CRÓNICA | Partido sólido: Iberostar Tenerife 71 – 76 Real Madrid

Una crónica de: Teresa Arredondo

Tras un debut más que meritorio en Euroliga y entre los rumores del, a esta hora casi confirmado fichaje de Mejri y las declaraciones de Pablo Laso sobre el estado de forma de Trey, terminamos la semana baloncestística del Real Madrid jugando en una cancha complicada, la del pabellón Santiago Martín de Tenerife, más conocido como La Hamburguesa. Enfrente, un equipo lleno de viejos conocidos de la ACB y del Real Madrid, la mayoría de los cuales visten de amarillo por primera vez, ya que parece que el equipo tinerfeño ha querido reforzarse bien esta temporada, entre los que ha destacado el paso al frente de nuestro hasta hace poco Santi Yusta, el peinado imposible de Marcelinho Huertas (si no lo digo, reviento) y el oficio de Shermadini, al que no vamos a descubrir a estas alturas de la película, pero que parece el único pívot capaz de plantar cara a Tavares y salir bastante indemne del lance.

Empezamos el partido con Campazzo, Rudy, Tavares, Deck y un Garuba que parece que no va a caer de momento de las rotaciones de Laso, quien, sin embargo, no convocó hoy a Nakic y tampoco se llevó a Trey Thompkins, por las razones que ya explicó Laso esta semana. La apuesta esta vez no funcionó tan bien, al menos hasta el primer tiempo muerto, con un parcial de 11-8 que se convertiría en un 11-18 a favor de los blancos al final del primer cuarto.

El segundo cuarto estuvo bastante igualado en el marcador y el quinteto inicial, absolutamente diferente al del primer cuarto, igualó bastante el acierto en el tiro también, ya que anotaron todos. Lo iniciaron Causeur, Jordan Mickey, Llull, Jeff Taylor y Felipe Reyes. Un cuarto serio, en el que defendimos mejor pero no pudimos estar del todo cómodos, ya que el balón hoy no quiso entrar todas las veces que lanzamos. Al descanso nos fuimos con un 34-38.

Imagen: cbcanarias.net

El segundo tiempo comenzó en cancha con Campazzo, Rudy Fernández, Deck, Randolph y Tavares y una pájara bastante importante, que nos brindó como resultado un parcial de 9-0 hasta el primer tiempo muerto de Laso, que consiguió entre otras cosas centrar un poco a Randolph. A destacar un tapón legal de Jordan Mickey, que, a pesar de todo, desató las protestas del público, un público que hacía un ruido infernal en el pabellón a juzgar por el que se colaba por los micrófonos, un público de los que protestan absolutamente todo. No nos quedó muy claro el porqué respirar cerca de un jugador del Iberostar era considerado siempre como antideportiva, pero por suerte para todos, los árbitros consiguieron abstraerse un poco de ese ambiente y los telespectadores del baile de números en el marcador (la retransmisión de Movistar con sus tiros de campo imposibles y el poco acierto a la hora de ir subiendo los puntos es digna de enmarcar). Con todo, y algo de mejora en el tiro, acabamos con un 54-52 el tercer cuarto.

El último cuarto del partido lo iniciaron Llull, Rudy, Deck, Taylor y Jordan Mickey y el marcador fue ajustándose hasta un triple de Jeff, que ha firmado un partido bastante serio y consiguió ponernos en un 61-62. A partir de ahí, hemos conseguido ir aguantando el empuje de los locales, que han visto volar a un Jordan pero que esta vez se vistió de blanco, vaya salto en el mate que nos ha brindado nuestro Jordan casero en el día de hoy. Con algunas decisiones no muy acertadas (Tavares bajando el balón cuando podía encestar con comodidad, por ejemplo, aunque el bueno de Edy terminó aportando también), pero con un Llull en su versión de “increíble”, no en vano hoy ha anotado 19 puntos, terminamos el partido con un 71-76, gracias a los dos últimos triples del partido precisamente de Sergi. Dos triplazos.

En resumen, si queremos hacernos una idea del partido del Madrid, yo recomiendo escuchar a Pablo Laso en uno de sus tiempos muertos: indicando primero uno a uno a quién tienen que defender y posteriormente marcando las jugadas en ataque, que es como hemos conseguido construir un partido sólido, edificado desde la defensa. Solamente así podemos explicar los porcentajes, que hoy no estuvieron de nuestro lado (23 rebotes frente a 26 del Iberostar, 5 de 8 en tiros libres…), salvo en el de tiros de campo y triples, donde el Tenerife estuvo bastante peor. Le preguntaron a Txus Vidorreta al final del encuentro qué había sobrado o faltado y contestó con un escueto “ha sobrado Llull”. Bueno, no creo que sea la única lectura del partido. Pero entiendo que a ellos les haya sobrado.