PREVIA | Real Madrid vs CSKA: El partido del absurdo

Una previa de: @jmcanasv – losojosdeltigre.com

Pese a estos duros momentos en los que ya no estamos en la lucha por el título, y aunque tal vez nos parezca injusto, hay que reconocer que la mejora en el sistema de competición de la Euroliga ha sido notable. Han sido siete meses de competición durísimos con una igualdad casi absolutas, sorpresas jornada tras jornada y partidos espectaculares.

Sin embargo, esta competición tiene aún un grave lunar. Un error garrafal que los genios de la Euroliga no han sabido subsanar pese a que se viene advirtiendo desde hace años y que ahora afecta al Real Madrid. Con la pesadumbre aún en la cabeza, sin nungún tipo de motivación y sin siquiera una medalla de bronce en juego (al estilo Mundial, Europeo o Juegos Olímpicos) el equipo blanco deberá medirse al CSKA en un partido por el tercer y cuarto puesto que no debería disputarse bajo ningún concepto.

Es cierto que con este partido se intenta justificar el alto precio de los abonos y seguir viendo a tu equipo pese a haber caído eliminado, pero no nos engañemos, si hay alguien a quien no les interesa este partido especialmente es a los aficionados de esos mismos equipos. Con el varapalo del viernes aún dándonos vueltas en la cabeza y con el primer partido de cuartos ligueros a apenas 72 horas (lo de la indignidad de la ACB al dar tan poco descanso a los blancos tanto antes como después de la Final Four ya daría para muchos artículos) el quedar terceros o cuartos, sinceramente, nos importa bien poco a los madridistas. Sensación que, por cierto, no pensamos que sea muy diferente a la que tengan ahora mismo los aficionados del CSKA.

Por desgracia, el sistema es así y hay que jugar este partido, así que intentemos desgastarnos lo menos posible pero también hacerlo de la mejor forma que podamos para acabar con el mejor sabor de boca (dadas las circunstancias) esta Euroliga 2016/2017.

Y es que más allá de cómo quede este intrascendente y absurdo partido hay que quedarse con el camino. Un durísimo sendero en los que nuestro equipo ha dado la cara en todos y cada uno de los partidos (sí, incluso ayer) y en los que sólo un apagón en los primeros minutos de las semifinales ante un poderosísimo anfitrión nos han dejado sin la ilusión de recuperar el cetro europeo.