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Una crónica de: @ILovebasket34
Casi 9000 espectadores se citaron en el Wizink Center de Madrid para presenciar El Real Madrid vs AJ Milán. Antes de empezar, la Euroleague brindaba un gran homenaje a nuestro capitán, y es que Felipe Reyes se convertía en el jugador con más partidos disputados en la Euroliga, «oh capitán, mi capitán» decían algunos.
Empezó el partido con un acierto casi total de los italianos, si bien la defensa del Madrid ni molestaba, ni punteaba, para cuando quisieron darse cuenta – y no era por las rabietas de Laso – se acababa el primer cuarto con un claro y contundente 19-33 para los italianos, que jugarón muy cómodos.
Todo cambiaría paulitanamente con la entrada de Rodolfo Fernández, y es que nuestro Rudy fue capaz de ir transmitiendo a sus compañeros el hambre, la necesidad de crecer desde la defensa, lo que antes eran canastas cómodas visitantes, ya no eran cómodas, el Madrid empezaba a defender y en un segundo cuarto más propio del Real Madrid se acercaban al conjunto italiano y maquillaban el resultado, con un parcial de 31-23 favorable a los nuestros se llegaba a un 50-56 favorable a los italianos al final del segundo cuarto.
Imagen: euroleague.net
Con 56 puntos recibidos al descanso, con un Mike James en plan estelar, el Madrid necesitaba parar la sangría, los jugadores comprendieron que el partido era vital para asegurar la tercera plaza, y aceptaron el reto, en un tercer cuarto muy trabajado e intenso, con Rudy marcando el camino lograron imponerse con un parcial de 24-19, dejando el resultado de 74-75 para los italianos.
Hay que valorar lo que está logrando este equipo, seguramente estamos muy mal acostumbrados, y es que un conjunto como el italiano llegaba vivo al último cuarto, por parte de los italianos James parecía no acumular cansancio, Randolph sudaba para anotar, pero nuestro equipo estaba dispuesto a sudar para ganar, un triple de James nos puso el corazón a mil revoluciones, pues los italianos como Claudio Chiapucci hacían la goma y no terminaban de descolgarse del partido. En los últimos minutos del partido veriamos una de las mejores jugadas del choque, robo espectacular del Facu y asistencia por detrás a un Trey Thompkins que venía de trailer y se colgaba del aro milanés. Quedaban 2 minutos y aunque Armani no se rindió y tuvo un triple para intentar forzar la prórroga, el Real Madrid se llevó un triunfo muy trabajado.
La moraleja del partido es la siguiente: Nadie es fácil de ganar, los partidos se juegan 40 minutos desde el principio hasta el final, hoy ha salido bien y contra un rival de mucha entidad, pero no siempre se puede regalar un cuarto en esta competición.
