OPINIÓN | Sergio Ramos 2020

Un articulo de: @Puce_El

Así a bote pronto, suena a película de ciencia ficción. En mi caso, suena a película de terror de esas que te dejan una desazón en el cuerpo muy incómoda y desagradable.

Tengo que admitir que me invadía cierta esperanza con respecto a este tema, ya que parecía estar todo muy a favor de que “Canelita” fuera a dejar el Real Madrid rumbo a Manchester. No ha sido así, quizá por desgracia para el club y muchos de sus aficionados. Pero hay una gran parte de personas ajenas y propias al Real Madrid que me consta, sí se alegran de su renovación.

A mi manera de ver, renovar a un “señor” por 8,5 Millones de Euros netos al año (17 brutos) hasta que este cumpla los 34 años… ¡Tiene guasa! Y no es que la tenga por que va a cobrar un dineral hasta casi su jubilación, si no porque no sabemos a qué Ramos se ha renovado. No sabemos si hemos renovado a Canelita o a Sergio Ramos. Es ahí donde está el problema de todo esto.

Florentino ha metido la pata hasta el fondo, quizá llevado por el terror que le provocaba el imaginarse a un Bernabéu repleto de “devoradores de semillas de girasol” con mirada perdida y labios resecos, ataviados de sus auriculares, diario deportivo en mano y bocata de pamplonica, pidiendo su cabeza por tan alto atrevimiento.

“¡Quién demonios se cree este personaje para vender el patrimonio del club, al tío mas madridista de la plantilla!”.

“¡No, si ya lo dijo Manolo Lama. Se ha sentido maltratado y su orgullo le ha llevado a querer irse. ¡FLORENTINO DIMISION!”.

En serio, ¿No os imagináis a Tito Floren pensando esto?. ¡No mintáis, vosotros también lo habéis pensado!. En mi caso hasta me los imagino escupiendo pedazos del bocata mientras berrean lo anteriormente dicho y se limpian las babas con la bufanda…

Es lógico pensarlo. La situación de Florentino Pérez en este tema es complicada. Pero tal y como yo lo veo, ha perdido una oportunidad única de hacerse de una vez por todas con el mando del vestuario blanco. No es necesario decir que ha desaprovechado la ocasión. Le ha podido esa cobardía que enmascara detrás del “señorío” (su señorío) que dice enarbolar en nombre de Don Santiago Bernabéu. Para los más veteranos Madridistas, el señorío de Florentino no vale un céntimo. Como todos ellos saben, el autentico señorío del Real Madrid y de Santiago Bernabéu hubieran acabado con los pies de Ramos fuera del club a las primeras de cambio.

Los continuos chantajes, “rumores”, “filtraciones” y desplantes a los que hemos sido testigos durante este verano por parte de su entorno y amigos periodistas, habrían tenido su castigo con un presidente “con señorío y cojones” (si se me permite decir señorío, claro).

Muchos diréis que “a ver quién es el guapo que después se sienta en el palco”, pero nada hubiera sido tan fácil como convocar a los medios para dirigirse a la afición del Real Madrid y decirles a la cara, que este personaje se ha atrevido a chantajear al club, a poner en duda su manera de hacer las cosas, a exigirle un dinero que no se ha ganado, por mucho 92:48 que valga y que por ahí, el club… ¡NO PASA!.

Que nadie tiene categoría suficiente como para poner contra la espada y la pared a una institución como el Real Madrid. Y que en este club, no se vive de rentas pasadas, ni de goles históricos. Se vive del día a día, de los títulos ganados año tras año y que sólo en esas circunstancias se puede sentar un presidente a negociar.

Lo sé… Soñar es gratis. De haber sido así, el señor Pérez se habría ganado todos mis respetos. Pero no es el caso.

Hace apenas unas horas hemos vivido como de nuevo el Real Madrid con su presidente a la cabeza, se ha bajado los pantalones ante René y Sergio Ramos. Hemos sido testigos de un esperpento lleno de falsas sonrisas, hipocresía y falsedad en su máximo esplendor, donde el presidente del Real Madrid parecía un pelele en manos de peleles que le daban palmaditas en la espalda como el que da palmaditas a un perro cuando te trae la pelotita.

Hemos escuchado cómo el “capitán” del Real Madrid nos ha mentido a la cara y ha jugado con las palabras (ya escritas en un inmaculado folio blanco, vaya ustedes a saber por quién) para decirnos cosas como: “Nunca he hablado de mi renovación y menos teniendo un contrato en vigor que eran dos años”,“Nunca me ha movido el dinero ni hablaré de dinero”,“Nunca he dicho que me quiera ir”. Y la mejor de todas…; “Es cierto que no estaba cómodo aquí en algunos sentidos. Jamás he dicho que me quería marchar del Madrid pero no podía seguir así. Y veis que lo económico es lo último que menciono. Pero hay cosas que había que hablar, también anímicas. Mi felicidad está aquí, para qué perder el tiempo en otro sitio».

Tiene razón… él jamás ha dicho ninguna de estas cosas. Pero queda claro que todas ellas eran ciertas, que sin duda las pensaba. Ya se encargaron sus portavoces ¿No oficiales? de decirlas. Yo nunca dije, pero digo… y a buen entendedor…

Desde aquí, dar la enhorabuena a Florentino Pérez por cambiar el “caso Casillas” por “El caso Ramos”. ¡Casi no nos hemos dado cuenta presi!. Pero descuida, que has comprado la paz con parte de la prensa durante un tiempo, a razón de 17 “kilos” por temporada. Ya no tendrás en la presentación de Kovacic a un millar o dos o tres de “quinceañeras/os” pidiendo tu cabeza en una pica. Tranquilo.

Queda más que claro, que el club está en manos de jugadores, prensa, presidente y socios, (por este orden) y que siempre nos quedará a muchos el sabor agridulce de lo que podría haber sido y no fue en el verano de 2015.

Pero de eso, ya se acordarán muchos que ahora no lo ven, antes de 2020. Algunos, llevamos ya mucho tiempo viendo venir este desastre y me temo que no va a ser el último.

Ojalá, el paso del tiempo me quite la razón y convierta éste, mi debut como colaborador en una web madridista (El Diario de Mou), en un arma arrojadiza que me explote en la cara. Será síntoma de que al Real Madrid le va bien y que Florentino Pérez hizo lo correcto y que yo soy “otro tarado morriñista y biolento que no tiene ni puñetera idea de furgol”.

De lo que no me podrán acusar, es de no querer lo que me parece mejor para el club de mi vida. Pero claro… Ésta es mi opinión os guste o no.

Sed malos.

¡¡HALA MADRID!!