Una cronica de: @Javirodespi – planetacb.com
Si tuviéramos que buscar una definición de “víctima propiciatoria” y poner un ejemplo, nos valdría colocar una foto de la plantilla del Baloncesto Sevilla tal día como hoy, en que ha resultado ser un perfecto convidado de piedra para un partido de trámite puro y duro en que uno sabía que ganar y otro venía a perder, así que vayamos, sin más preámbulo, a nuestro OjO Al Blanco, el de una víctima que fue devorada.
De los chavales en la cancha a un Willy titular
La fiesta de la tarde empezó con el ofrecimiento de la copa conseguida por el equipo junior en el prestigioso Torneo de L’Hospitalet a las 9.105 almas que poblaban hoy el Barclaycard y tuvo su continuidad en ver a Willy titular tras estar desaparecido en los últimos encuentros, sin embargo, su actuación tuvo dos partes bien diferenciadas, en la primera parecía un jugador sin confianza y falto de ritmo, permitiendo a Balvin creerse que era un All Star de la NBA tras destrozar el aro blanco con continuos mates tras generarse el espacio con el pick & roll e irse al descanso con nada menos que 14 puntos y 17 de valoración. Ya en la segunda mitad fue otra cosa, ahí vemos al Willy que nos gusta, con agresividad al aro, dispuesto a defender igual a un exterior o un exterior, tirando a canasta (y anotando) gracias a la maestría en el pase del Chacho y, por fin, recuperando sensaciones, suyos fueron los 10 puntos y 5 rebotes para un 17 de valoración.
Un KC. Rivers con traje de Steph Curry
Menudo partidito que se ha jugado el bueno de Steph, digoooo de KC. Rivers, no se le podía dejar al tío ni un metro suelto, si le decimos que a los 17 puntos conseguidos por los blancos, 11 los había metido el americano, se pueden ir haciendo a la idea, pero lo mejor de todo, es que esa irregularidad del año pasado, que parecía que su trabajo era coger rebotes y, de vez en cuando, tener una buena racha, ha pasado en esta temporada a ser mucho más constante durante todo el partido y con mucha más fiabilidad en el tiro siendo hoy el mejor del conjunto de Laso con sus 21 puntos y su 29 de valoración.
El Baloncesto Sevilla no duró ni un cuarto
El partido se resume en dos marcadores, primer cuarto: 30-16, segundo cuarto: 33-20, díganme a ustedes qué les puedo contar ante semejante castigo al equipo sevillano, en donde solo podríamos coger algún momento de buen juego visitante dedicándose a mover el balón con criterio hasta encontrar una buena situación de tiro, o la excelente aplicación del bloqueo y continuación que trajo algún problema a los jugadores blancos, pero completamente insuficientes ante el bombardeo de los locales que sacaron a relucir su arma más temida: el contraataque, que se sucedía una y otra vez en cuanto había ocasión de un robo, rebote o similar.
Los huevos de Luka Doncic
Vaya epígrafe que se me ha ocurrido, pero no se me ocurría otra cosa para hacer dos lecturas del jugador esloveno, por el lado físico, esa parte noble fue sacudida sin piedad en la lucha por un balón y nos dejó al pobre Luka tirado de dolor en el suelo y con Laso preguntando ¿qué tal estás? a lo que él respondía: “los huevos”, pero tampoco queremos olvidar la parte metafísica con el espíritu del chaval tras ver cómo le robaba un balón Alfonso Sánchez y, en vez de ver cómo le habían quitado la cartera contemplando impasible la entrada a canasta, pegó un sprint de lujo para poner un soberano tapón al jugador sevillano que hizo levantar al público asistente.
Un actuación coral de casi todos
Como dijimos, el partido fue una fiesta para casi todo el mundo, con puntos para todos pero no así de valoración positiva, la excepción que confirma la regla tiene el nombre de Trey Thompkins, cogiendo el puesto de Gustavo Ayón y que, desde luego, no supo aprovechar la oportunidad, 3 puntos anotados, 4 faltas cometidas y un -4 de valoración, actuación pobrísima y que tampoco tuvo respuesta en otros apartados del juego como es intensidad o aspecto defensivo porque, como hemos dicho, los interiores sevillanos estuvieron mucho más a gusto que los exteriores.
Así terminamos por hoy, la semana que viene toca en casa Zalgiris y viajar a la cercana Fuenlabrada, eso será el viernes y el domingo, mientras tanto, veremos qué va deparándonos la semana, que igual viene con algún fichaje esperado.