CRÓNICA | El Madrid se da un homenaje: Real Madrid 5 – 0 Sevilla

Una crónica de: Manuel Pérez Abascal

El Real Madrid vive. Sus constantes vitales se mantienen, empieza a respirar por sí solo… y eso es una gran noticia para un madridismo ávido de ellas.

El equipo de Zidane siguió la línea continuista de lo vivido el miércoles contra el Dortmund y se dio un pequeño homenaje a costa de un Sevilla en horas bajas. El Madrid más reconocible se ha asomó hoy en los primeros cuarenta y cinco minutos, donde en tan sólo en un espacio de 15’ de duda madridista sin saber si ir a por el rival o resguardarse atrás, se mostró agresivo, dinámico, con chispa y pegada.


Dominando a partir del segundo gol todos los registros del juego presionando al poseedor del balón, robando y saliendo rápido a la contra e incluso haciendo rápidas transiciones defensa- ataque como en el gol de Kroos. Aprovechado las facilidades defensivas del Sevilla, huérfano de la contundente figura defensiva de N’Zonzi en medio campo y sin ningún tipo de mordiente ofensiva. Pero lejos de minimizar los grandes minutos del Madrid atizando al Sevilla, soy más partidario y proclive a ensalzar el buen hacer de todo el plantel que partir del 2o gol desató una tormenta que esperemos no se calme mostrando una clara mejora y señalando el camino a seguir.

Las bajas no fueron y no deben ser una excusa nunca en este club cuando tiene un fondo de armario con tantas y buenas posibilidades. Nacho y Vallejo formaron una dupla central sólida, rocosa y con un nivel de intensidad que no disminuyó aún cuando el partido estaba decidido. 

Achraf, se mostró decidido, incisivo, superlativo en defensa y ambicioso en ataque. Ha demostrado en pleno proceso de formación que se le da mejor trazar diagonales y definir que llegar y centrar. Apunta a lateral de futuro. Modrić y Kroos como medios centros pero proyectándose en ataque, Kroos con mayor libertad y el croata guardando más la posición mostrando que esa no es su posición ideal, donde marca la diferencia. Durante el segundo tiempo y con la salida de Marcos Llorente todo cambió y se liberó de encorsetadas situaciones tácticas. Asensio y Lucas Vázquez confirmando su mejoría. El mallorquín con jerarquía, mostrando influencia directa en todo el frente de ataque y el gallego apareciendo desde la banda, beneficiándose del 2×1 que le proporcionaba Achraf para poder ir hacia dentro o ganar la línea de fondo. Buen y decisiva aportación de ambos.

Mención especial a la mejora que está viviendo Cristiano. Partiendo desde la izquierda definitivamente es otro, o es el mismo para ser más exactos. Ha abandonado el centro del área y es feliz volviendo a los orígenes, ha recuperado el punto de velocidad… y lo más importante: el gol. El Madrid necesita los goles de Cristiano como Cristiano necesita la aportación de todos.

Pero lo suyo que empezó como un homenaje individual, se convirtió en un homenaje grupal de un primer tiempo coral. Cristiano sumó su quinto balón de oro en un contexto tremendamente complejo y complicado. El Madrid está solo y por extensión, también parece estarlo el portugués ante la opinión pública. Lo de Cristiano es tan meritorio como extraordinario. Ante la mejor versión histórica del Barcelona y de Messi, Cristiano ha sido capaz de igualar esa diferencia a base de trabajo, tesón y una fe en sí mismo inquebrantable. Pero de intangibles no está compuesto sólo el “7”, es un virtuoso de este deporte y el gol cuyo valor es incalculable, lleva su nombre. Cristiano es de oro y ha sido el mejor este curso, pese a quién le pese.

La historia terminó en el descanso. El Madrid se dedicó a nadar y guardar la ropa economizando energías. Zidane lanzó un guiño a Llorente, Ceballos e Isco y les dio minutos. Una manera de decirles que cuentan todos. Ahora espera el Mundial de clubes, una oportunidad estupenda para seguir engrandeciendo la figura del club y de cerrar un año inolvidable.