CRÓNICA | EL OJO AL BLANCO | Los rusos se quedaron fríos: Real Madrid 82 – 69 CSKA Moscú

Una crónica de: @Javirodespi planetacb

No fue un partido que pasará a los anales por su espectacularidad, propio de una segunda jornada de Euroliga y que servirá para ir afinando a ambos equipos y donde la peor noticia fueron las lesiones de Kuzmic y Randolph. No obstante, el Madrid puso la primera piedra para imponer más respeto con un marcador de 82-69.

Sin Santi ni Dino

La recuperación de Rudy Fernández hizo que Laso se decantara por los dos recién llegados como descartes a la ausencia continuada de Trey Thompkins que sigue en USA, así que fueron Santiago Yusta y Dino Radoncic los que tuvieron que ver el partido en una esquina del banquillo blanco.

La llegada del Chacho

Aunque no le vimos calentar hasta que salió con todo el grupo, sin duda para evitar cualquier inconveniencia, buena o mala, Sergio Rodríguez fue ovacionado con mucha gente puesta en pie y algún tímido silbido que fue acallado por la mayoría, igual pasó con Othello Hunter que también se llevó los aplausos del respetable aunque en menor medida, como también es lógico. Otra cosa es con el balón en juego que el respetable ya se olvidó de viejas cosas y pitó al Chacho con un poco más de intensidad que al resto.

Sacafaltas Felipe

Suele ser habitual que en partidos entre mercancías como son Real Madrid y CSKA, el primer cuarto sirva un poco para investigarse y ver quién impone el ritmo del partido y lo cierto es que el guión se mantuvo en esas circunstancias, poco espacio para la improvisación, ataques pausados, bastantes fallos en el tiro, pérdidas absurdas y solo una nota discordante, Felipe Reyes se convirtió en un sacafaltas en los seis primeros minutos del juego, justo el tiempo que estuvo en la pista, así que no se sorprendan con este marcador al final del primer cuarto con un 20-15 y que podría haber sido mucho peor si no se hubieran animado un poco en el último minuto como así hizo Campazzo.

Todo ensombrecido por Kuzmic

Podríamos estar contando cualquier cosa del partido como fueron los buenos momentos de Randle, que a pesar del taponazo que le puso Hunter, sigue intentando adaptarse rápidamente y anotó cinco puntos mientras se encargaba de la defensa de Sergio Rodríguez, esto con menos éxito ya que el canario se convirtió en el máximo anotador de los rusos, también de los buenos minutos que aportó Rudy Fernández en defensa y, en general, de la buena defensa blanca que convirtió al CSKA en un muñeco a placer de los blancos para irse al descanso con un claro 45-33, véase el ejemplo.

Sin embargo, todo quedó ensombrecido por la lesión de Kuzmic, ese movimiento en la rodilla no pudo por menos que recordarnos lo de Llull y esa imagen retirándose en silla de ruedas no fue nada agradable para los que estaban en el Palacio o viéndolo por televisión, así que esperamos noticias para saber qué puede ocurrir con el jugador serbio, así fue el momento de la lesión.

El momento Clyburn

El Real Madrid se dejó toda la euforia del segundo cuarto en el vestuario y fue aprovechado por un inspirado Clyburn que se convirtió en una auténtica pesadilla para toda la defensa blanca y sirviendo de revulsivo para un CSKA  que se permitía dejar a Chacho y De Colo durante casi todo el tercer cuarto sin pisar pista y alojándose en una defensa zonal 3-2 que dificultó muchísimo los ataques blancos, si a ello le sumamos alguna decisión arbitral comprometida y  la salida del hombro de Randolph que le supuso otro jugador en el dique seco, el marcador se estrechaba hasta un preocupante 56-53.

Momento Campazzo

Pocos podíamos esperar que el último cuarto pudiera ser tan explosivo vistos los tres anteriores, principalmente porque Facundo cogió el traje de Supercampazzo en el inicio y fue capaz de incrementar el ritmo que no habíamos visto antes y que a los moscovitas le fue muy difícil de detener, todo ello unido al buen hacer de Rudy Fernández en defensa y un papel de actor secundario convertido a principal como fue el de Jonas Maciulis que de estar en el último rincón del banquillo, hizo un dignísimo papel, permitió al Real Madrid llevarse una victoria ante las 11.077 almas que poblaban el WiZink Center a pesar de que CSKA no se rindió hasta el último momento, pero insuficiente cayendo por un marcador de 82-69.

Así terminamos hoy, nuestra próxima cita será el domingo 22 a las 18h. para un enfrentamiento contra otro equipo de Euroliga, en este caso el Unicaja Málaga, así que, mientras eso llega, sean felices y sigan sonriendo.