Los intocables de Eliot Ness

Un articulo de: @resurreccion_93

Se me viene a la memoria la cara de satisfacción de Eliot Ness cuando finalmente el juez corrupto condena a Al Capone a la cárcel a pesar de los ímprobos esfuerzos de la policía corrupta, de los fiscales vendidos y de los sicarios cobardes y sin piedad. Es cierto que fue sólo por un delito fiscal, un grano de arena dentro de la historia criminal más abyecta y sangrienta del hampa americano. Capone había campado a sus anchas por el Chicago de los años 20 a pesar de haber ejecutado a cientos de personas, extorsionado a miles de trabajadores, sobornado y robado sin parar con total impunidad, y a pesar de que todo eso era sabido fue condenado por un simple delito fiscal (cómo algún club de fútbol) pero ese fue el principio de su fin. En su desesperación al oír la sentencia se lió a golpes con su propio abogado mientras profería gritos amenazantes hacia el juez a la vez que cínicamente clamaba justicia, increíble desvergüenza en uno de los mayores delincuentes de la historia.

Eliot sonreía con satisfacción sobre todo recordando al bueno de Jim Malone, aquel viejo y rudo policía irlandés que le enseñó que con los criminales, con la mafia y con el hampa el señorío consistía en plantarles cara y usar sus mismas armas. Cuando Eliot abogaba por utilizar el buenismo, la legalidad, la corrección, la LEY, el viejo irlandés (Sir Sean Connery, me pongo de pie) le enseñó que señorío era destruir al criminal bajando al barro a pelear con él, de igual a igual, con sus mismas armas.

No puedo dejar de ver en Eliot Ness al madridismo underground que no quería bajar los brazos ni rendirse ante la dictadura del hampa culerdo, que se fió de ese “viejo” portugués (irlandés o portugués qué más da) con las mismas iniciales J.M (Jim Malone = José Mourinho) y dejamos de callarnos y levantamos la voz ante la injusticia y muchas caretas cayeron y muchos chivatos fueron expulsados y muchos infiltrados descubiertos y alejados y proscritos del madridismo, puestos al descubierto. Casillas, Valdano, Relaño, AS, Lama, Marca, Deportes Cuatro, Villar, Undiano, Clos Gomez… fuisteis descubiertos gracias al valor de JM, Jim Malone, José Mourinho. Su primera victoria en los juzgados fue la Liga de los Records, fue el delito fiscal de Capone, el primero por el que besó la cárcel. Lo que hizo que todo cambiara, que desapareciese el miedo. El hampa federativo al servicio de la mafia culerda siguió trabajando pero ya era inevitable que quedase al descubierto la trama criminal.

En Europa fue más rápido y aunque ha seguido habiendo episodios repugnantes (Oh la lá PSG) no han podido evitar que ganáramos dos UCL y que en dos semanas juguemos una nueva final. Pero en España este cartel futbolístico tenía los resortes mucho mejor atados; cinco años ha costado volver a levantar una Liga porque ganarlas, las habíamos ganado en el campo pero nos las habían robado en los despachos. Ayer levantamos la 33. Ellos no pararán, el capo de la Farsa volverá a gobernar la Federación por unos cuantos años, así que la guerra continuará, pero ya no cabe ninguna duda de que es posible vencerles, contra todo, contra todos, porque somos los buenos, porque somos los mejores, porque nada puede parar a un escudo de leyenda y a una camiseta gloriosa. Sólo hacía falta que un valeroso irlandés, JM, sin miedo a caer en la batalla, abriera los ojos a un equipo amedrentado, sobrecogido, paralizado por una banda de delincuentes de baja estofa. Malone murió tiroteado por la espalda a manos de un sicario cobarde. Mourinho fue “asesinado” mediáticamente por una panda de perros perigolfos rabiosos al servicio de sus jefes desesperados. Pero en ambos casos ya habían hecho su trabajo. Era el principio del fin. Sin ellos hubiese sido imposible. Continuará la batalla hasta la victoria final. Los buenos siempre ganan; Capone se pudrió en la cárcel porque Eliot no abandonó el espíritu de Jim Malone. El Madrid recupera la primacía con el aliento de ese madridismo underground que ha hecho propio el espíritu de JM contra todo y contra todos. Gracias Jim, Obrigado José… 33… CONTINUARÁ.

¡HALA MADRID…  Y NADA MÁS!