y a la sala de trofeos, por si hubiera aumentado… Ya saben, no podemos resistirnos… Feliz año nuevo a todas las buenas personas que siguen El Diario de Mou, y a las que no lo siguen, también. El 2022 es el año en que pueden empezar a seguir esta santa web que tiene por pecado su madridismo, aunque a nosotros nos parece una virtud, la verdad…

PD.: Me comentan en la redacción que no he mencionado al Barcelona en este Repaso… Perdonen, pero ¿Quién es el Barcelona…?