por Un articulo de: @riduran_p
Hasta aquí he llegado. No quiero seguir engañándome. «Éste no es mi Madrid, que me lo han cambiao». Si hoy volviera a ser niño veo imposible que me enamorara de un equipo así. Un equipo de perdedores. De jugadores sin compromiso alguno con la camiseta. Sin orgullo de pertenecer al Madrid. Sin vergüenza ante las repetidas humillaciones. Sin hambre de títulos. Desmesurados ególatras que sólo piensan en sí mismos. En sus selecciones (sea Colombia, Portugal, Gales, Croacia, Brasil o España, en ellas se emplean a fondo, cosa que no siempre hacen en el club que las paga). En sus compromisos publicitarios. En sus números y premios individuales. Unos jugadores engreídos fuera y dentro del campo. Fuera, despreciando al aficionado mediante aparatosos cascos donde sabe dios quien será el Michel Teló o Kevin Roldán de turno que estará fundiendo las escasas neuronas de esas cabecitas. Dentro, despreciando al rival, dando una imagen de superioridad que al final no se refleja en el marcador, y que sólo esporádicamente se refleja en algún título aislado. Llevamos 50 años sin conseguir Liga y UCL en la misma temporada. Éso exige demasiado esfuerzo para las estrellas del olimpo blanco. Tales trabajos tan humillantes se los dejamos a los plebeyos del Barcelona, que entre fraudes fiscales y visitas al juzgado aún encuentran tiempo para hartarse de tripletes. Como si los regalaran. Bueno vale, un poco les ayudan. Siempre aparece el Ovrebo de turno para echar una mano si lo necesitan. Pero eso no debe ocultar nuestras carencias. Y son gravísimas. Hemos perdido nuestra grandeza (ya sólo existe en las vitrinas del Bernabéu, pero hemos dejado de ser el equipo de referencia). Hemos olvidado nuestros valores (la lucha hasta el último segundo, no bajar los brazos hasta que no pite el árbitro, la fé en la victoria). No se vé espíritu de sacrificio (predomina el egoísmo, las individualidades sobre el trabajo en equipo).
Os decía que no quiero seguir engañándome. Hasta los tres últimos partidos creía que nuestro mayor enemigo era la Prensa. Y tras la Prensa, ese Barcelona arrollador que sufrimos en esta década. Me equivocaba. Al peor enemigo lo tenemos en casa. Sé que ésto puede doler a muchos, a mí me ha costado mucho aceptarlo. Pero mi intención escribiendo estas líneas no es hacer amigos, sino deciros lo que siento. Su brillante gestión económica eclipsaba el desastre deportivo e institucional al que nos ha llevado. Es él quien ha convertido a los jugadores en despóticos tiranos, que con el respaldo mediático oportuno, manejan nuestro Club. Es él quien tolera su falta de actitud en el campo. Es él quien les permite sabotear a técnicos y cargarse proyectos deportivos prometredores. Es él quien con voz temblorosa pidió disculpas a la prensa por algo de lo que un madridista digno debería sentirse tremendamente orgulloso, la salida de alguien tan tóxico como Casillas. Es él quien premia un chantaje en forma de culebrón veraniego con una renovación vitalicia y subida salarial que nada tiene que envidiar a aquellas de Calderón que tanto daño nos hicieron. La renovación de Canelo es un mensaje letal al resto de la plantilla. Es él quien ha «piperizado» a la afición a su imagen y semejanza. Es él quien ha convertido el Bernabéu en una atracción turística más, repleta de asiáticos, con precios prohibitivos. Es él quien ha llevado al Madrid al mayor grado de sometimiento a la Prensa, que influye decisivamente en titularidades y renovaciones, y a la que encima premia con acreditaciones sin restricción y acudiendo a sus programas a dejarse zarandear.
Y por último, lo más importante, es él quien perdió la gran oportunidad de dar vuelta al funcionamiento del Madrid. PONER A LOS JUGADORES POR DEBAJO DEL TÉCNICO. Sobre todo cuando éste tanto bien nos había hecho. Con Mourinho habíamos sometido a los que yo consideraba principales enemigos, la Prensa y el Barcelona de Pep. A ambos los venció. Pero Flóper le apuñaló por la espalda. ¡Cobardemente! Sometiéndonos a todos al chantaje de los capitanes y Cristiano. permitiendo que además le «hicieran la cama» provocando un año en blanco. No creo que volvamos a tener una oportunidad así, para dejar de ser el cortijo en que nos hemos convertido. Nos ha puesto en manos de esos que os describía en el primer párrafo. No se lo perdonaré. Como jamás le perdonaré haberme hecho perder la fe en ganar algo esta temporada. Un Madridista sin fe en la victoria… Un Madridista sin fe en ganar sencillamente no es un Madridista. Hasta eso me ha robado Florentino. Por eso debe irse. Puede que venga uno peor. Correré el riesgo. Sinceramente, me parece difícil empeorar este Madrid. Vamos a por el sexto año en blanco. 6 en blanco de 12. Repito, 6 en blanco de 12. ¡Telita! 2 UCL, 3 Ligas y 2 Copas. La etapa más pobre del Madrid desde que se creó la Copa de Europa. Mendoza ganó 5 Ligas seguidas. Sanz, 2 UCL. No veníamos del desierto cuando usted llegó. En estos 12 años han pasado infinidad de jugadores y un montón de entrenadores. Ninguno le ha servido para liderar un proyecto a medio plazo. No ha querido delegar la faceta deportiva. Y ha fracasado. Florentino, es el problema.
Por eso grito esta noche ¡VÁYASE SEÑOR PÉREZ! ¡FLORENTINO DIMISIÓN!. Ni siquiera hacerle el juego a Relaño me atemoriza. Creo que al menos con Prisa se nos respetaría más que con usted, que nunca nos defiende frente a los contínuos ataques que sufrimos, que se ha dejado «comer la tostada» en cuanto a influencia en la RFEF. Cada día pintamos menos. ¿De qué nos sirve entonces encabezar la Lista Forbes?. Para usted todo es culpa de US. Ha creado una Grada de Animación sumisa, que produce lástima. Su televisión, RMTV, es una auténtica fábrica de piperos. Por todo ésto lo considero nuestro enemigo, Sr. Presidente, nuestro enemigo Nº1.
