El editorial metisaca

Un articulo de: @ErZuru2000

Siempre he pensado que Fredi Ouija hubiera vendido su alma al diablo por ser una especie de Butano refinado. No puede ser, claro, porque el Butano se hizo multimillonario, poderoso e influyente insultando a gente y Fredi no ha venido a este mundo a llamar abrazafarolas a nadie. El Butano puso de moda un desgraciado estilo basado en el matonismo macarrónico y se aprovechó de la escasa oferta mediática. Demasiado ordinario y soez. Fredi nunca se arremangará hasta esos niveles. Le falta coraje y determinación. Y le sobra engreimiento cultureta. Utiliza sus editoriales para lanzar sus pellizquitos de monja, mientras sus ventas siguen cayendo, tal vez con la idea de derrocar a Tal o Pascual…y mejor aún, si ese Tal o Pascual, se apellida Pérez. Fredi va atizando editorialazos tras editorialazos, pensando, tal vez, que hasta la volatilidad de la prima de riesgo se verá afectada por sus geniales y corrosivos editoriales. Su engreimiento, rencor y ansia de venganza a veces le llevan demasiado lejos. Finalmente, pasa lo que pasa.

El día 1 de julio del corriente, Fredi Ouija dejó una cagarruta histórica para los anales del periodismo modelno. Ese día Fredi se puso melosón y su dizque periódico de papel publicó su editorial glosando la perfecta relación, con intercambio de fluidos corporales, entre El Marqués y La Leyenda. Fredi había visto tema por dónde meter mano y cizaña. Quiso poner de ejemplo, urbi et orbi, la magnífica forma de hacer las cosas de El Marqués y la magnífica forma de La Leyenda para aceptar su “de culo, cuesta abajo y sin frenos”. Fredi nos vino a decir que así es como se hacían las cosas… y no como otros. Estos dos peculiares personajes le venían al pelo a Fredi que, en realidad, lo que quería era atizar un editorialazo de los suyos a quién todos sabemos pero sin nombrarle. Pero Fredi olvidó lo fundamental: investigar y asegurarse de que lo que iba a opinar en su editorial tenía fundamento. Craso error, no lo hizo y se encontró con dos rencorosos en su salsa. No fue la única falta de profesionalidad en la que incurrió Fredi.

El editorial que publicó el As de la Ouija, el 1 de julio, fue perpetrado por Fredi la noche del 30 de junio. El As de la Ouija colgó el editorial esa misma noche en su versión digital. Casi al unísono, a eso de las doce, Peperramón, ex de Fredi, entrevistaba en la emisora amiga al Marqués, teniendo la nefasta ocurrencia de preguntarle por La Leyenda. Los hechos son conocidos por todos ustedes; el rencoroso aristócrata atizó a la rencorosa Leyenda con fruición, alegría, premeditación, nocturnidad, entusiasmo y delectación, dejando con el culo al aire a nuestro Fredi, que nos había contado una historia de vino y rosas.  Pero Fredi, sostenella y no enmendalla, no se enteró o no le enteraron. Así pues, mientras El Marqués destripaba al yerno de España y nos decía que no se mensajeaba con él (chincharrabiña), Fredi nos mantenía lo contrario. La realidad por un lado y Fred por otro.

¿Qué estaría haciendo Fred, a esas horas, mientras rajaba El Marqués, para no enterarse?  Es un misterio. Es seguro que no estaba escuchando el programa de deportes de la emisora  de su grupo empresarial. En alguien que tanto exige a todo el mundo, no parece que sea muy profesional. Puede que estuviera durmiendo, ya tiene una edad. ¿Puede que estuviera por ahí dándose un bureo? ¿Tal vez estuviese cenando en algún lujoso restaurante? ¿Regaría el solomillo con algún Ribera del Duero? ¿Celebraría su nuevo editorial con alguna bebida espirituosa con aroma a madera vieja en la sobremesa? Nunca lo sabremos. Bien comido, bien bebido y bien escribido, puede que se fuera a dormir ya cerca del alba. Me lo imagino desparramado sobre su cama, durmiendo lo que su conciencia le dejase. En decúbito supino, boca abierta de par en par, ronquido va, ronquido viene, calzoncillos de lunares, camiseta de tirantes arremetida por entre los calzoncillos, barriga descolgada a mitades iguales a ambos lados de su ovoide figura y su lustrosa papada impregnada de gotitas de sudor. Fredi está en el Nirvana y feliz como una perdiz. It’s been a hard day’s night.

Estos debieron ser los hechos: Fredi missing, El Marqués pregonando y el editorial colgado en internet y dispuesto a ser impreso. Pero, ¿Y el resto del personal de la Prisa? ¿Nadie de ese grupo lee los editoriales de Fredi, al momento de ser colgados, y escucha los programas de Peperramón? ¿Manolete? ¿Roncero Güijero? ¿Carmen? ¿El Frijolito? ¿Pericopá? ¿El Maroto? ¿Nadie? ¡Pero qué mierda de organización es esa! ¡Pero qué profesionales de pacotilla! ¿Será porque creen que ejercer el periodismo consiste en ir a las tertulias de cotorras del Estudio Estadio, del Chiringuito y bazofias diversas? Después, mucho criticar que si no hay director deportivo, que si la cantera, que si…nininini… y ya ven ustedes.

Desalentador, sí, pues puede ser peor. Imagínense que sí, que alguno de estos (u otros conocidos, allegados, satélites o anexos) hubieran leído y escuchado ambos documentos, entonces ¿Por qué no dieron la voz de alerta a Fredi? Me caben dos respuestas razonables: una, que Fred estaba ilocalizable para todos ellos, por los motivos que fueran (confesables o inconfesables); la otra es que Alfred estaba localizable, pero a ellos no les dio la gana. ¿Tal vez por miedo a sacar a Fredi de su Nirvana? ¿Tal vez para dejar a Fred en ridículo?, en tal caso ¿Cómo consiente Fredi tanta deslealtad? ¿Tendrá algo que ver en todo esto el enchufazo del sobrino de Alfred? Dudas y más dudas. El caso es que el editorial salió impreso en papel y en la versión digital estuvo colgado hasta que, a la mañana siguiente, Fredi se lo ventiló y colgó otro.

Cuesta muy poco imaginarse el enfado de Fredi al momento de enterarse del derrape de su editorial. Alfred visualiza a Florentino descojonándose en la sede ACS y eso es algo que no puede soportar. Entra en la sede del As de la Ouija como un elefantito en una cacharrería, soltando por su boca lo que no está escrito y, hasta puede que, con un cargado aliento flamígero que ya quisieran para sí los dragones de Daenerys de la Tormenta, la Primera de su Nombre, Madre de Dragones y Rompedora de Cadenas, etc. Me imagino a Daenerys, látigo en ristre, a horcajadas encima de… quita, quita, ¡qué asco!… estoy desvariando. Volvamos al tema tratado.

Seguramente Fredi convocó reunión de urgencia con sus cerebros grises. Esos que he mencionado un poco más arriba. Supongo que repartiría broncas.  De esa reunión de cerebros marrones debió salir la genial idea. Y así debió ser, queridos/as amigos/as, como Alfred inventó el editorial metisaca. Meto la pata con uno, la saco con otro, realidad al margen. Pero no acabó aquí la maquiavélica genialidad de Fredi, no. Quedaba darle contenido al nuevo editorial. Había que hacerlo de tal manera que fuera otro el que pareciera el culpable del desparrame. Nueva genialidad: pío, pío que yo no he sido y, ¡toma ya!, le cayó al Marqués, que pasó a ser el culpable exclusivo de todo, de las tropelías barriobajeras de La Leyenda, de la eliminación de La Colorá y de la ineptitud y falta de profesionalidad de Alfred. A fin de cuentas, debió pensar Alfred, si el Marqués me ha dejado con el culo al aire, que lo pague él. Justo y necesario. El editorial de vino y rosas se transformó en otro de aceite de ricino y cardos borriqueros contra el aristócrata del pueblo. El Marqués pasó a ser de nuevo Vicentón y, si he de serles sincero, no puedo decir que me diera pena. Vicentón, tantas veces utilizado –consentidamente- para atizar a otro, ahora era utilizado en beneficio propio.  Y la indignidad, vileza, cobardía y miseria se hicieron editorial.

¿Alfred Ouija habrá aprendido algo de esta historia de ineficacias y (puede que) deslealtades? Lamento ser pesimista. Si ha aprendido algo, su rencor le impide llevarlo a la práctica. Fredi, permítaseme la metáfora, ha seguido hozando como gorrino en charco de mierda cada vez que él ha entendido que la ocasión se lo permitía. El expediente del editorial metisaca en cualquier otro individuo hubiera recomendado prudencia, dedicación y más profesionalidad; no es el caso contemplado aquí, y así, mientras la realidad discurre por un camino, Alfred nos ha venido contando lo que le ha salido de los cojones. De momento, calla cuando el devenir de los acontecimientos se empeña en joderle. Pero es cuestión de tiempo que los hechos le pillen entre la espada y la pared y nos vuelva a ilustrar con otro miserable editorial metisaca.

Puso de vuelta y media a Zidane y a Florentino por un mal primer partido de pretemporada. El equipo fue mejorando notablemente. Silencio. El Atleti perdió contra un equipo australiano. Al Barça, el Liverpool, pues eso, el culo como una berenjena. Silencio y silencio. Lo de este último, es tema tabú para Fredi. Los líos fiscales y los delitos culés los ha rozado someramente y hasta casi los ha justificado. El culeríonacionalismo acojona a Fredi que trata estos asuntos como si fueran de otra galaxia lejana, muy lejana. Tal vez sea miedo, tal vez sepa que allí nadie nunca le dejará meter sus pezuñitas, así pues, para qué perder el tiempo.

Nos dijo, despectivamente, que André Gomes era el nuevo Mateo Kovacic. Eso era cuando Florentino lo iba a fichar. Después lo fichó el Barcelona por un dineral (será suplente) y Alfred silbó y miró al cielo, contó las nubes y puso cara de susto con los nuevos precios. Después mintió a sus lectores, afirmando que el Barcelona sí atendía a la petición de Luis Enrique, cosa que provocaba la envida de Zidane, cuando todos sabíamos que el entrenador no había pedido al mediapunta portugués y sí un delantero centro (en ello están). Nos contó lo de Pogbá y lo utilizó para argumentar una derrota. Recuerden: Florentino no ficha lo que le pide Zidane; los jugadores lo saben y ven a Zidane como un entrenador débil y sin personalidad; deciden salir a tocarse la bolsa escrotal en el primer partido de pretemporada. Del porqué los jugadores decidieron dejar de tocarse el níspero en los partidos posteriores, Alfred no sabe/no contesta.

Finalmente Pogbá fue fichado por Mourinho, cosa que se sabía casi desde primeros de julio. El precio, la comisión y el sueldo, eran lo que eran, menos para Fredi, para quien dejaron de ser lo que sí hubieran sido caso de ser fichado por Florentino. Lo sabemos todos. Y es que Fredi, a fuerza de tanto repetir incoherencias y miserias, se ha hecho absolutamente predecible en sus diarias gilipolleces. Todos sabemos lo que hubiera escrito caso de haber sido fichado por el Madrid.

El Madrid ha ganado la Supercopa de Europa. Fredi no ha calificado la victoria de vergonzante o conseguida de aquella manera y yo barrunto que no es por falta de ganas. Habla muy bien de Asensio, pero su editorial no cita ni una sola vez a Florentino. Las cosas de Fredi, que cuando pierde el Madrid, atiborra sus editoriales con continuas referencias al susodicho. Él y todos los demás sabemos los porqués. Del mismo modo que todos sabemos lo que hubiera escrito en los tres parrafillos de rigor, caso de haber perdido el Madrid. Es más, todos sabemos lo que escribirá tras la próxima derrota del Madrid, cualquier derrota, da igual. O si no, desmiéntanmelo:

Con Pogbá no hubiera ocurrido

Ayer noche perdió el Madrid un partido que puede que le cueste la consecución de un gran título. Se vio a los jugadores desubicados y con aparente falta de actitud y de compromiso. En realidad el partido de ayer no se perdió ayer, se empezó a perder allá por el mes de julio de 2016 cuando el entrenador pidió al presidente el fichaje de Pogbá y éste, tan manirroto para otras cuestiones, desoyó la petición de Zidane.

La desatención de Florentino hay que analizarla en dos planos diferentes, muy importantes ambos. En el plano puramente futbolístico es clara la falta de algo de músculo en el centro del campo. Pogbá lo aportaba, pero no solo eso, aportaba calidad, conducción y gol. Eso es lo que pedía Zidane, que algo debió ver  para pedir lo que pidió, y eso es lo que lo negó Florentino, tal vez crecido por la Champions y por la Supercopa de Europa, títulos ganados a base de talento individual y con foto finish. Títulos grandes ganados de manera pequeña.

Zidane hizo una petición que él entendió justa y que aportaba equilibrio a la plantilla y cuya falta ayer mismo pudimos constatar. Así pues, estamos ante una plantilla confeccionada a golpe de ventolera y hecha sin cabeza. Esta vez el caprichoso comportamiento de Florentino, dado al dispendio más absoluto o a la cicatería exagerada, no atendió a su entrenador y ya se están empezando a pagar las consecuencias. Todo ello sin olvidar ese otro segundo plano: la autoridad del entrenador frente a sus jugadores. Florentino ha desautorizado a Zidane delante de ellos. Éstos le han tomado la matrícula y se lo hicieron saber ayer noche. Y se lo harán saber nuevamente, cuando los esfuerzos a realizar les vengan a contramano.

Y vámonos que nos vamos. Pero antes de acabar les voy a dar una vuelta más de tuerca. Ahora imagínense que Florentino, efectivamente, hubiera fichado a Pogbá. Próxima derrota del Madrid, cualquier derrota, con Pogbá en sus filas. He aquí los tres párrafos de Alfred.

Con un director técnico no hubiera ocurrido

Ayer noche perdió el Madrid un partido que puede que le cueste la consecución de un gran título. Se vio a los jugadores desubicados y con aparente falta de actitud y de compromiso. En realidad el partido de ayer no se perdió ayer, se empezó a perder allá por el mes de julio de 2016 cuando el entrenador pidió al presidente el fichaje de Pogbá y éste, tan manirroto como de costumbre, atendió la petición de Zidane, sin pararse a pensar en otras cuestiones, como la estabilidad de la plantilla o la opinión experta de un director técnico (que no tiene) sobre las necesidades reales del equipo.

El nuevo capricho de Florentino hay que analizarlo en dos planos diferentes, muy importantes ambos. En el plano puramente futbolístico era clara la falta de algo de músculo en el centro del campo. Pogbá lo aportaba, pero no solo eso, aportaba calidad, conducción y gol. Pero de esto último el Madrid está sobrado. Se trataba de fichar un Makelele que diera consistencia al centro del campo. Los makeleles no cuestan 120 millones de euros, cuestan la quinta parte y no son glamurosos ni abren las noticias de deportes de todos los telediarios, demasiado poco para el caprichoso presidente.

Zidane es una debilidad de Florentino que siempre le complacerá sin reparar en gastos. Le entregó el filial sin que éste hubiera demostrado nada y sin tan siquiera estar en posesión del preceptivo carnet.  Pogbá es un buen jugador, eso es innegable. Siempre ha mantenido una excelente relación con su entrenador, casualmente francés, como él. Como Benzemá, jugador que también goza de los favores y privilegios de Zidane. Todo sospechosamente casual. Y qué decir de ese otro segundo plano: la autoridad del entrenador frente a sus jugadores. Se ha fichado a un jugador por 120 millones de euros  y se ha pagado una millonada en comisiones y en sueldos, mientras a otros se les regatea hasta el último céntimo en las renovaciones. Y ello a propuesta del entrenador. Los jugadores ven a su entrenador como otro caprichoso que ha puesto por delante de ellos a un extraño que les triplica en sueldo, mientras ellos se han de batir el cobre contra el Granada, el Alavés o similares. Han Llegado al límite de su paciencia y han venido las derrotas. Con un director técnico, con mando en plaza, no hubiera pasado.

Ustedes lo saben. Yo también. Alfred también. En eso consiste el editorial metisaca: contar lo que me salga de los cojones y si la realidad me desmiente, callar o contar lo contrario sin que se me caiga la cara de vergüenza. Ben Bradlee: “El fundamento del periodismo es buscar la verdad y contarla”, que es justamente lo contraria a lo que hace Alfred Butano.