CRÓNICA | El cirujano perseverante (II): Real Madrid 2 – 0 RCD Mallorca

Una crónica de: @MiedoEscenico2

Ya desde el anuncio de la alineación que Zinedine Zidane había decidido oponer al Mallorca, se encendió la alarma: en otro quiebro a la afición, el francés decidía poner en el campo a Courtois; Carvajal, Varane, Ramos, Mendy; un esquelético centro del campo formado por Valverde y Modric; y, arriba, artillería pesada: Vinicius, Benzema, Hazard y… Gareth Bale. Es decir, un 4-2-4, con vocación ofensiva y dispuesto a romper la jaula que el equipo bermellón preparó en el partido de la primera vuelta. En un acto de chulería, si aquel funesto día el equipo hizo aguas por el centro del campo, esta noche decidió jugar prácticamente sin centro del campo.

Hay un viejo axioma que dice que quienes hacen bueno el sistema son los jugadores. La verdad es que cualquier expectativa que el madridista se hubiera formado asociado a la idea de jugar con esos cuatro delanteros al mismo tiempo, duró cinco minutos. Un par de llegadas a línea de fondo por el lado izquierdo del ataque madridista y poco más. A partir de ahí, se abrió un partido donde el equipo blanco no controlaba el centro del campo, y aun así se empeñaba en que todos los ataques pasaran por su pareja de medios, en lugar de buscar proyecciones del balón en largo que castigaran al Mallorca rompiendo su intento de presión. Mientras tanto, Courtois tenía que estirarse a fondo para llegar a desviar un remate de Babá con muy mala baba y bastante potencia y colocación.

El caso es que Bale acabó ayudando a Carvajal más que apareciendo en ataque; porque un remate desde fuera del área fue prácticamente su única aportación, aunque generó a Reina problemas y tuvo que desviarlo a córner. Mientras tanto, Hazard pululaba por el campo, no ayudaba en la presión a la defensa mallorquinista, tocaba poco balón y la sensación que daba es que no lo jugaba con la velocidad necesaria. Benzema trataba de salir a abrir puertas pero tampoco conseguía grandes cosas, y en el remate sólo tuvo una opción y le salió al muñeco, y el único que mantenía su actitud perseverante era el joven Vinicius, que volvía a preparar a Pozo y a Valjent para tener pesadillas la próxima quincena, viendo pasar bólidos a su lado sin apenas alcanzar a ver su sombra.

Efectivamente, fue Vinicius casi la exclusiva arma del equipo blanco, y a fe que volvió a dedicarse a ello con perseverancia. Ya en el minuto 19, el joven brasileño se citó con un pase en profundidad de Modric al que también llegaba Gareth Bale. El chico, en un alarde de personalidad, se quedó con la pelota y, con un toque inesperado, la ponía en las redes. Hablando de redes, en las sociales, una carga legal de Carvajal al inicio de la jugada se convirtió en el caballo de batalla de los antimadridistas para tratar de invalidar el gol. Pero Melero López dijo que no, y casi es preferible que leáis la crónica arbitral de @cubelas13, que lo explica mejor que un servidor,  Tras conseguir el 1-0, Vini volvió a demostrar una actitud intachable unos minutos después. Karim Benzema le puso un balón con la velocidad perfecta y en el sitio perfecto, y el joven extremo, que entraba como una moto GP, remató en vaselina de una manera fantástica, pero el balón se estrelló en el larguero.

Decíamos antes que Bale estaba dedicándose a ayudar a Carvajal, pero en el partido de hoy, ni Fernando Hierro y Puyol juntos hubieran valido. El de Leganés fue un juguete en manos de Lago Junior, que le ganó a veces por velocidad, otras por fuerza, y otras por habilidad. Afortunadamente, el boquete en ese flanco no se vio finalizado por los bermellones con goles. Respecto a Kubo, bueno, es un chaval con mucha técnica, pero a mí me da la sensación de que tiene un círculo de acción muy reducido. Parece que esté jugando al fútbol-sala en un campo de fútbol, y tiene su interés exótico, pero le falta un hervor. Abro paraguas. Cierto es que tenía enfrente a Mendy o a Ramos, con los que es mejor no encontrarse en una esquina de Valdebebas, pero la vida es así.

De ahí al descanso, la verdad es que tampoco hubo nada interesante. Un par de corners a favor del Mallorca le dieron algo de picante al descuento, pero poco más. La vuelta de vestuarios dio la sensación de que el Madrid salía con ganas de dar matarile al partido, no sé si les suena de algo, como el inicio de esta crónica. El caso es que hubo una carrera de Vinicius, un remate de Benzema que detuvo el portero, otro de Bale que acabó en córner, y en el saque de ese córner, en el intento de salida del Mallorca, un defensor cometió mano. El árbitro pitó falta directa, y Ramos se la pidió, corriendo el minuto 56. Y no sólo se la pidió. Cargó su fusil, le pegó con maestría, la bala cogió efecto y el balón acabó en la escuadra de Reina, una maravilla de lanzamiento directo de friqui, que le convirtió en el defensa más goleador de la historia de la Liga. El 2-0 fue para Zinedine Zidane la señal de que el experimento había finalizado, y decidió dar entrada a Toni Kroos por Eden Hazard en el minuto 62, cambiando a un sistema más normalizado. El teutón fue una válvula de oxígeno, uno más en la presión arriba, y un buen cauce para dar salida a la pelota desde atrás.

En el minuto 70, volvía Zidane a mover el banquillo, y sacaba de una tacada a los PichaBros, Asensio e Isco, Isco y Asensio, en lugar de Modric –evidentemente cansado- y Gareth Bale, algo desconectado en la segunda parte. De todas maneras, el Madrid, desde ahí hasta el final, fue ganando peso en el control del juego, y a medida que recuperaba su estructura más normalizada, fue jugando algo mejor. Para rematar la rueda de cambios, entraron en el minuto 83 Brahim y Mariano para dar descanso a Benzema y al auténtico protagonista del partido (otra vez), Vinicius Junior. El Mallorca hizo debutar a un chaval de 15 años, lo cual da idea de la prisa de algunos, pero el marcador no se movió desde ahí hasta el final.

Al final tendremos que darle al razón al biermeister @pepo2204, y admitir que es mejor comerse una ensaimada que tener una empanada. Aunque hoy hubo un poco de todo, la verdad. El domingo, recuperado el liderato, espera el campo de Cornellá, otra de esas salidas complicadas, contra un equipo que está jugándose el bigote. De momento, si tenemos a Vinicius, dormiremos tranquilos. No como los pobres defensas que le intentan parar.

 

RESULTADO FINAL: REAL MADRID, 2 – R.C.D. MALLORCA, 0.

 

GOLES:

1-0: 19′ Vinicius Júnior (asistencia de Modric)

2-0: 56′ Sergio Ramos (libre directo)

 

REAL MADRID: Courtois; Carvajal, Varane, Ramos, Mendy; Valverde, Modric (Isco, m.71); Vinicius (Brahim, m.83), Benzema (Mariano, m.83), Hazard (Kroos, min. 62) y Bale (Asensio, m. 71).

 

ÁRBITRO: Melero López (Comité Andaluz). Mostró tarjetas amarillas a Ramos (min. 35), Modric (min. 46), Mendy (min. 80) y Kroos (min. 87).


Imagenes: realmadrid.com