Por: @Eselsdistel
Más que por arte de Birlibirloque
resurgió el Real Madrid de su Hades,
combinando promesas y deidades
para conformar un sólido bloque.
Planteó el entrenador bien el choque
distribuyendo nuestras propiedades
según exigieron ambas mitades:
primero el músculo, luego el estoque.
Lo que iba a ser nuestra ejecución
acabó volviéndose un repaso
que aplacó los humos de la afición,
mas no caigamos en el error craso
de creernos ya el nuevo campeón,
pues el botín de hoy es aún escaso.